El Domingo había llegado.
Era el día del sabotaje.
Sabía perfectamente que mi plan iba a funcionar.Antes de empezar a maquillarme me tome el resto de la botella de vodka, los restos de la coca que había quedado y un cigarrito de marihuana.
Andaban como dicen "bien calibrado".La hora de la primera función se acercaba, pero algo no estaba bien. Me sentía desorientado, mareado, con algo de asco. Quizá me habían caído mal las quesadillas de la comida. O mezclar las drogas había hecho efecto.
La función había comenzado, durante nuestros primeros actos todo fue normal. Seguía las instrucciones que Bombita me daba.
Al llegar el momento en que anunciarían a Bombita, cuando se abrió el telón, el que salió corriendo fui yo.
-¡Eit! ¿Qué mierda estás haciendo? -me gritó Bombita detrás de la cortina roja.Los reflectores apuntaban hacia mi.
Por un momento mi mente cambió el nombre de Bombita por el de Bolita, fue por un segundo mi gran debut.
Hice un gesto como de confusión y regresé haciendo maromas detrás del telón. El traje que yo usaba era de un color azul metálico muy bonito con una peluca color rojo. Mientras que el de Bombita era de un color rojo con toques amarillos, al igual que su peluca. O sea no había similitud alguna entre los dos.Al regresar al backstage, me empujó contra la pared.
-¿Qué te pasa, pendejo? -gritó
Yo solo sonreí mientras él animador volvía a presentarlo y él salía a la pista.
La gente se estaba riendo.
Cuando salí yo empezaron a aplaudir.
El show continuó normalmente como era costumbre.
Al terminar, la primera función, Sergio se acercó y me dijo con tono molesto -Yo no sé en qué chingados estabas pensando pero que sea la última vez que haces algo así, ¿me oyes?
-Pensé que ya habías salido, y como no te vi en la pista regresé de inmediato, discúlpame. -contesté.
Vi que se alejaba mentando madres, mientras dentro de mi pensaba que había logrado mi objetivo; molestarlo.
No sabía lo que le tenía preparado para la siguiente función.
Entre funciones pasaban 30 minutos para que el Güero limpiara la pista y acomodara todo nuevamente. Así como la gente de limpieza recogiera la basura que el público anterior había dejado. En esos 30 minutos retoque mi maquillaje, me eche lo que quedaba del cigarro de marihuana para agarrar algo de gallardía y llevé al escenario unas cosas que me ayudarían a llevar a cabo el plan que tenía.La función empezó.
En los primeros actos traté de destacar un poco más que Bombita. Pues trataba de llamar la atención más que el. Algo que pasó desapercibido ante sus ojos. No lo noto.
Cuando anunciaron el acto principal, ¿qué creen? .. no, no volví a hacer lo mismo. Deje que el saliera primero mientras yo por detrás de él salía haciendo gestos y muecas a sus espaldas. El público reía a carcajadas.
El show comenzó dándome una marometa hacia atrás apoyándome en sus piernas, era la primera vez que me salía; siempre terminaba golpeando mi espalda contra el suelo.
Continué el show llamando la atención del público más de lo inusual, en ese momento noté a Bombita algo molesto haciéndome un gesto en señal de desaprobación.
El público hasta ese momento me amaba, le estaba robando el show a Bombita. Como acto final, me acerqué a donde había dejado las cosas escondidas y destape un bote algo mediano. Cuando Bombita se despedía del público, al voltear estaba parado frente de él. Le lancé el contenido del bote encima.
Estalle en una carcajada enorme mientras el público reía y reía sin parar. Ahí estaba, esa era la estocada final para que se dieran cuenta que el mejor payaso era yo.
Había manchado por completo a Bombita de pintura color verde brillante. La pista del circo también se había ensuciado. Incluso los que estaban hasta en frente se alcanzaron a ensuciar también, pero a ellos no les importó. Bombita se metió tras bambalinas molesto, muy molesto.
Yo me despedí de mi público, pensando que quizá la próxima vez que los vería sería ya como el payaso principal del circo.Al poner un pie detrás de telón sentí como un golpe en el estómago me regreso de vuelta a la pista.
Ese golpe provocó que vomitara.
Era seguro que las quesadillas del medio día me habían caído mal.
Entre 4 me sujetaron y me llevaron detrás de los campers. No vi quienes eran. Pues mi peluca me tapaba en cierta parte los ojos.
Pero me dieron la peor golpiza que alguien me hubiera dado en la vida.
-¡Ya valiste madres pendejo! -me decían mientras me golpeaban una y otra vez. Sentí un garrotazo en la espalda. Me patearon hasta que se cansaron.
-¡Ya, ya por favor, paren! -exclamaba en llanto mientras seguían golpeándome
-¡Ya! ¡Ya déjenlo! -reconocí la voz de Sergio. -A ver si le quedan ganas de volverse a meter conmigo.
Me dejaron ahí tirado. Por un momento pensé que moriría en ese lugar.Chaparro, el Güero y Janette corrieron a ver que me había pasado.
-¿En qué chingados estabas pensando, Luis? - me dijo chaparro mientras trataban de ayudarme.
-¿que? ¿Acaso no viste mi espectáculo? -respondí mientras me retorcía de dolor y escupía algo de sangre.
-¡Eres un estúpido! ¿Cómo se te ocurrió hacer eso? -dijo Janette
Yo solo trataba de reír pero el dolor no me dejaba.
Me cargaron hasta el camper donde me recostaron y donde me desvanecí del dolor.La función había terminado.
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El Circo de Trampitas
Novela JuvenilLuis, mejor conocido como Trampitas; es un payaso vagabundo que deambula solo por las calles de la ciudad. Narra desde su perspectiva algunas etapas de su vida donde las adicciones se convierten en el personaje principal de esta historia llena de al...