Narrador:
Mientras tanto fuera del despacho donde estaba Palermo y Tú.
Rio: ¡Para! ¡Para, Helsinki! Ahí está el agujero.
Helsinki: La galería. Llama a Palermo y a B.A.
Narra B.A:
Nos estábamos besando hasta que nos quedamos sin aire.
Palermo: No podemos estar juntos.
B.A: ¡Que! ósea antes por poco matas a Denver por besarme, me dices que soy tu mochilita emocional y ahora me dices eso. Sabes que vete a la mierda.
Palermo iba a hablar pero un golpe en la puerta no le dio tiempo a hablar, era Denver.
Denver: Helsinki os llama para lo del plan.
B.A: Vamos.
Salimos los tres Yo, Denver y Palermo. No pensaba hablar con Palermo algo que no tenga que ver con el plan, será lo mejor. Llegamos al sitio donde era el siguiente paso del plan. Nos unimos a Helsinki y Rio al charco.
B.A: Falta Nairobi.
Rio: Está terminando de fundir.
Palermo: Que vaya bajando, ya tenemos suficiente. ¡Nos largamos de aquí!
Estocolmo: Pórtate bien, Sofía, es tu turno.
Cogimos a Sofía mientras Helsinki encendía un motor de náutica. Nairobi viene con dos cafés le da uno a Palermo y ella y yo compartimos el otro café.
Nai: Ya estoy aquí. Ya estamos.
Mientras Rio hacia girar algo y Estocolmo soltaba a Sofía por el tubo. No sabia que estaba girando Rio ya que estaba atenta de que Sofía entrara y saliera todo bien. Luego de meter a Sofía por el tubo fui a ver como rompían el micrófono. Cuando rompieron el micrófono y sonreímos Rio y yo nos dimos un abrazo. Palermo no nos quitaba el ojo de encima y se le borro la sonrisa. Helsinki se dio cuenta de la situación y no dijo nada solo se levanto.
Después Nai, Estocolmo y yo estábamos en un despacho y ella se asomo a la ventana.
Nai: Sera hija de puta.
B.A: Nai. ¿Qué pasa?
Me asomo a la ventana y ya entiendo todo es el peluche de su hijo.
ESTÁS LEYENDO
Hermana De Gandía (Palermo)
RomanceTN Gandía, hermana de César Gandía los dos sois escoltas del Bando de España. ¿Qué pasará cuando una banda de atracadores vengan a roban el Banco de España? ¿Qué pasará si te enamoras del atracador al mando? ¿Y si el atracador al mando siente lo mis...