Capítulo 8: Dame un sí afirmativo

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Faltaban dos días para la competencia, así que Hobi debía practicar bastante

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Faltaban dos días para la competencia, así que Hobi debía practicar bastante. Últimamente solo pasaba tiempo con Yoongi, cosa que le encantaba ya que tenían una muy buena comunicación y él siempre le prestaba atención, no importa lo que hiciera o dijera, dándole una sensación de comodidad y aumentando esos bonitos sentimientos que comenzó a sentir por él.

Cada vez que practicaba con Nam él siempre estaba ahí, dándole ánimos y cuidando de él. Pero extrañamente, Jin también iba a menudo al gimnasio, ya había hablado con Yoongi para explicarle su comportamiento e hicieron las pases, más o menos, pero no sabía porque frecuentaba tanto las prácticas. Hasta que cuando se encontraba yendo a las duchas, escucha sus voces en los pasillos.

—¿Cómo crees que nos irá? — preguntó Nam, acercándose a él, quién mantenía la espalda recargada en la pared.

—Mmm, perderán seguro, eres muy malo jugando— dijo con un tono burlón y a la vez desafiante.

Ante esto, el más alto soltó un pequeño suspiro y se acercó a él, llevando la mano a su cintura.

—Eres muy malo mintiendo, sabes que tengo un don para jugar— fue disminuyendo el tono de su voz mientras se acercaba.

—Si fueras tan bueno, Hobi no sería el mejor— su tono demostraba que trataba de dañar su ego.

—Debo aceptar que Hoseok es mucho mejor que yo, pero hay algo en lo que me he desarrollado muy bien— le sonrió mientras veía sus labios.

—Ilumíname, señor Kim— colocó los brazos alrededor de su cuello.

—Pues, en hacerte callar— Jin bufó al rodar los ojos, pretendiendo alejarse.

Pero antes de que pudiera Nam lo acercó, atrapando sus labios mientras reforzaba el agarre de su cintura, y él no se negó a corresponder.

Seok miraba la escena con asombro, nunca había visto a Jin así, por eso no estaba acostumbrado. En ese momento se le acercó por detrás un gatito sigiloso.

—¿Qué estás mirando? —su voz lo asustó.

—Dios, Yoongi— puso la mano en su pecho al recostar su espalda en la pared—. ¿Pretendes matarme? —prácticamente le susurró.

—..No, solo vine porque te demorabas dema…

Cubrió su boca con las manos, no quería arruinar el momento de Jin, y al parecer este estaba tan concentrado en seguirle el ritmo a Nam que ni siquiera se percató.

Después de unos segundos, bajó su mano lentamente, aliviado de que no lo escucharan, pero se percató de la mirada de Yoongi y de lo cerca que estaban.

—Ah…creo que deberíamos irnos— se iba a separar cuando siente la mano de Yoongi en su cintura—. ¿Min? —dijo nervioso, y con la punta de las orejas coloradas.

—¿Podemos quedarnos un rato así? —le susurró pegando cada vez más sus cuerpos.

Esto hacía que sus mejillas se enrojecieran, que su mirada nerviosa recorriera de punta a punta el rostro contrario, y su corazón se acelerara. Yoongi, al ser unos milímetros más bajo que él tuvo un acceso más directo a su cuello, en el cual estuvo unos segundos, aspirando su olor.

Tiro Certero [YoonSeok] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora