La confianza es primordial, Lisa lo sabe, pero piensa que le será difícil tenerla con la alfa, darle una oportunidad haría que todo su mundo cambiara, pero no estaba muy segura de qué manera, ¿acaso le haría daño como lo hizo aquella? Tal vez lo haga, tal vez piensa demasiado las cosas y quiere evitar acercarse a otra alfa.
No todos son iguales, no todos te rompen el corazón y te dejan con un lazo roto y un bebé en camino.
Llevó sus manos a su aún vientre plano, se preguntó si acaso se vería terrible cuando este comience a crecer.
—Tal vez me vea terrible –sonrió débilmente, recargó su cabeza en el reposa brazos del sofá y se acomodó mejor, ha sentido mucho cansancio últimamente, las emociones que había estado experimentando en este corto período de tiempo eran las causas de esto.
Soltó un largo bostezo, sus ojos en verdad que le estaban pesando, había sido una larga semana para la omega, necesitaba un enorme descanso.
Con una sonrisa plasmada en sus labios, pensando en las palabras de Jennie y abrazándose así misma. Decidió que lo mejor era tomar una siesta.
***
—... y eso fue lo que sucedió –terminó de relatar Jennie, Nayeon ni siquiera podía creer todo lo que había pasado, ¿acaso Jennie estaba loca?—. ¿Qué?
—¿Es... es en serio? –soltó un resoplido—. ¡Debiste ser más precavida! ¿Qué tal si te mandaba al diablo?
Jennie rodó los ojos, no esperaba esa reacción de parte de su amiga, pero era de esperarse, después de todo había sido de lo más brusca, primero su confesión adelantada de pedirle una oportunidad, nada discreta, además de pedirle que la dejara acompañarla para ir al ultrasonido, por supuesto esa había sido una experiencia muy grata, aún tenía la imagen de ese puntito que le había llamado por completo su atención, ¡ya quería verlo crecer en el vientre de su omega!
—No lo hizo –mencionó Kim aliviada—, eso es una buena señal.
—Aún así no deberías de ser así, amiga, podrías llegar a asustarla, sabes que las omegas en ese estado están más débiles.
Eso era cierto.
Un lazo roto podía causar muchas cosas, el omega siempre era quien sufría más las consecuencias de los actos del alfa, algunos morían de tristeza, pues al dejar de sentirse queridos por su supuesta pareja, dejaban que la depresión poco a poco los consumiera, mientras que otros que lograban salir adelante, repudiaban a los alfas.
—Lisa no se asustará –dijo Jen en respuesta.
—Debes de cambiar esa actitud, sé que no te gusta tener todo con tantos rodeos, pero debes ser delicada, Lisa está sensible tanto por el embarazo como por su unión rota, debes comprenderla.
Jennie sabía que había hecho mal en comportarse así, de un modo desesperado, pero como Nayeon había mencionado, ella siempre quería que todo fuera casi perfecto, sin rodeos, nada por el estilo.
Necesitaba disculparse con la omega, pero lo haría después, seguramente ha de estar demasiado cansada como para querer volver a escuchar su voz de nuevo, así que espera poder verla mañana para así poder disculparse, necesitaba calmarse un poco, sus acciones precipitadas podrían traerle consecuencias, y no quería que una de ellas sea alejar por completo a Lisa, ¡no lo soportaría!
—¿Qué le puedo dar como método de disculpa?
—No creo que sea una omega que le guste lo material, deberías solo disculparte y listo.
—¿Y sí no acepta mis disculpas? ¿Y sí piensa que soy una idiota por no llevarle algo? ¡La estoy cortejando!
—¡Jennie Kim! –exclamó Nayeon golpeando la mesa, llamando un poco la atención de los presentes en el restaurante, pero por supuesto la de dientes de conejo ni siquiera les prestó atención—. Cálmate, estoy segura de que no pasará nada, ella lo que ahora necesita es una persona que se atreva a demostrarle que no todo está perdido por un lazo roto, y que puede llegar a enamorarse de nuevo, eres esa persona, solo demuéstrale que no solo con cosas materiales, el romance surgirá, ¿entiendes?
—Entiendo que lees demasiado a Haruki Murakami –Nayeon soltó un suspiro cansada de su explicación—. No te enojes.
—No me enojo, simplemente eres alguien desesperante.
—¿Lo siento?
—Por supuesto que lo sientes –rodó los ojos y se acomodó mejor en la silla para poder cruzar sus brazos sobre su pecho—. En fin, ¿haz pensado en tu método de cortejo?
—No, aún no lo hago, pero sé que funcionará.
—A veces pienso que solo tomas decisiones a lo estúpido.
Tal vez lo hace solo un poco.
Pero ya vería lo que puede hacer, poco a poco, quiere llegar a conocer a la omega lo suficiente para saber cómo tratarla de la mejor manera, quiere agradarle, quiere reconfortarla y por lo menos tener un pequeño espacio en ese corazón roto, para poder repararlo, sería un camino difícil, pero estaba dispuesta a tomarlo, no había marcha atrás y no es como si quisiera retroceder ante sus acciones, estaba dispuesta a todo por esa omega, y se lo demostraría de la mejor manera posible.
¡Ojalá hayan disfrutado la maratón de cinco capítulos! Espero poder hacerles otra pronto. 💖
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Lazo roto | Jenlisa
Любовные романыNo todos los alfas son malos, no todos te rompen el corazón, no todos te dejan a la deriva con un bebé y un lazo roto. Lalisa Manoban aprendió de la peor manera el amor, ahora con un cachorro en su vientre, y un lazo roto por una alfa quien la ha de...