Cuatro
El olor a lirios era insoportable. Los funerales me parecen tan tontos. Mucha gente que hablo mal de los padres de Em, estaban allí. "Llorando" y diciendo que lo "sentían".
También había gente que nunca los conoció y decían que sabían lo que Em sentía.
Yo solo me quedé a su lado, callada, con la vista hacia el frente.
No sabía que hacer. La gente desaparecía de mi vida, pero nunca tuve un cadáver a quién velar y enterrar.
Además mis padres en cuanto al tema de la muerte, la ven de una manera tan normal. Como si eso pasará todo el tiempo. Casi nunca los he visto llorar.
Mis padres a veces se ponen tristes y tal, pero muy pocas veces llorar.
La única que ahora recuerdo fue cuando llegó una vez una carta. Era una carta del gobierno. Mi madre se derrumbó en el suelo y se hecho a llorar. Mi padre después de leerla también hizo lo mismo.
Jake y yo estábamos muy asustados. Luego nos enteramos que Ana José, la antigua líder había fallecido.
- Es mentira. No hay cadáver, no hay nada - decía mamá.
Recuerdo que luego de eso las cosas empezaron a cambiar. A.T.S nunca volvió a ser el mismo. Mucha gente dejó de recibir la cura. El ejercito comenzó a matar gente que antes no era enemiga. Mi tía no volvió, ni la dulce señora de cabello corto, ni el tipo musculoso de la ballesta. Tampoco el chico guapo con sombrero, con su linda hermana. Y todas esas personas que me parecían tan buenas y graciosas.Como dije, la gente desaparecía de mi vida. Pero todavía existía la esperanza de que algún día volvieran. Pero un cadáver nunca volvía. Nunca.
Em tenía hermanos mayores. Ellos tenían su vida y Emily no estaba incluida en ella. Los hermanos de Em no la veían hace años. No les importaba Em. En cambio a mi familia sí.
- Cariño, sabes que eres bienvenida en nuestra casa-dijo mi madre con su tono dulce.
- Gracias Señora Dixon. Creo que su ofrecimiento me lo tomaré muy a pecho.
Pero Em no llegó esa noche. Supongo que quería estar sola y reflexionar. Yo sigo teniendo un nudo en el estomago. Yo sé quién los mató. En realidad no porque no sé su nombre. Pero vi su rostro.
Tenía el cabello rubio encendido y unos ojos celestes que te mueres. No olvidaría un rostro así de hermoso. Creo que Fabían debe sentir lo mismo que yo. Esta culpa tan perra, tan estúpida.
- Oye, hermanita-me dijo Jake.
- ¿Crees que los amigos de nuestros padres están muertos?- le dije.
Ya habíamos llegado a la casa. Estamos solos en nuestra habitación. Con todo esto había pasado el tiempo tan deprisa que era de noche. Estaba confundida... Jake no era el mejor hermano del mundo, pero me conocía. A veces hasta más de lo que yo me conozco. Sabía que estaba rara.
- Espero que no. Ellos no eran malas personas, si mal no recuerdo. Eran muy buenos, a pesar de ser sobrevivientes.
- Nuestros padres son sobrevivientes. No son malos.
- No estoy diciendo que lo sean. Los padres de Emily tampoco lo eran, pero sabes que no eran normales.
- Lo sé. Pero a ciencia cierta... Nosotros tampoco lo somos. Tenemos cosas prohibidas. Nuestros padres están en contra de todo lo que dice A.T.S
- ¿Crees que los mataron por ser...?
- Sobrevivientes- dijo mamá entrando a la habitación. No era la primera vez que nos escuchaba tras la puerta.
Mi hermano y yo asentimos. Era lo más lógico. Ellos no hacían nada malo. Solo se comportaban de una manera extraña y era muy evidente que eran de afuera.
Okay mis padres eran de afuera, pero no lo demostraban. Ellos eran tan astutos que aveces me daban miedo. A decir verdad no me imagino a mi madre luchando y matando. Hay veces que pienso que tal vez a ella siempre la protegió mi padre. No niego que sea astuta pero no creo que haya manejado una arma.
- Por eso hay que cuidar lo que se dice mis niños- dijo mamá.
Mi padre llegó y me abrazó. Siempre olía como a especias. Mi padre y yo nos llevamos muy bien. En cambio sentía que mi madre era como más dura. Como yo... Y dos como nosotras somos una explosión.
- Hora de dormir-declaró mi padre.
Mi madre de besó en la mejilla y me sonrió. Era la hora de la canción que tan malos recuerdos le traía. Antes de que se fuera le dije:
- Prohibieron la Vida de Lucy.
Ella se sonrojó. Tenía una cara neutral. Supongo que no sabía como reaccionar. Mi padre la miró de una manera extraña. La rodeó con los brazos y la besó. Le susurró algo y mi madre se marchó a su cuarto.
No sabía porque le importaba tanto. Era mi libro favorito, pero a ella nunca la había visto leyéndolo.
- Bueno hora de dormir-dijo mi padre.
Apagó las luces y comenzó a cantar.
Don't be scared
I'm still here
No more time
For crying dear
Y me dormí pensado en las últimas líricas y en como mi mundo iba a cambiar más pronto de lo que nunca imaginé.
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Danah (Segunda parte)
Fiksi IlmiahHan pasado veinte años desde que la cura existe. Danah ha vivido toda su vida detrás de los muros del A.T.S. Ha escuchado historias de la gran catástrofe y tiene curiosidad de lo que hay allí fuera. Quiere saber si esas criaturas existen. Esta vez...