002: Alana.

116 13 2
                                    

A partir de aquella noche, Elvis y Cilla empezarón a salir, importandole a Elvis poco o nada si yo estaba bien con eso, pero en nuestra Casa ahora las cosas funcionaban así, si Elvis lo decía, se tenía que hacer en ese momento exacto y de la forma en que él quería, al parecer a todos les parecía bien y se acostumbraron más rapido que una bala, excepto yo, bueno todavía no del todo. Priscilla había comenzado a ir a nuestra casa más seguido, casi siempre estabá en la sala de estar o en la habitación de Elvis, pero algunos días, Elvis tenía practica de Karate, Priscilla iba conmigo cuando eso pasaba y ese día era hoy.

—Hey. —Escuché y me volví hacía la voz.
—Cilla...pasa. —Dije poniendome de pie inconcientemente. Ella se acercó con una sonrisa y sentó en mi cama, yo giré mi silla hacía ella y me volví a sentar.
—¿Como va la escuela? —Pregunté y ella negó con la cabeza y soltando una risa.
—¿En serio quieres hablar de la escuela? —Levantó la ceja y yo reí.
—Touche. ¿De que quieres hablar? —Pregunte encorvandome un poco y bajando la mirada. Ella parecía aún estar pensando en su respuesta, hasta que por fin se decidió.
—¿Quién es la tal Anita?, muchas de las cartas que tiene Elvis, son de ella. — Yo solo reí levemente cuando la mencionó, ¿acaso estabá celosa?, conmigo nunca tendria que estar Celosa.
—Anita es una chica de Memphis con la que Elvis estuvo saliendo, pero nada serio, no como Dixie o June. —Dije. Quería ser sincero con ella y sí Elvis no lo era, alguién tenía que serlo.—La verdad es que Elvis no hablabá mucho de Anita, pero se que a él ya no le interesa. —Agregué, pero ella volvió a preguntar, ahora acercá de Dixie y June.
—Bueno, Elvis y Dixie fueron novios desde tiempo atras de que Elvis se hiciera famoso y terminaron meses después de que Elvis empezara a hacer Giras con el Coronel. El Coronel le aconsejó a Elvis terminar con Dixie por mera publicidad del mismo Elvis. Con June, creo que empezarón a salir en el '55 y terminaron en el '56, me parece. No lo sé, en ese tiempo a pesar de que Elvis ya era famoso, no tenia la edad como para prestar atención suficiente, teníamos Diez y Once años apenas. —Contesté y la mire interrogante. —¿De donde viene tu interrogatorio? —Priscilla se acomodó en la cama y me miro unos segundos en silencio, para después mirar hacía la puerta.
—Nada, es solo que Anita sigue enviandole cartas a tu hermano y estoy segura que él no las contesta, pero su insistencía y el hecho de que haya tenido algo con Elvis, no puedo evitar sentirme algo...Celosa. —Admitió y yo asentí, entendía el sentimiento, después de todo, ultimamente lo estaba experimentando muy a menudo en mi propía Casa.

El tiempo pasó deprisa, el invierno en Alemania parecía ser más frío, aunque no hubiera mucha diferencía de temperatura a Memphis en Invierno, no sabía si era porque casí siempre estaba sólo, el ambiente post-guerra que aún guardaban las calles de Alemania o algúna otra razón, pero Navidad se acercaba y probablemente esta era una Navidad que no merecía ser festejada, no en la familía Presley. Elvis y Papá no lo sentían así porque casí en el mismo lapso de tiempo, ellos habían encontrado cierto consuelo en Priscilla y Dee respectivamente, pero yo no y aunque parezca que me quejo de eso, es completamente...cierto. No puedo evitar sentirme sólo aún estando en una Mesa repleta de gente cada noche, cada pequeño sector de la mesa tiene una conversación diferente y única y nadié parece notarlo, pero yo no pertenezco a ningúna de ellas, simplemente estoy ahí, observando y escuchando.

El viento frío choca contra mi cara y tengo $150.00 Dolares para gastar en mis regalos de Navidad y otros $50.00 Dolares para gastar en mis cosas, que eran $138.66 Marcos Alemanes, todo ese dinero lo he ganado en apuestas de las fiestas de Elvis en las partidas de Pool, Elvis se burlaría si me viera ahora, pretendiendo comprarle un Regalo "digno" de $50.00, primero me agradecería con una leve sonrisa, se daría tiempo a observarlo y luego me daría otra leve sonrisa, para después volver a guardarlo mientras piensa algo como:
"Ya tengo esto, que desperdició."
"Dios, ¿no pudiste comprar algo más barato?"
"No me veo usando esto."
Lo guarda durante la noche y cuando sube a su habitación, lo deja en el closet hasta que le salga Moho y después lo tirará.

Born Too Late - PriscillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora