Max había tenido un día difícil. Estaba feliz de que haya terminado. Fue un día horrible, realmente horrible. Tuvo que hacer una presentación en su clase de lenguaje avanzado que terminó saliendo muy mal, tan mal que había llorado ella sola en los baños. Se enteró de que había reprobado su última prueba de matemáticas, Victoria y su grupo no había parado de molestarla durante toda la tarde y finalmente fue enviada a la oficina del director cuando accidentalmente le contestó bruscamente a uno de sus profesores que la llamó por estar en su teléfono. En su defensa, nunca respondería así a un profesor a menos que el mensaje fuera extremadamente importante, es decir, de Chloe. Sin embargo, el director Wells le informó que se pondría en contacto con sus padres, lo cual solo se sumaba a la lista de cosas malas con las que tendría que lidiar más tarde.
Cuando sonó la campana, Max pasó junto a Rachel, quien intentó detenerla sin éxito, se dirigió directamente a los dormitorios de las chicas con la intención de acostarse, llorar un poco y tal vez tomar una merecida siesta antes de comenzar con su montaña de tareas. Pero cuando abrió la puerta de su habitación, vio a una punk de cabello azul sentada en su sofá con un cigarro entre los dedos.
"Hola, súper Max".
"¡Chloe! ¡No puedes fumar aquí!" Max entró en pánico abriendo la ventana en un intento de despejar la habitación del fuerte olor a marihuana.
"Relájate", dijo Chloe, apagando el porro.
"¿En serio? ¿Por qué no lo había pensado?", dijo Max irritada no por Chloe, eso nunca, pero estaba abrumada por todas las cosas que le habían pasado hoy.
"¿Estás bien, Max?" preguntó Chloe, sonando realmente preocupada, Max no responde así ni cuando está realmente enojada.
Max se mordió el lavo intentando no llorar frente a Chloe y logro decir un silencioso "No del todo".
En ese preciso momento, hubo un golpe en su puerta.
"Max, sé que estás ahí. Deja de lamentarte y déjame entrar", dijo la voz de Rachel desde el otro lado.
Max suspiró. Agradecía que estuvieran allí para ella, pero lo último que necesitaba era que se preocuparan por ella.
"Max, voy a derribar la puerta. O haré que Chloe la derribe", amenazó Rachel.
"No es necesario", respondió Chloe, abriendo la puerta para dejar entrar a Rachel.
"Oh, ya estás aquí. Bueno, eso facilita mi trabajo", dijo Rachel, cerrando la puerta y dirigiéndose a Max. "¿Qué fue eso allí atrás? Nunca le contestas a los profesores ni a nadie de esa forma. ¿Estás bien?"
Max se quedó allí, tratando desesperadamente de no llorar.
"¡Guau, le gritaste a un profesor?" preguntó Chloe, ligeramente impresionada.
Max permaneció mirándolas a ambas por un momento y ya no logro retener las lágrimas. Chloe y Rachel intercambiaron una mirada preocupada e inmediatamente se acercaron para abrazarla entre las dos.
"Aquí, siéntate", dijo Rachel, guiando a Max hacia el sofá.
Una vez que se sentó, ambas tomaron lugares a su lado.
"¿Qué pasó?" preguntó Chloe.
Max se tranquilizó y logró contar toda la historia.
"En serio, necesitas un descanso de Blackwell", dijo Chloe. "¿Qué te parece quedarte en mi casa esta noche y faltar mañana? Creo que lo necesitas".
Max quería protestar, pero sonaba tan perfecto y exactamente lo que necesitaba. Asintió en respuesta y Chloe le dio una palmada en la espalda.
"Agarra tus cosas y salgamos de aquí. También tú, Rachel", dijo Chloe.
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Life is Strange | One-Shots #2
FanfictionTengo un problema con estos juegos, así que más One~Shots sobre el