La Escuela Salvatore es bien conocida en el mundo de lo sobrenatural por dos cosas. La primera: albergar el mayor número de alumnos de lo sobrenatural en toda la historia (tal vez influyera un poco qué no había otras escuelas para vampiros, brujas y hombres lobo). Y la segunda: esta escuela albergaba, bueno, seres más únicos; las gemelas Salvatore y la heredera de los Mikaelson.
¿Cómo explicarlo? Mmm... Las gemelas Salvatore no solo son hijas de uno de los mejores, y reivindicado, cazadores de vampiros sino que también son brujas. Y no brujas cualquiera, sino gemelas Gemenis. De los aquerrales de brujas más poderosos de todos los tiempos.
Y por otro lado esta la joven Mikaelson. Hija de el híbrido Original. Hija de la reina de la manada Creciente. Nieta de la creadora de la magia Oscura. Miembro de la familia Mikaelson, la familia Original... Bueno, supongo que ella no necesita más introducción.
Solo había un pequeño problema y es que...
- "¡Hope!"
- "¿Qué quieres?" - preguntó con molestia.
- "¡No hemos terminado de hablar!" - grito molesta la rubia gemela.
- "¿A eso le llamas hablar?" - pregunto exasperada la joven Mikaelson.
Para ser honestos Lizzie y Hope jamás se habían llevado bien. Bueno, tal vez si hace mucho tiempo pero las cosas no tienden a ser permanentes. Excepto por...
- "¡Ya paren ustedes dos!"
La joven gemela de ojos color almendra. Ella siempre estuvo ahí para detener sus discusiones. Nunca fue muy buena en eso pero al menos lo intentaba...
- "¡Dícelo a ella!" - Hope apuntó a Lizzie.
- "¡Ey, no le grites a mi hermana!"
- "Lizzie..."
- "¡Cállate, Jo!" - le gritó a su hermana.
- "¡Oigan, ya!" - Josie explotó y no solo ella sino también la puerta a la entrada de la escuela....
- "¿Qué fue eso?" - pregunto Hope confundida.
- "Seguro es la manada de Jed, qué como tu destruyen todo lo que tocan." - dijo en tono acusatorio mientras veía a Hope.
- "¿En serio vas a seguir con esto?" - preguntó Hope rodando los ojos.
- "¡Era mi taza favorita!"
- "¡Ya te dije que fue un accidente!"
Se escuchó otra explicación esta vez más cerca al mismo tiempo que se escuchaban a los alumnos gritar y correr. Por acto de simple inercia tanto las gemelas como la Trihibrida caminaro hacia el caos mientras seguía con su discusión.
Cualquiera en su sano juicio iría al lado contrario y trataría Mmm no sé, tal vez, de salvar su vida. Pero no, ellas no. Ellas corren hacía el peligro, porque ese es el trabajo que ellas mismas se asignaron.
Proteger a la Escuela Salvatore.
- "Es asqueroso... El monstruo más horrendo qué he visto. " - dijo Josie al ver al monstruo con una mueca de asco.
- "Jo, no seas grosera... Hope no es un monstruo, asquerosa tal vez, pero..."
- "¡Cállate Lizzie!" - le gritó ofendida.
Ignorando lo anterior, Josie no mentía. El monstruo era en definitivo, en perfecto uso del adjetivo... Asqueroso. No hay mejor descripción, era asqueroso, grotesco y repugnante. Un monstruo de al menos dos metros lleno de babas y poros con la aperiencia de un humano pero tan desfigurado qué era imposible estar seguro.
A primera vista parecía ser inofensivo, al menos hasta que abría... ¿Su boca?... Lo que sea que fuera eso y lanzaba lo que parecía ser plasma flamable. Con solo tocar un objeto ese plasma lo hacer estallar en llamas.
- "Mira, tan destructivo como tú... ¿Será cosa de familia?" - sonrió Lizzie con ironía.
- "Lizzie, una broma más y te juro que..."
- "¡Ya cállense y terminemos con ese monstruo!" - Josie ya había alcanzado su límite. - "Sólo hagan lo que les diga."
Dicho y hecho Josie tomó el mando de la situación. Todo iba bien, después de varios hechizos, golpes y patadas, finalmente lograron llevar al monstruo al patio, es decir mal lejos de los alumnos.
Ahora solo hacia falta atacar al monstruo para vencerlo. Formando un círculo alrededor del monstruo lanzaron tanto hechizos como pudieron. Cada quien concentrada en su trabajo, aunque tal vez demasiado...
- "¡Demonios Hope! Ten cuidado casi me das a mi..." - grito Lizzie enojada.
- "Qué bendición..."
- "¿Qué?"
- "Nada... Solo terminemos con esto."
- "¿Qué habías dicho?" - no era curiosidad, era enojó y deseo homicida, Lizzie había escuchado muy bien la primera vez.
- "Nada."
- "¡Chicas concéntrese!" - Josie juraba no llegar al día siguiente si esas dos seguían peleándose.
- "Dime que habías dicho..."
- "Na.... ¡CUIDADO!"
Una bola de plama iba directamente dirigida a Lizzie. Ella solo puedo ver como una mancha blanca se atravesaba el camino y como el último hechizo qué Josie lanzó terminó con el monstruo frente a ellas.
Solo pudo ver como Hope en su forma lobo caía frente a ella.
