Capítulo 18

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Jennie no sabía si estaba haciendo las cosas bien, pero lo intentaba

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Jennie no sabía si estaba haciendo las cosas bien, pero lo intentaba. Nunca pensó que cortejar a alguien sería todo un proceso y es que en verdad quería que Lisa estuviera a su lado a pesar de que posiblemente ella la rechace en un tiempo.

La castaña es consciente de la posibilidad de que la omega pueda rechazarla, ya sea por motivos personales o si acaso no estaba siquiera interesada en ella, pero esos eran los riesgos que toda alfa debía de soportar en un inicio, de ahí en fuera, todo iba a la normalidad o eso pensaba. Soltó un largo suspiro, Lisa estaba llena de secretos y sabía que sería muy difícil que solamente la mirara y le dijera cada uno de ellos.

Meterse en la vida personal es difícil y demasiado complicado.

—¿En qué tanto piensas? –preguntó la de dientes de conejo, Kim estaba demasiado distraída en ese momento.

—Nada importante –dijo, pero la realidad era que necesitaba alguna clase de consejo.

—Bueno, si no es importante –Nayeon rodó los ojos, su amiga estaba extraña desde hace unos días—, ¿por qué no me dices cómo te ha ido con Lisa?

Ese era el problema, Jennie estaba pensando que quizás no le estaba yendo tan bien como ella esperaba, y es que es demasiado difícil descifrar a la tailandesa. Usualmente las omegas son algo descaradas a la hora de mostrarse interesadas en algún alfa, pero Lisa... La chica se oculta todo, le sonríe, pero no se muestra tan pegajosa como las demás, no se comporta como lo habitual. Debía admitir que le gustaba aquello, pero también le gustaría que Lisa tuviera la suficiente confianza como para comportarse de alguna forma más abierta.

—A decir verdad, siento que lo estoy echando a perder.

Im la miró confundida.

—¿Por qué dices eso?

—Nayeon, es obvio, me rechazará cuando le diga que quiero que seamos pareja —Nayeon no pudo evitar soltar una risa que poco a poco se iba convirtiendo en una carcajada y Jen la miró mal—. ¡No es para que te burles de esa manera! Estoy hablando en serio.

—¿De verdad? —carraspeó su garganta para tratar de controlarse mejor y miró a su amiga, jamás creyó la posibilidad de ver a Jennie así de desconfiada con sus acciones. Jennie siempre se muestra segura, que solo una omega la haga dudar de sus acciones solo quiere decir que es la correcta—. Solo escúchate amiga, no puedes estar hablando en serio, haces las cosas bien, te lo aseguro.

—¡No lo hago bien! –se sentía estresada al respecto—. Lisa no parece realmente interesada en mí.

—¿Y en verdad crees que no lo está? Jennie, tienes que comprenderla, ha pasado por momentos difíciles desde un principio, recuerda que ya había sido marcada, dejada y con un embarazo en proceso. Créeme, si tú fueses omega actuarías como ella lo hace, es normal, uno no puede volver a confiar después de lo que le ha pasado. Lisa es especial en ese sentido y tú, amiga mía, tienes que demostrarle que puedes ser una mejor alfa para ella y que no la abandonarás.

—¿Por qué no te graduaste antes de aquí? —ambas soltaron una risa ante la pregunta, pero Jennie sabía que Nayeon tiene la razón, debía ser paciente y esperar, sabía que Lisa no es una persona fácil, nadie lo es y mucho menos con problemas en el pasado que te llevan a ser como eres ahora, podía comprenderlo y llevaría las cosas con calma, tenía que demostrarle que podía ser una alfa buena para ella, y esperaba poder lograrlo.

Lisa es demasiado complicada; le gusta lo complicado. Debe de hacer un mayor esfuerzo en sus acciones, muy pronto iría a ver cómo va su embarazo, la primera vez que la acompañó se había sentido feliz y al ver a ese pequeño punto en la pantalla, inclusive pensó que era el cachorro de ambas, sabe que no es así, pero la emoción en su interior había sido mucha. Ver la sonrisa de Lisa era lo mejor en aquel momento, y a pesar de que le reclamó cuando salieron del hospital, allí pudo pedirle que le diera una oportunidad y por supuesto no la desperdiciaría.

 Ver la sonrisa de Lisa era lo mejor en aquel momento, y a pesar de que le reclamó cuando salieron del hospital, allí pudo pedirle que le diera una oportunidad y por supuesto no la desperdiciaría

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Lazo roto | JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora