La hija del Diablo.

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La cámara de Max hacía clic tras clic mientras tomaba foto tras foto de las lindas abejas zumbando alrededor en el jardín de Chloe. Una de las mejores partes de la primavera en Arcadia Bay eran las abejas que venían con ella, y esta primavera Max estaba decidida a capturar su ternura en la cámara para concientizar sobre la rápida disminución de las mismas.

"¿Qué está haciendo?" le preguntó Rachel a Chloe mientras estaban paradas en la puerta trasera, observándola.

"Creo que está tomando fotos de insectos", dijo Chloe.

"¿Por qué?" preguntó Rachel.

Max se movió hacia la esquina lejana del patio, cerca de un arbusto floreciente, y se inclinó para tomar fotos.

"Algo relacionado a una campaña para salvar a las abejas", dijo Chloe.

"Oh, ¿así que está tomando fotos de abejas?" preguntó Rachel.

"Sí..." dijo Chloe.

"Bueno, más le vale tener cuidado. Creo que hay un nido de avispas en el viejo columpio", dijo Rachel.

"No me sorprendería", respondió Chloe.

Max se giró y caminó hacia el mencionado columpio, agachándose para tomar otra foto. Capturó una y luego otra.

De repente, Max se golpeó el brazo y se volvió corriendo hacia la casa.

Todo esto mientras Rachel y Chloe solo observaban tranquilamente.

"Y ahí están las avispas", dijo Rachel abriendo la puerta para que Max se metiera de un salto.

"Auch", dijo Max, agarrándose el brazo. "Eso duele mucho".

"Deja que vea", dijo Rachel, alcanzando el brazo de Max.

Pero Max se apartó y saltó hacia arriba y abajo.

"Max, déjame ver", dijo Rachel de nuevo.

"No", sollozó Max.

"¿Estás llorando?" preguntó Chloe.

"Realmente duele, Chloe. No te rías de mí", dijo Max, escondiendo su rostro.

"No me voy a reír. Demonios, te atraparon bien", dijo Chloe, alcanzando el brazo de Max.

Max sollozó de nuevo mientras Rachel se acercaba para ver también.

"¡Mierda! Max, ¿eres alérgica?" preguntó Rachel.

"¡No! bueno... eso creo." dijo Max, sus lágrimas deteniéndose mientras la adrenalina la llenaba. "¿Qué? ¿Es tan malo?"

"Ehhh..." Rachel se quedó en silencio. "Más o menos. Sí".

"No. Está bien. Voy a buscar algo de Benadryl", dijo Chloe, yendo hacia arriba al baño.

Rachel hizo un gesto para que Max la siguiera. Una vez que estuvieron todas en el baño, Rachel sentó a Max en el inodoro.

"Aquí. El dentífrico es en realidad un gran aliviador del dolor cuando se trata de picaduras", dijo Rachel, aplicando un poco de pasta dental en el brazo de Max.

Chloe le entregó a Max un vaso de agua y una pastilla.

"Esto debería detener la reacción. Si no lo hace, entonces te llevaremos al hospital, pero parece que ya se está calmando", dijo Chloe.

Max asintió y tomó la pastilla, devolviendo el vaso a Chloe. Miró su brazo y sollozó de nuevo.

"En verdad duele", dijo Max.

"Está bien. Vamos a descansar", dijo Rachel, ayudando a Max a levantarse y dirigiéndose a la habitación de Chloe.

"¡Mi cámara!" dijo Max, recordando que la había dejado abajo. "Tengo que ver todas mis fotos".

"Iré a buscarla", dijo Chloe.

Max se acomodó en la cama de Chloe y Rachel se sentó a su lado. Pasó suavemente el pulgar por la mejilla de Max para darle seguridad, Max solo sonrió. Un minuto después, Chloe regresó con la cámara de Max.

"¿Puedes agarrar mí Laptop?" preguntó Max señalando hacia su mochila.

Chloe la sacó y se la entregó, luego ocupó el lugar en el otro lado de Max. Max sacó su tarjeta SD y la enchufó. Cargó las fotos y las revisó.

"Vaya, Max. Son realmente buenas", dijo Rachel, mientras Max pasaba las fotos de las abejas.

"¿Verdad? Estoy emocionada de compartirlas. Las abejas son muy bonitas".

"Sí. Bueno. Aun así, te picaron", dijo Chloe.

"Sí, por una avispa. También conocidas como las hijas de Satanás", dijo Max.

"Oh. Pensé que éramos nosotras", dijo Chloe.

"Ja, ja", dijo Max sarcásticamente.

Ella pasó más fotos.

"¡La tengo!" Max gritó triunfante.

Mostró la pantalla de la computadora a Rachel y Chloe, y Chloe estalló en risas. La foto que estaban viendo era una toma sorprendentemente de alta resolución de una avispa dirigida directamente hacia la cámara.

"Oh, wow. Se ve que iba totalmente decidida", dijo Rachel, riendo.

"Ese pequeño demonio", dijo Max enojada.

"No puedo creer que lo hayas capturado en cámara. Deberías llevarlo a juicio. Esto es evidencia sólida", dijo Chloe.

Todos rieron y Max apagó su computadora y la apartó.

"Estoy realmente cansada", dijo Max. "Las picaduras te agotan".

"Sin duda", dijo Chloe. "¿Dormimos?"

Max asintió y se cubrió con la manta. Se acurrucó junto a Rachel y Chloe y cerró los ojos. La picadura no era más que un dolor sordo ahora, fácil de ignorar cuando estaba tan cerca ambas chicas.

Life is Strange | One-Shots #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora