~° Un rayo de esperanza ~° HXH (Killua x TU)

3°

-Maldita sea "en dos horas"-

El viaje a la colina se extendió bastante, tanto así que la luz de la luna se hizo presente.

-Hace dos horas fueron las dos horas-

Ya llevábamos mucho tiempo caminando y no culpo a Leorio, debe de estar cansado de tanto caminar.

-Leorio, deja de quejarte, muy pronto llegaremos a la cabaña-

Leorio refuto por lo menos 30 minutos seguidos hasta que nos encontramos con un letrero algo particular.

"Cuidado con las bestias mágicas"

-Esten atentos, no bajen la guardia-

Kurapika nos advirtió algo serio, pues es tarde y esos carteles no nos tranquilizan.

Seguimos caminando por unos minutos mas y ese letrero seguía apareciendo por todos lados.

Leorio se distraía con cada uno de los carteles, hasta en un momento casi se queda atrás de no ser porque gritó fuertemente que tenía hambre, ganas de hacer sus necesidades.

-Leorio, no te quedes atras-

Gon le llamo para que se apresurara ya que este tipo de berrinches nos atrasarían mas.

-Creo que ya llegamos-

Voltee hacía el frente y efectivamente, había una cabaña al lado de un árbol enorme.

Leorio corrió hasta nosotros, y poco a poco avanzamos hasta la cabaña.

-Hola. ¿Hay alguien en casa?-

Leorio toco la puerta, y no obtuvo respuesta alguna así que nos adentramos en la cabaña, algo no estaba bien y Senko me lo advirtió minutos antes de tocar la puerta de la cabaña.  

-Vamos a entrar-

Apenas abrimos la puerta nos encontramos con un gran desorden, platos rotos, muebles dañados y sobre todo una criatura mágica. Parecía ser un perro gigante de color amarillo, sus ojos tenían un destello rojo, pero su aura era diferente a su apariencia, no emanaba ni una sola gota de maldad lo que quería decir que era otra etapa, trate de relajarme a pesar de que la criatura no fuera peligrosa.

-¡Una bestia mágica!-

Gritamos a la misma vez, pues fue una sorpresa inesperada.

-Parece ser un kíriko. Pueden tomar forma humana y además son muy inteligentes-

La bestia volteo a nuestra dirección dejándonos ver a una mujer que tomo como rehen, mientras que a un lado estaba un hombre que al parecer estaba herido.

-El hombre del suelo parece estar muy mal herido-

Voltee a ver a los 3 y me di cuenta que era la única que no estaba a la defensiva, seguro porque no me sentí en peligro pero aun así me acomode para pelear. De repente la bestia salto a una de las ventanas que hay en la cabaña, aprovechamos el momento para ver a donde fue que escapó.

-Por favor, auxilio. Salven a mi esposa-

Leorio abrió su maleta y saco unas vendas para sanar al hombre.

-Leorio, Surie, curen las heridas del hombre, Gon y yo iremos por las chica-

Kurapika pidió a Leorio antes de salir corriendo detrás de Gon en busca de la mujer. 

-Si, eso haremos-

Le di una última mirada a Kurapika antes de que saliera corriendo, trate de hacerlo sentir despreocupado, cuando lo perdí de vista voltee con Leorio para ayudarle con el hombre.