『 ℂℝ𝕀𝕄𝕊𝕆ℕ 𝕃𝕆𝕍𝔼✰ 』☆⋆｡𖦹°‧★ ( 𝑺𝒚𝒎𝒂𝒔 )

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Capítulo 1. ¿Destino, o coincidencia?

Los Zaterranos son conocidos en todas partes de Outworld como peligrosas criaturas que se alimentan de carne a base de cualquier ser vivo que se cruza en su camino. Por lo mismo, son clasificados como seres monstruosos a los que se busca erradicar con el fin de proteger a todas las criaturas de Outworld. Sin embargo, hay un Zaterrano en particular que odia seguir el estilo de vida de su especie.

Syzoth no es un Zaterrano común, él es el único de su especie que tiene la habilidad de cambiar de forma. Nadie sabe de dónde obtuvo ese extraño don, pero Syzoth es capaz de transformarse y adquirir el cuerpo de un humano. Lamentablemente, esa inusual habilidad lo llevó a recibir críticas y rechazo por parte de la mayoría de su gente, sin mencionar su singular estilo de vida donde prefiere alimentarse a base de insectos con el fin de evitar consumir carne y tomar vidas ajenas.

Syzoth está en contra de toda la ideología y costumbres de su propia especie, él parece tener un fuerte sentido de empatía y solaridad que todos los Zaterranos carecen. Por eso y más razones es que Syzoth es visto como "el bicho raro" de su especie.

Debido a las circunstancias, Syzoth prefiere estar lejos de Zaterra la mayor parte del tiempo, escondiendo su verdadera naturaleza bajo su forma humana. No es demasiado atrevido para acercarse a los Outworlders, pues sabe las consecuencias que habría en caso de ser descubierto, pero sí los observa desde la distancia y aprecia su estilo de vida; deseando con sueños frustrados poder vivir como ellos. Quizá sea debido a su extraño don, pero Syzoth parece tener el corazón de un humano más que el de un Zaterrano. Él desea tener una vida normal, enamorarse y compartir el resto de sus días con su pareja ideal.

Lamentablemente, la desgracia de Syzoth no lo perseguía solamente en su vida como Zaterrano, sino también como humano. Cuando pensó haber encontrado el amor al conocer a Ashrah, una demonio residente en Outworld, ella lo rechazó al descubrir su verdadera naturaleza como Zaterrano. Entonces Syzoth supo que Ashrah no lo amaba por quién era él realmente, sino por su atractiva apariencia humana que cualquier chica desearía.

Tras unos días de su ruptura con Ashrah, Syzoth estaba en el lugar donde normalmente suele ir para pensar y relajarse; un lugar en medio del bosque de Edenia donde había un pequeño lago y hermosos pastos verdes, rodeado de árboles altos con las hojas más preciosas de Outworld. Syzoth se sentó en una roca y miró su reflejo en el lago. Observó su forma reptiliana moverse en las ligeras ondas del reflejo del agua en movimiento, y suspiró profundamente. ¿A quién quería engañar? Nadie se enamoraría de ese rostro. Sabía que al final del día las personas lo verían como realmente él se sentía que era, un monstruo.

Syzoth ocultó su forma natural bajo su forma humana, estaba tan cansado de ser un Zaterrano y de ser visto como un depredador frente al mundo. Permaneció mirando su reflejo en el agua, observó sus rasgos humanos, sus ojos verdes, su cabello castaño oculto bajo una capucha, sus labios carnosos y rosados. ¿De qué le sirve tener todo eso si al final de cuentas él seguiría siendo un monstruo para los demás? Fue en ese momento que Syzoth aceptó la derrota y supo que jamás sería amado por nadie.

Las lágrimas de Syzoth caían en el agua y formaban pequeñas ondas que se movían contra corriente. Syzoth trazó su mirada por el movimiento del agua y en ese momento fue cuando su vista captó algo más. Frente a su reflejo, había un reflejo ajeno en el agua. Syzoth levantó su vista y notó que del otro lado del lago se encontraba de pie un chico al que jamás en su vida había visto, de ser así, recordaría ese angelical rostro, esos hermosos ojos plateados y su cabello gris perfecto.

"¿Por qué estará tan triste?" el chico ajeno pensó, y cuando sintió la mirada de Syzoth encontrarse con la suya, no pudo evitar sentir mariposas en su estómago acompañado de un nerviosismo recorrer su cuerpo entero, así que desapareció de su vista, transformándose en humo y esfumándose en el aire.