Capitulo 24

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              |Nuevos comienzos|

                       

Cafetería Cancan🍰”, leo en voz baja.

—Es bonito. Viniendo de ti esperaba menos pero me has sorprendido.

Grace sonrie al oír a Carla, ha estado callada desde que llegamos, quiero preguntarle si está todo bien pero tampoco quiero hostigarla, hoy ha sido un día de muchas emociones.

—¿Eso significa que esperabas algo de mí? —Interroga Yzan ofendido y contento en partes iguales.

—Claro, pero nada bueno tenlo por seguro.

Alguien se aclara la garganta interrumpiendo la casi discusión de Carla y Yzan los cuales cada vez parecen más “amigos”  que antes. 

—¿Entonces que pedirán? —Levanto la mirada y analizo curioso al chico que nos toma los pedidos algo nervioso mientras observa a Grace de soslayo y un llamativo sonrojo cubre su rostro.

Es algo divertido de ver hasta que recuerdo que a quien está observando es a mi chica.

¿Así de torpe me veo cuando la tengo cerca?, Bueno en mi defensa, ella es  divinamente preciosa como para no admirarla por horas.

Sonrió y continúo escuchando a mis amigos, vaya nunca pensé decir o pensar en esa palabra pero sí, tengo amigos y unos muy únicos, ellos pelean y entre gruñidos piden sus batidos.

—¿Pierce no vas a pedirte nada? —Asiento y guardo silencio mientras pienso en lo difícil e irritante que era para mi tener que escuchar a los demás comer a gusto con sus amigos mientras yo prefería evitar la cafetería de la escuela por aquella culpa que no me abandonaba.

Observó como la mirada de Yzan se encuentra con la mía y me sonríe antes de susurrar sin ser visto por nuestras compañeras:

No importa si no puedes hacerlo hoy porque mañana  podrás intentarlo una vez más.

Eso basta para darme cuenta de que me he perdido de tantas buenas cosas por fantasmas que nunca debieron de pertenecermeba mí, los últimos años han sido todo un martirio para mí hasta que los conocí a ellos y me dí cuenta de que no era mi culpa lo que le había sucedido a mi hermana tampoco a mi familia, yo solo era un niño que creyó todo lo que le a gritos le dijeron, nada de lo que había ocurrido había sido por mi así que con total seguridad hablo.

—Quiero un batido de chocolate y... un mini sandwich... ¿por favor?

Él chico asiente y se encarga de buscar nuestros pedidos, observó el lugar y concuerdo con Carla sobre el hecho de que Yzan si que supo buscar un buen sitio para pasar el rato, la cafetería tiene un olor suavemente dulce y las paredes son de madera con decorado de flores, nada muy exagerado ni muy simple, es exactamente lo que llamarías perfecto para la ocasión.

—Aún no puedo creer que estamos descalificadas... —Carla resopla y se encoge de hombros—. Espero haber destacado un poco.

—Estuviste increíble —Miro a Grace por el rabillo del ojo después de que las palabras abandonaran mi boca—. Ambas lo hicieron increíble.

—Totalmente de acuerdo con mi colega —interviene Yzan—. Esos saltos, lanzamientos y esa tremenda defensa estoy seguro de que captaron la atención de muchos.

—Pero no clasificamos —Carla aprieta los labios y se peina el cabello.

—No te alarmes bonita, en mi corazón lo hiciste.

Ella hace una mueca y juntos dejamos escapar algunas sonrisas pero no dejo de notar que Grace no se ha unido a la conversación. Estará pensando en lo que le dije en el carro, se estará arrepintiendo.

El Punto Débil.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora