Junpei toma un hondo respiro y aprieta su mochila, debe ir a la escuela, pedir ayuda, sus amigos ya le demostraron que van a sacarlo de ahí, necesita decirles donde está, abre la manija de la puerta y siente que alguien lo toma del brazo.
-¿A dónde vas? -Mahito usa su fuerza para azotar la puerta.
-A la escuela, no debo faltar o sospecharan -responde el menor con miedo de lo que podría hacerle.
-Tengo el presentimiento de que planeas huir con ayuda de tus amiguitos -le coloca seguro a la puerta- hoy no vas a ir a clases.
-¿Qué? Pe-pero hoy es el último día de clases antes de las fiestas, no puedo faltar -el azabache intenta tomar las llaves.
-¿Y? Ya has faltado antes, será normal para ellos-.
-No lo es, llevo con estas faltas desde Mayo, porque tú me amenazaste con lastimar a mi madre -Junpei tenía demasiadas cosas por decirle, más no se siente con la valentía suficiente para encararlo, pues a solas se han ocurrido miles de diálogos.
-Sino cooperas, te puedo dejar en plena calle -responde Mahito ignorando su argumento.
-¿Porqué me lastimas de esa manera? -el menor se abraza a si mismo.
-Porque me importas, te amo y no quiero lastimarte -murmura acariciando su mejilla.
Ante esto, Junpei se limita a asentir, temía realmente por su vida si volvía a preguntar algo.
-¡Despierten mocosos! -grita Toji desde los pasillos colocando su alarma por su parlante y camina por las puertas de sus hijos, toca la puerta de su hija la cual suelta un quejido por ser levantada tan temprano- saben que día es mañana, y debemos aprovechar las ofertas de hoy.
-Yo te dije hace una semana para irnos de compras por la tarde, ah, pero al señor papá siempre le gusta comprar todo a última hora -dice la castaña abriendo la puerta ajustando su abrigo de pijama.
-Hoy salen las mejores ofertas, no voy a comprar carne por 45 dólares, es un robo, hoy es el día, y más temprano mejor, incluso tengo cupones -responde su padre continuando su camino hacia la habitación de Megumi- despierta, oh, ya estabas despierto, ¿qué haces? -al abrir la puerta encuentra a su hijo menor cerrando su laptop de golpe.
-Toca antes de entrar, ¡largo! -Megumi se pone de pie y con las mejillas rojas empuja a su padre fuera de su habitación.
-Ya deja el porno hijo, y alista tus cosas que en 10 minutos nos vamos al supermercado -Toji toma sus llaves y espera a sus hijos en la puerta- 5 minutos.
-¿Qué hora es? -reclama Megumi al ver el exterior y todavía está ocuro el cielo.
-Emn... las 5 de la mañana -responde su padre mirando su reloj- a la camioneta que nos esperan las ofertas.
-¿Estás loco? Acabas de decir que son las 5 de la mañana -reclama Megumi señalando el reloj de la sala.
-Tu eres el loco que ve porno tres horas antes de ir a la escuela ¿Quién hace eso? -Toji frunce el ceño por la extraña situación de hace unos minutos- para peor, no le pones seguro.
ESTÁS LEYENDO
Cupids (FushiIta) (SatoSugu)
HumorSi a Toji Fushiguro le hubieran dicho que en el futuro el menor de sus hijos se iba a enamorar del hijo del hombre que le rompió el corazón en la secundaria... ¿o fue al revés? el punto es... que Toji habría movido cielo, mar y tierra, incluso se ha...