Cap. 25

452 34 8
                                    

☽Elyan☾

Ya no hablo con mi padre. El ambiente con mamá es denso, Alan parece un fantasma en esta casa y tenemos que fingir normalidad cuando pedro está cerca

Fingimos y aguantamos.

Pero no es suficiente

Porque pasan los días y las vendas caen.

Y me doy cuenta que ya no puedo seguir así

Porque veo el resultado de mis parciales y aunque son buenos no me enorgullesco.

Encuentro un trabajo que puede darme más entradas económico y no me alegro.

Un intento más, me repito

Me repito que puedo seguir, que solo debí de creer lo que se supone debí hacer

Pero fallo

Porque ahora estoy teniendo una cita con Cristina.

Y cuando se acerca a mi con intenciones de besarme correspondo sin sentir algo en especial.

Pero mis latidos se aceleran al recordar un par de ojos verdes, esos labios rosa, su cabello rubio.

Recuerdo sus risas, recuerdo el tacto de su piel cuando la abrazaba.

Con esos recuerdos correspondo el beso sintiendo las sensaciones sobrepasarse, mi corazón late fuerte y la necesidad me embarga.

Cuando el oxígeno se hace una necesidad nos separamos y al abrí mis ojos caigo en cuenta de la realidad.

De mi realidad.

Y es que ya no puedo seguir mintiendome

Está no es la vida que quiero.

Rechazo el ofrecimiento de Cristina que propone ir por algo de privacidad.

Regreso a casa desorientado.

Me encierro en mi habitación

Y está vez permito a mis emociones salir.

Así que sin evitarlo el llanto sale de mi cuerpo.

Lloro, lloro tanto que siento que moriré.

En algún momento mi madre llama a mi puerta pero no abro, es como si mi cuerpo estubiera dormido.

Así que su preocupación la hace abrir la puerta y me encuentra en el suelo llorando.

Sus brazos me rodean y pide una explicación. Con mis sentimientos a flor de piel, hablo:

-Ya no aguanto, no me gusta mi carrera, solo quería estudiar algo sin quedarme atrás, ya no quiero escuchar a mi papá, no quiero seguir siendo un fracasado, ya no quiero causar problemas, no quiero ser una carga, solo causo problemas

-causo daño, no sé escoger ni tomar desiciones; extraño tanto a Alexandra, la lastime mucho, ella siempre ha estado para mí y yo....- las palabras se atoran en mi garganta -La quiero, la quiero y me esforcé en querer a alguien más, ya no quiero extrañarla

- papá lastima a Alan por mi culpa, tu tienes que aguantar por nosotros, mi trabajo solo cubre mis estudios y solo un poco de dinero contribuye a los gasto, es cierto, soy una carga que no sabe ayudar

-Ya no puedo más, ya no quiero, siento que el mundo se cae a pedazos y me tengo que tragar mi opinión. ¿Es muy egoísta de mi parte querer algo de tranquilidad?-

Ella no responde, en su lugar me abraza sosteniendo las partes que con cada sollozo se desarman.

✄✄✄✄✄✄✄✄

Mí Felicidad (Libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora