Una gota en el océano [Shawn Mendes y Tú]

Capitulo 10 parte 3

La puerta se abre, obviamente es Shawn, me acomodo firme en el asiento del sillón y trato de descifrar su expresión. Él apenas sonríe, sé que está enojado, sé que no es una sonrisa real y a la vez siento que aun así se alegra de verme; es difícil.

Hay un silencio incomodo, la madre de Shawn sabe que tiene que salir de la escena y lo hace sin pensarlo dos veces.

Me paro, mis manos tiemblan, quiero correr, abrazarlo, ver su rostro y ayudarlo a sanar pero algo me detiene y sé que merezco unas disculpas. Él cierra la puerta despacio y se acerca a mí a paso lento, mientras más se acerca puedo notar la contundencia de su moretón y ya logro distinguir el parche color piel cerca de su ceja izquierda, siento mi boca abierta y temblorosa, jamás antes había tenido tantos sentimientos encontrados, siento mis ojos cristalizarse con el último paso que Shawn da hacia mí, nunca he sido realmente sensible ante alguna herida pero con él tendía a sentir el doble en todos los aspectos. Estamos frente a frente pero ninguno rompe el hielo aún.

El me observa callado, trato de imaginar que es lo que piensa pero no logro encontrar nada cerca, su mirada parece vacía y ahora entiendo a Tate cuando dijo que le pareció muy extraño, no es un Shawn enojado, lo he visto enojado antes, tampoco es un Shawn triste y mucho menos uno contento, parece estar dolido, cansado... parece hartado.

Mis lágrimas caen con una sola palabra que él dice: _____.- Él toma un respiro- Lo siento.

Limpio mis lágrimas, él no lo haría de todas formas, trato de tomar valor- ¿Quién te hizo daño?

-Eso no interesa... dije que no era de tu incumbencia.

Mi ceño esta fruncido, no entiendo nada- ¿Por qué te disculpas y luego repites la acción?

Él sopla una pequeña risa, algo andaba mal- No me he disculpado por decir que no te metas, _____.

-¿Por qué me llamas por mi nombre? Dime Tinkerbell, ¿Qué pasa?- Parezco desesperada, aunque talvez lo estaba.-¿Por qué te has disculpado entonces?

-Me disculpe porque no fue mi intensión que te sientas mal – Shawn sonrie– Te pedí que te quedes un momento, estaba enojado, quería que entendieras, no debí gritarte pero en realidad no tenías porqué entrar al "tema".

-No entiendo tu sonrisa- Cojo su rostro.

Él aparta mi mano y se sienta en el sillón más cercano, ese gesto empieza a preocuparme.

-Shawn, te disculpo, olvidemos esto- me siento a su lado- Solo dime quién te hizo eso.

Él se aparta un poco de mí en el asiento- No olvidaremos nada, _____.

-Deja de llamarme así- Protesto.

-Es tu nombre ¿no?- nuevamente esa maldita sonrisa.

-¿Querías que viniera a verte para que me trates así? Te estoy disculpando, avancemos.

-La verdad, le dije a tu abuela que te pidiera que vengas por compromiso, no sabía que decirle y no creí que lo hicieras.

-No entiendo tu actitud, me lastima más que seas así ahora que estas "tranquilo" a que me hayas gritado en un momento de tensión.

Él se queda en la misma posición con la misma expresión así que agrego: Dime por favor por qué tienes el rostro maltratado ¿Qué te hicieron?

La madre de Shawn reaparece camino a la puerta de salida "Mis amores, iré al Centro Comercial a comprar algo para la comer, Aaliyah no tarda en llegar. ____ ¿Te quedas a almorzar?" pregunta la madre de Shawn.

Yo miro a mi chico esperando que él diga algo, ahora más que nunca solo él podía responder esa pregunta.

-No te preocupes mamá, _____ irá al doctor en un rato.

Ella luce sorprendida - ¿De qué te enfermaste?

-Oh, no se preocupe Sr. Mendes solo es el chequeo anual- sonrío.

-Bien, entiendo, entonces tal vez estés lista en la cena- Ella abre la puerta y parece buscar algo en su pequeño bolso rosa - debemos hablar acerca del viaje a los Parques Búfalo ¿Recuerdas?

En mi rostro se forma una sonrisa muy sincera, recuerdo el viaje a la perfección- Claro que sí.

-De acuerdo, cuídense, ya vuelvo y ya sabes bebé – advierte a Shawn- No le abras la puerta a extraños.

Ambas reímos al mismo tiempo que Shawn le hace una señal de adiós con las manos, su madre se va.

-¿Por qué inventaste lo del doctor?- pregunte aun sonriente.

La expresión seria de Shawn en realidad me deprimía.

-Shawn, ni siquiera me dices porque estás enojado, no puedo explicarte nada si eres evasivo.

-¡Bien! Sé que te fuiste en el auto de Tate aunque ese imbécil me lo haya negado, la escuela entera me lo dijo y quede como un tonto el último día de escuela, si hubiese sabido que te irías con el primer idiota que te ofrezca ayuda cuando peleamos jamás hubiera volteado a verte.

Me paro indignada por las palabras de Shawn-¡Ojala no te arrepientas de lo que acabas de insinuar nunca!

-¡Ojala me hubieras mandado un mensaje cuando llegaste a casa para evitar mi preocupación!

-¡Ojala tu madre te cure las malditas heridas de tu cara!

-¡Ojala entendieras que me puse celoso!

-¡Ojala tu rostro quede igual para que consigas a otra chica que si entienda cuando te pones celoso!

-¡Ojala no encuentre a nadie más!

-¡Ojala vuelva a Kingston!

-¿Qué? – Dice el bastante más tranquilo y desconcertado.

-Tú dijiste que no me hubieras volteado a ver- Dije en mi defensa con un poco de culpabilidad.

-Es que conozco a Tate... - Él se para y me coge por los hombros.

-Pero parece que no me conoces a mí- ahora me suelto yo de él y camino unos pasos a la salida.

El me sigue detrás- Confió en ti pero no me gustó que subieras a su auto- Ahora los papeles están invertidos, yo tengo el control.

-Discúlpame por hacerlo.

-De acuerdo, olvidemos esto y avancemos- Él sonríe y yo muevo la herradura de la puerta.

- Pedí que no te arrepientas por lo que insinuaste... Y ahora si me disculpas tengo una cita con el doctor.

Él frunce los labios- Te estaremos esperando a las siete.

-Tal vez venga- Digo con los hombros encogidos- Pero no por ti, lo haría por tu madre. Tu y yo ya no estamos juntos de todas formas- hablo ni yo misma me lo creo.

Él me comparte una pequeña sonrisa – Sabes que en el viaje pueden pasar muchas cosas, solo piénsalo bien. A las siete esta noche habrá un espacio para ti en la mesa, justo al lado mío, pequeña.

-Ya te había dicho que no puedes llamar pequeño a alguien solo porque tú eres muy alto.

-Entonces, lo siento Tinkerbell.

- Es _____ Belle para ti- Hablo con seriedad.

Él solo sigue sonriendo- Te acompañaría pero no hay nadie en casa.

-Adiós- cierro la puerta detrás.

A decir verdad, creo que aun las cosas no están muy claras pero ya habrá momento para eso, por lo menos ahora la que está "enojada" soy yo.

Camino a casa y al llegar veo un auto que no había visto jamás estacionado fuera de esta, parece ser nuevo, es negro y deportivo justo como a Tom le gustan. La puerta esta semi-abierta.

Alguien me abraza de lado con mucha fuerza, un par de mechas rubias golpean mi rostro y es inconfundible, Camila estaba en casa.

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HOLA CHICASS, ESTA VEZ NO LAS HICE ESPERAR MUCHO, SE QUE AMAN, ES UN POCO TRISTE PARA MI ESTAR ESCRIBIENDO LAS PARTES FINALES ME ENCARIÑE CON TODOS LOS PERSONAJES PERO TODO TIENE QUE LLEGAR A SU FIN Y NO ME PONGO SENTIMENTAL AHORA PORQUE AL FINAL DE LA HISTORIA PUBLICARE UNA PAGINA ENTERA DE TODO ESTO :') SIGAN COMENTANDO SUS ULTIMAS PALABRAS :'(