Hermana De Gandía (Palermo)

✨️Capitulo 23✨️

Narra B.A.:

Mientras estaba de camino a donde Matías estaba con los rehenes empecé a escuchar mucho ruido y adelante el paso y cuando llegue vi a Manila apuntando a Arturo de verdad que ese hombre era muy pesado.

Manila: Arturo. Vas a dejar esa G36 en el suelo en los próximos tres segundos. Por que si no eres hombre muerto.

Arturo: ¿Pero tu quién coño eres, si se puede saber?

Manila: Manila. Agente infiltrada de la banda.

Arturo: Pues mira Manila... No me creo una mierda. Aparte esa pistola es delas que nos dan de mentira. A mi no me engañas.

Manila: Recarga el arma. Te quedan dos segundos. Deja la puta arma en el suelo. Y reza para que no sea verdad que has abusado de Amanda.

Arturo: Me estas tocando los cojones. Empiezo a perder la paciencia.

B.A: A mi si que me estas tocando los cojones y me estas acabando la paciencia baja la puta G36 si no quieres que te pegue un tiro. Y yo no me ando con gilipolleces y menos si has abusado de Amanda.

Arturo: ¿Y que vas a hacer tu?

Apunte en la pierna de Arturo y le pegue un tiro.

B.A.: Matías coge la puta arma. Ten cuidado la próxima vez.

Matías: Entendido.

Mientras tanto Manila calmaba un poco al resto y yo me agache donde Arturo mientras sollozaba.

B.A.: Ahora que Arturito. ¿Ya no te crees tan valiente? Deja de hacer el gilipollas y no toques los huevos. Por cierto como te vea cerca de Amanda o de cualquier chica de aquí vas a desear no haber entrado.

Arturo: Me estoy desangrando. Me muero. Dice sollozando.

Gobernador: No se muere. Tiene orificio de salida. Ahí no hay arterias ni nada importante. Dijo con gracia ya que Arturo no para de hacer un espectáculo. Reí por eso y el Gobernador me dio una sonrisa disimulada y yo a el.

Manila: Arturo, quedas detenido acusado de violación. Y... te recuerdo que a mí también me has ofrecido pastillas, baboso de mierda.

B.A.: No digas más que todavía me lo cargo, ahora te lo traigo y le pongo las esposas en el primer lugar que pille de esta sala lejos del resto.

Matías y Manila: Vale nosotros vigilamos aquí.

B.A.: Vale me lo llevo ya arriba a que le curen eso, por que si fuera por mi lo dejaba así. Venga Arturito arriba. Dije poniendo los ojos en blanco.

Después de haber dejado a Arturo esposado en el primer sitio que visto que estuviera con los rehenes pero no tan cerca de ellos. Me voy con el resto para seguir con el plan.

Tokio: Ha llegado tu momento. Vas a ser dueño de tu destino: vida... o muerte. Hemos reconectado tus aparatitos. Vas a llamar a la carpa. Vas a hablar con Tamayo. Y le vas a decir que has matado a Nairobi. Y de que también has matado a Buenos Aires y a mí. Dice mientras le apunta con el arma y Nai y yo estamos detrás de ella apuntando también con las nuestras.