Cap:05

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Su hermano y ella leyeron el libro, con cada capítulo se asombraban más de la capacidad y poder de su sangre y también de todas las criaturas sobrenaturales que existían en aquel mundo, desde elfos, duendes, hadas, y sirenas. Akala estaba sorprendida, todo esto iba más allá de sus conocimientos del mundo de Crepúsculo.

-Esto es asombroso, tu sangre es capaz de curar cualquier herida, puedes revivir a cualquier criatura sobre natural, aunque esto no funciona con los humanos, a estos solo puedes Curarlos sin importar la herida o enfermedad, pero no los puedes revivir.

Akala lo escuchaba mientras aún tenía los ojos puestos en el libro, esa parte de no poder devolver la vida a un humano la hizo hacer una mueca, no le agrado tanto, pero lo descarto cuando llegó a la parte de hombres lobos, tanto licántropos como metamorfos, al parecer a estos si podría salverle la vida y lo más interesante, con tan solo una gota de su sangre podía volverlos inmunes al veneno de vampiro, también se volverían más rápidos y fuertes, en cuanto a los vampiros, al parecer la función de sus sangre en ellos era similar a lo que pasaba con los lobos, pero añadiendo que los vampiros podrían salir al sol y tener apariencia humana y su sed de sangre disminuirá considerablemente, tanto que solo la tendrían que consumir una vez al mes.

Akala dejo de leer el libro, tanta información le estaba dando dolor de cabeza, así que se lo pasó a su hermano y se rescoto en la cama, necitaba pensar y analizar toda la información, tan solo unos días era una persona normal, y ahora resulta que puede recordar su vida pasada y que tiene poderes sobre naturales, todo eso le daba dolor de cabeza. Axel la vió suspirar y cerro el libro para prestarle atención a su hermanita, ella estaba con los ojos cerrados cuando sintió la caricia de sus hermano en su pelo, lo miro y le dijo.


-Esto es mucha información, en este momento debería de estar en shock y negandome a creer todo lo que está pasando, pero se perfectamente que todo es real y ya no podremos escapar de todo esto, solo tengo miedo de que algo malo te pase, no creo que pudiera vivir si algo te llegase a pasar.

Axel se acercó a ella y se rescoto a su lado, Akala se acurrucó en su regaso, dejando que su hermano la abrazará.

-Tranquila pequeño huron , nada vá a pasarme, estamos juntos en esto y en lo que venga, así que no te preocupes tanto.

Él beso su frente mientras la abrazaba con más fuerza transmitiendo toda la seguridad que podía, hasta que un recuerdo le llegó a la cabeza y con entusiasmo se separó de ella empujándola en el proceso, Akala termino rodando en la cama y callendo al piso en el proceso, pero cundo iba a protestar, su hermano ya no estaba en la habitación.

-Creo que se le chifló el cerebro.

Decía ella mientras se pasaba la mono por  el tracero que fue el que recibió el impacto de la caída, Axel volvió a entrar a la habitación con una enorme sonrisa y una pequeña caja, ella lo miro con una ceja levantada sin entender nada, hasta que su hermano grito con alegría.

-¡Feliz Cumpleaños número dieciocho!


Fue justo en ese momento que ella recordó, se acercó a la mesita de noche y vio su calendario, era ver ese día era su cumpleaños de mayoría de edad, pero con todo lo que estaba pasando se le había olvidado, así que corrió a su hermano para recibir su regalo y un abrazo en el proceso.

-Con todo lo vivido ya se me había olvidado, muchas gracias hermano.

Axel sonrió y le alboroto el cabello, para luego invitarla abrir su regalo, dentro de la caja había un hermoso collar en forma de corazón y con una piedra en como morado.

-Axel, ¿acaso esto es...?


Ella no pudo terminar la oración, ya que sintió un nudo en la garganta y sus ojos se llenaron de lágrimas, el chico con una sonrisa le quitó la joya de la mona y la hizo girar para luego colocarla en su cuello.


-Queria darte algo especial y no creo que hubiera nada mejor que algo qué perteneció a nuestra madre, era su joya favorita ya que fue heredada de su madre quien a su ves lo heredo de la suya, así que creí que esa tradición no debía de perderse.




-Oh Axel gracias, muchas gracias es el mejor regalo.



Después de es momento, ellos se dispusieron hacer cada uno lo suyo, por suerte era domingo así que Axel no tenía que trabajar, a la hora del almuerzo decidieron salir fuera a un pequeño restaurante que era su favorito, mientras axel conducía Akala no paraba de ver las calles de sus ciudad, ellos vivían en nueva Orleans, y para ese momento estaban en verano, lo que suponía que el turismo estaba más que presente en las calles, donde habían una que otra banda de Jass tocando música alegro, el clima era perfecto y el ambiente el mejor, era como si todo a su alrededor le diera la bienvenida a su nueva vida haciendo que la joven soltará un supiero de paz. Después del almuerzo se dispusieron a pasear y recorrer algunas tiendas, para los hermanos Dubois esa fue una tarde muy agradable.



Para cuando regresaron a casa el sol ya se había ocultado, después de comer un aperitivo preparado por Akala, se quedaron mirando televisión, hasta que Axel vió a su hermana cabecear del sueño, así que la instó a qué se fuera a descansar, Akala agradeció, por el día tan lindo que tubo y se despidió de sus hermano, pero cuando estaba por doblar la esquina para diregirse a su habitación, escucho la voz d su hermano.

-Por sierto Kally, recuerda que mañana debes de empezar a empacar tus cosas.

Ella lo miro confundida sin enter muy bien.


-¿Empacar? ¿Eso para que?



Axel la miro con su ceja levantada y le respondió.


-Pequeña liebre, ¿Es que acaso olvidaste que nos mudamos a Forks Washington dentro de dos semanas?






¡Reencarne en Crepúsculo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora