Mía | 21 |

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Kun

- Me gusta ese color - murmuró en su oído - y por lo que veo no traes bragas .

El rostro de mi esposa está caliente mientras una sonrisa se despliega en sus labios ¿ Que diablos me ha hecho está chiquilla ? , está niñata me ha embrujado , me he obsesionado con cada detalle de su cuerpo , con la manera en la cual gime o como grita mi nombre , como me demuestra cariño mientras yo la trato como si fuera una mierda .

Tomo su mano y nos guío a ambos por el mar de personas hasta la sala donde se celebra la subasta . Tomamos asiento en un lugar reservado donde hay dos filas vacías delante de nosotros para más privacidad.

La subasta comienza mostrando algunas joyas únicas y de valor incalculable , Pero solo puedo prestar atención a mi esposa y como no le interesa nada lo que está siendo subastado, nisiquiera las perlas ( que son sus favoritas) , o las diademas o pulseras de oro y mucho menos los anillos .

- Diamante Hope - dice el hombre .

La atención de mi esposa va directamente hacia la pantalla donde muestran las joyas y por un segundo creo que no le dará importancia como a las demás , Pero me equivoco notando como su iris se ilumina y sus pupilas se dilatan al ver el diamante azul marino , ¿ Porque le llamara la atención? ¿ Le gusta ? .

» La oferta inicial es de 350.000.000 millones de euros - dice el hombre - trescientos cincuenta a la una .

- Cuatro cientos millones - escucho una voz a mis espaldas.

Los ojos de mi mujer se desvían de la joya con decepción, oh claro que no si ella quiere esa estúpida joya maldecida la tendrá .

- Quinientos millones .

Digo y le doy una mirada al hombre que grita claro y fuerte « No más ofertas » , y al parecer todas las personas de este sitio reconocieron mi voz porque nadie vuelve a hacer una oferta y ordeno que me lleven el diamante al final de la compra .

La subasta continúa y mi esposa no presta atención a ninguna joya más , yo no compro nada por qué nada de lo que exhiben aquí me interesa.

La subasta termina a las veintitrés horas , le indicó a Jum que envié el diamante a mi joyero personal para que diseñe algo que ya de por sí le he enviado , Pero que faltaba un solo detalle y este ya lo tiene .

Subimos al auto y el silencio nos cubre mientras yo me deleitó con la piel espuesta del vestido de mi mujer , en un momento nuestras miradas se entrelazan y la mantenemos .

- ¿ Sabes la leyenda de ese diamante ? - le cuestionó mirando esos impresionantes ojos verdes y ella niega .

» El primer poseedor de la joya fue Jean-Baptiste Tavernier, quien mostró el diamante original (cuyo peso se estimaba en 115 quilates) al rey Luis XIV de Francia- sus ojos se abren con cada palabra que sale de mis labios - Después de venderlo, Tavernier cayó en la quiebra y huyó a Rusia, donde sería hallado muerto de frío y su cadáver devorado por alimañas.

- ¿ Porque lo compraste entonces ? .

¿ Cómo le digo que lo compre por la ilusión es sus ojos ? ¿ Cómo le explico que con su tan sola presencia hace que mi cerebro deje de funcionar ? . ¿ Que con tan solo una sonrisa causa estragos en mi y que la sola idea de dejar que la alejen de mi me hace querer destruir todo? , ¿ Que desde que llegó a mi vida no veo un futuro si no es con ella ? .

Es . Una . Completa . Mierda .

Está mujer me tiene embrujado , hechizado , ella y su maldita precensia me joden y no pienso permitir que eso pare , porque me gusta que ella y solo ella me joda .

Obsesión perversa  ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora