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La torre de Astronomia era escalofriante de noche, o eso le parecía a Severus. Aunque era bien conocido por la población general de Hogwarts que este lugar era el más apto para... otro tipo de cosas en las noches. Fue complicado esquivar a los preceptos que patrullaban esa noche, pero fue completamente un éxito.

Ciertamente, el problema más grande no fueron ellos, ni Filch y su gata rara o cualquier otra cosa que se hubiera podido aparecer a hacer un desastre. El problema real y más grande fueron sus amigos.

Ni que decir, los idiotas con los que compartía casa. Porque Severus está realmente enojado con ellos.

Barty ya estaba babeando a esa hora, así que fue un problema menos en la lista, sin embargo, ahí, sentado justo al lado de las ventanas y con toda la luz con relieve marino por el lago. Y ni hablar de Evan, que estaba parado al lado de la chimenea, claramente haciendo su aparición exagerada y dramática.

"¿A dónde vas?" Preguntó Regulus, mirandolo fijamente.

"¿No te estabas bajando de la escoba?" Le devolvió Severus la pregunta, alzando la ceja. Realmente interesado, porque su estrés de hace unas horas no se había disipado en lo absoluto.

Solía ser muy malo con este tipo de cosas, las reconciliaciones y el no sentirse patéticamente atacado con las diferentes reacciones de los demás. Ni siquiera importaba el hecho de que compartían casa, lo peor de todo era el hecho de que recordaba vagamente a Lily. En un inicio su lógica de pensamiento lo había llevado a pensar que era simplemente una reacción en defensa propia, porque tendría todo el sentido del mundo.

¿Después de todo lo que ha vivido gracias a su padre? Sería jodidamente extraño que Severus fuera un chico normal. Pero curiosamente, cuando los demás de su casa lo miraban hacia abajo como si pudieran pisarlo con la suela de sus zapatos y destrozarlo, como un simple cigarrillo muggle sin más uso... fue entonces cuando Severus entendió todo.

Porque no le dolía, no movía ni siquiera un solo vello de su cuerpo ni hacía que su corazón latiera y su boca se dilatara con la necesidad de soltar un comentario incluso más ofensivo como una capa de protección. No. Él simplemente vio de lejos y los ignoró.

Cuando Lily se rió de esa broma, después de verlo siendo humillado hasta la médula, sintió la necesidad, su boca se abrió sin imprevisto y lanzó el comentario más humillante que podía hacer. No tiene justificación, pero ella tampoco tenía justificación.

Sin embargo, Severus intentó recuperar la amistad y pidió perdón, mas las puertas del corazón de la pelirroja habían sido cerradas con fuerza en su cara. Pero ni siquiera fue la primera vez que algo así le sucedía, recordó también como se sintió cuando Lucius mantuvo su distancia en su fiesta de graduación, en ese momento Severus tambió abrió la boca y no se hablaron por lo que fue probablemente los 4 meses más largos de la vida de Severus.

Así que, la hipotesis de Severus, concluyó que esta era una reacción normal para él cuando las situaciones se presentaban con aquellos que le importaban. Maldijo en su cabeza realmente estimar al hermano menor del imbécil de Sirius Black. 

Pero Regulus era diferente. Irónicamente, él era un Slytherin por completo, probablemente la definición y estereotipo de Slytherin; un chico que solo se preocupaba por los suyos y solo colocaría su varita al fuego por ellos. 

Vio perfectamente como la postura de Regulus se volvió rigida y después tan llena de emociones.

"Está bien, no tienes que decirme" fue lo que respondió Regulus, después de haber meditado su respuesta a la pregunta de Severus. Realmente lo pensó, incluso inhaló y exhaló intentando controlar cada pensamiento.

Gryffindor's idiotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora