SOLO TÚ《KOOKMIN》

22

ÚNICO AMOR

El desinterés de JiMin puso nervioso a Jungkook . El omega pasó a un lado de él, pero el alfa no quería dejar las cosas de esa manera. Así que en un acto de reflejo, se giró para sujetar a JiMin de la manga de su suéter, pero en un mal cálculo terminó tomando el gorro del suéter haciéndolo perder el equilibrio y tumbarlo de espalda.

Jungkook abrió la boca mostrando sorpresa por su terrible torpeza, JiMin se quedó acostado en el piso, muy confundido.

—¡Lo siento! ¡Lo siento!

Dijo alzandolo y comenzando a sacudirlo y revisar si no se había lastimado.

JiMin muy avergonzado y molesto solo apartó las manos del alfa.

—Dejalo así...—JiMin puso una mano sobre su cuello y se alejó.

—Ji...JiMin...— Jungkook sujetó a JiMin de una mano, pero él omega presuroso se soltó y se alejó.

—¿Qué fue eso?—se oía el bullicio del lugar.

—¿Llamamos al guardia?

—No, el es el CEO Jeon, de Jeon JeonandJeon...¿pero por qué hizo eso?

Se oían a algunas personas al rededor, personas que Jungkook alcanzaba a escuchar, se sentía avergonzado de si mismo en ese momento.

Pero de repente se sintió completamente ajeno a todo.

No era posible que estuviera atravesando aquella situación con JiMin.

¿Aquel lugar era así de grande?

¿Por qué sentía el sonido del mar de repente?

Se escuchaba todo, tan distante.

Para cuando JiMin llegó a su oficina, puso seguro en la puerta, se sentó en su silla, y una lagrima resbaló.

Tenía varias llamadas perdidas, llamadas que debía atender, no podía distraerse más.

—Papá.

—JiMin, quiero verte ahora.—dijo NamJoon al otro lado de la línea.

—¿Ahora?...estoy un poco ocupado papá.

—No quiero más excusas, quiero verte.

JiMin escuchó que colgaron del otro lado de la línea, revisó su agenda, podía hacer algún espacio para ir a casa de sus padres, espero al menos diez minutos en acomodar el lío de emociones que era en ese momento para después salir de su oficina, al caminar por el pasillo dio media vuelta, mirando al pasillo, en aquella curva al fondo que iba a la oficina de YoonGi, la marca ardía, quizá el alfa estaba muy molesto por algo y eso para JiMin era frustrante, ya no quería tener esa clase de sentimientos que lo distraian e interfieran en su calma.

—Hola...—JiMin arribó a casa de sus padres, tratando de tener el mejor semblante posible.

—JiMin.—SeokJin abrazó a su hijo, revisandolo de arriba a abajo.—Te ves más delgado ¿Has estado comiendo bien?

—Si...es solo que eh estado trabajando mucho últimamente.

SeokJin y JiMin entraron a casa, fue cuando NamJoon se asomó a la sala, con una taza de café en la mano, esperando pacientemente a que JiMin divisara su presencia.

JiMin se dio cuenta de esta, al igual que la expresión en el rostro de su padre, que era difícil de descifrar.

—Hola papá.—JiMin sonrió.