¡Reencarne en Crepúsculo!

Cap:33

-Una vez mas permíteme disculparme por todo lo ocurrido.

Akala miro a Esme que estaba sentada frente a ella, habían pasado alrededor de una hora y media desde lo ocurrido, después de unos treinta minutos de que Esme se fuera con Alice, está última había salido del despacho de Carlisle furiosa, no le dirigió la palabra a nadie, pero no fue necesario, con la mirada que está le había dado a Akala fue suficiente para saber que la vidente se había llevado una buena reprimenda, unos minutos después Esme había salido con una amable sonrisa, las galletas y el pastel ya estaban listos, así que se lo repartieron y todos fueron a sentarse en el salon. Akala le sonrió a Esme, ya era la tercera vez que la madre vampiro se disculpaba con ella.

-Esme por favor no se preocupe, todo está bien, de verdad, todo esto no cambiará la perspectiva que tengo de ustedes.

Esme asintió, realmente le preocupaba que Akala se sintiera incomoda en su presencia y es que la chica le había caído muy bien, su personalidad alegre y adorable era algo que hacía que los demás quisieran estar cerca, aunque Esme y el resto también se dieron cuenta que a pesar de verse como una adorable chica de baja estatura, Akala tenía un carácter fuerte y arrasador, algo que podía salir a relucir si alguien la atacaba o a alguien importante para ella. Emmett que estaba sentado en el mismo safa que Akala, se movió un poco incómodo, a pesar de la tranquilidad de la chica él aun temia que ella saliera corriendo y no volviera mas, tan solo de imaginarlo sentia un dolor muy fuerte y el miedo se apoderaba de él, Jasper podía sentir sus emociones y para ayudarlo le mando una oleada de calma, Emmett lo miro y le agradeció con la mirada, Akala se dió cuenta de la inquietud de Emmett, así que lo miro y sostuvo su mano.

-Oye, te prometo que no saldré corriendo, enserio Emm, no me das miedo.

Emmett suspiro, entendía perfectamente las palabras de Akala, pero una cosa era entenderla y otro la realidad de lo que sentía.

-Lo siento Tinkerbell, puedo entender lo que dices, pero se me es difícil comprender que te quedes, pienso que en cualquier momento entraras en razón y te irás, quiero que sepas que si decides alejarte lo entenderé, ni Rosse ni yo te detendremos, creo que te queremos demaciado como para obligarte a permanecer a nuestro lado después de saber que somos unos mounstros.

Akala frunció el ceño al escuchar la última palabra, no le gustó para nada que ellos se considerasen de esa manera, no cuando ella sabía lo mucho que luchaban cada día para no hacerle dañó a ningún humano, así que ella tomo una decisión, les contaría su secreto o por lo menos una parte de el, tal vez así Emmett y Rosalie se sentirán más tranquilos al saber que no son los únicos sobrenaturales.

-No eres un monstruo, ni tu, ni ninguno de ustedes, yo no los considero asi, todo lo contrario, para mí son una familia muy unida que tratan día tras día llevar una vida más normal, no soy tonta, se exactamente de qué se alimenta un vampiro, pero los eh visto a ustedes ir a la escuela y convivir rodeados de humanos sin atacar a ningún, el señor Carlisle trabaja en un hospital ayudando a las personas, el control que ustedes demuestran es admirable, y aunque apenas nos estamos conociendo, debo decir que una parte de mi se siente orgullosa del esfuerzo que cada una de ustedes muestran cada día.

Lo último Akala lo dijo mirando a Jasper fijamente, era claro que el mensaje era directamente para él, al ver su ojos oscuros llenos de compasión, Jasper sintió como si su muerto corazón diera un fuerte latido, se quedó atrapado en la mirada de la chica, hasta que ella la apartó con un leve sonrojo en sus bronceada mejillas, Akala no entendía que tenía el vampiro que la hacía sentir así, pero una vez más se recordó que él tenía pareja y dejo sus pensamientos, los otros vampiros presentes se dieron cuenta de la interacción silenciosa entre ellos dos, sobre todo porque el corazón de Akala había empezado a latir más rápido, para llamar la atención Carlisle se aclaró la garganta y dijo.