— Rico.
— URANO ¿¡QUE ESTAS HACIENDO!?— Dijo el de voz chillona detrás de el.
— SATURNO QUE MIERDA. — Voltea a ver al anillado con lo que estaba dibujando en mano.
— ...¡OH POR MIS ANILLOS! — Le quita la libreta de golpe asustando al celeste. — ¡QUE BELLO DIBUJAS!
El anillado se lleva el cuaderno de dibujos hacia donde está su querido Júpiter, Urano ve sus manos y apenas se da cuenta que no está su libreta, con miedo en sus ojos va corriendo detrás del anillado para recuperarla.
— ¡Mira que lindo dibuja nuestro Urano! — Le muestra la libreta al de lentes.
— ...¡Oh! ¡Wow! ¿De dónde aprendió a dibujar tan bien? — Mira página tras página con una sonrisa hasta que se detiene.
— ¡M-MI LIBRETA! — Llega dónde los anillados quienes lo miran con una mirada juzgando.
Le muestran la libreta al anillado menor, el dibujo era simplemente uno mal hecho de ambos gigantes mayores dándose un beso, de lengua. Uno que obviamente no lo dibujo el, si no su querido hermanó neptuno que solamente dibujo eso jugando.
— ...Urano, ¿que significa esto? — le da la libreta al anillado quien sigue revisando.
— qUe tE iMPorTa. — Dijo el gigante menor, mirando al que pregunto desafiante.
— ¡Si me importa! — Un grito de parte del anillado lo hace voltear rápidamente hacia el.
— ¿¡ESE ES TIERRA!? — Suelta la libreta aterrorizado de lo que vio, urano la toma con rapidez.
— ¡NO! — esconde la libreta en su chaqueta y se levanta.
Júpiter toma a su Saturno antes de que este se desmaye al ver las barbaridades dibujadas por el menor, Saturno estaba sorprendido y sacado de onda, el no conocía ese lado del celeste, ese celeste planeta que cuido junto con su hermano pidiendo a las estrellas que sean planetas ejemplares como el y su amado esposo.
¿Pero esto? ¿Cómo aprendió esto...?
— ...¡Urano explicanos! ¡Ahora! — Mira enfadado al menor luego de intentar reanimar a su pareja.
Urano traga duro y juraba que estaba sudando.
— ¡Urano! Vol—...¿ah...? — Neptuno mira a su primo extrañado, urano tapaba su cara con sus manos estando sentado.
— ...Creo que la cague.
