Eternos II - Desnuda Tormenta (Secuela)

Capítulo 26: Bonnie. Viaje a Marine, 2014.

Nada de esto va a ser fácil, no me puedo ni imaginar lo que me espera, pero supongo que eso es en lo que menos quiero pensar. Tal vez debería sacar a relucir mi lado independiente, el que no necesita de nadie para avanzar, para ser fuerte, pero hacer eso en presencia de James se me dificulta, no tengo ni la más mínima idea del porqué, tal vez porque sé que si me va a pasar algo malo tengo la seguridad de que él va a evitar que pase y por ello no hago nada al respecto.

Debo dejar de ser el estereotipo de mujer que espera a que el hombre haga algo por ella y empezar a ser quien soy de verdad. Capaz de lo que me proponga y protegerme por mi cuenta, después de todo no soy nada débil.

-¿Qué pasa?- preguntó Iván a mi lado –Tienes una mirada bastante pensativa-

-Nada, sólo trato de recordar, tal vez logré sin que ningún hechizo se involucre-

-No te desgastes, hay un bloqueo en tu mente que no te deja, un bloqueo que se hizo con hechizos- dijo Alicia acercándose –Es preferible avanzar ya y no esperar a que anochezca para acampar acá en la playa- tomó su pequeña mochila y se internó en el bosque sin esperar confirmación de nadie.

Tuvimos que apretar el paso para alcanzar a Alicia e ir todos a la par. Terry nos estaba acompañando pero nos retrasaba a veces porque tenía que parar a tomar mucho agua, agua salada.

Llevamos horas caminando y estoy segura que nunca vi un lugar tan tranquilo, hasta había muy pocos animales, y lo que más me extrañaba era el hecho que no estaba tan cansada como para estarlo por todo el tramo recorrido, supongo que ahora me doy cuenta porque era tan buena en pruebas de resistencia pero mi desempeño fisico fracasaba por falta de confianza.

Paramos como por milesima vez para que Terry descansará con su agua salada, ya me estaba empezando a cansar que por su culpa hubiera retraso.

-Creo que será mejor acampar acá- anunció Alicia –A este paso no llegaremos a nigún otro claro antes del atardecer- miró con el ceño fruncido a Terry.

Faltaba poco para que el sol se ocultará, Alicia tenía razón.

-Necesitan a una sirena para cuando lleguen a Marine- dijo Terry agitada por la caminata excusando su presencia en el viaje.

Coloqué los ojos en blanco y me dispuse a sacar una pequeña cobija lo suficiente grande para cubrirme en la noche. Los demás también alistaron su lugar para dormir para después ir todos a buscar leña.

No me dispuse a buscar leña, lo que quería era admirar el lugar tan pacífico, había muchos colores y los árboles son gigantescos, realmente grandes, lo que un humano denominaba un árbol grande no era nada comparado con los que hay acá y a pesar de todo tienen enredaderas que los rodean permitiendo que si uno quisiera treparlos con facilidad.

Me senté en un pequeño tronco caído que había en medio de unos arbustos con flores coloridas que nunca en mi vida había visto, eran demasiado peculiares, como si no tuviesen forma o cada vez que las mirara adquirieran una forma distinta, y sin embargo, no dejaban de ser bellas.

-Hola- dijo James llegando al lado mío.

Me pregunto como habrá hecho para encontrarme, ni yo misma sabía donde estaba, de hecho ya me empezaba a preguntar como iba a volver al lugar donde habíamos decidido acampar.

No le respondí, seguí admirando mis alrededores.

Pasó mucho tiempo en silencio sentado a cierta distancia de mí y se lo agradecía, quería guardar este momento sólo para mí, algo de paz antes de involucrarme en temas delicados como normalmente lo son con él.