Heartbeat (Greed-ler x Once-ler)

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La luz eminente atraviesa la habitación poco a poco, lenta y delicadamente, Once-ler abre los ojos, llenos de lagañas como telarañas, los frosta y rasca para desprenderse de sus aliadas así sucesivamente hasta que se desprenden de su portador, mirado hacia enfrente ve aquel atuendo de regalo que le dio la bestia, lo mira sin interés y disgusto, hacia tanto frío que se preparó una taza de café y algunos panqueques, hoy seria el dia donde encuentre trabajo, la harina de panqueques se acaba y su vida también, como un reloj de arena... harina de panqueques en un reloj.

Antes de salir, decide pensar un poco; "Que tal si lo juzgue antes de hablar?" "Y si lo imaginé todo?!" "..."

Estaba decidido, hablaría con el, lo solucionarían y le pondría una orden de alejamiento, tal vez muy drástico pero su reloj de harina de panqueques se acababa y tenía que actuar rápido, pensar rápido.

Afuera hacia frío, por suerte, un misterioso atuendo invernal estaba en su closet, tal vez alguien con la nariz rota se lo dejo en el pórtico de su casa, se puso aquel atuendo afelpado y marrón al igual que la bufanda rosada, se puso en marcha con la cabeza en su lugar y pies en la tierra y ando rumbo a la mazmorra con el jefe final... La fábrica de Thneed.

Entrando en ella, no fue difícil, los guardias no le dijeron nada "Espera, no he sido despedido?"

-Tardaste mucho, donde rayos estabas?!-. La recepcionista estaba furiosa, lava salía de su boca y oídos.- El jefe estaba como loco buscándote... Durante los primero 25 minutos, después le dio igual.

-No... me despidieron?-

-No, ahora ve y firma tu ficha-

Once-ler avanzó, no firmara nada, solo hablaría con el jefe final lo resuelve todo y fin del juego. Tomo el elevador justo hacia la oficina de su jefe, avanzó por el largo pasillo de alfombra roja de terciopelo con estampados dorados en los bordes, habían cuadros del jefe final por las paredes presumiendo la enorme suma de poder que poseía, abrió la puerta y...

-El jefe no esta, regresa más tarde-. Un hombre recogía algunos documentos de el escritorio de Greed-ler-

-Que? a donde fue?-

-Yo que se-. El hombre antipático salió de la oficina empujando a Once fuera de ella también.

Once-ler salió a regañadientes, se sentiría mal si no habla con Greed sobre lo sucedido, así que salió de la fábrica a hurtadilla evitando a la recepcionista, regresaría más tarde para terminar con esto.

Camino por las frías calles de Thneedville, nevaba casi todos lo días pero este día en particular nevaba más, pasó junto a una tienda de juguetes con el escaparate expuesto con luces brillantes, exponen unos peluches hermosos, de alta calidad "tan bellos, necesito uno" Once-ler dijo para si mismo mientras se pegaba más al cristal tenían una etiqueta roja con estampado dorado por los bordes donde venía escrito el nombre del peluche y el de "Greed-ler..." mencionó en susurro decepcionado pues en verdad queria uno pero no queria recordarlo a el.

-*cof* *cof* puede apagar su cigarro, es molesto-. Una figura hizo presencia al costado derecho de Once-ler fumando un cigarrillo haciendo toser y sacar de sus pensamientos al joven.

La figura imponente volteo hacia su compañero, era nada más y nada menos que el jefe final, Greed-ler, pero tenía un vendaje notorio en su nariz "Yo... le rompí la nariz de un portazo?!" Once-ler se sonrojo de la vergüenza y apartó la mirada para mirar nuevamente al escaparate.

-Has faltado mucho al trabajo y pienso bajarte el sueldo-. Greed tambien miro nuevamente al escaparate sin recibir ninguna señal de su compañero.- Son hermosos, no?

-Los que?-. Once-ler rompe sus pensamientos y mira confundido a su "jefe".

-Los peluches, robe tu idea-. La mirada desconcertada de Once se rompe y muestra una de enojo.

Once-ler se separa del cristal para apreciar más a los peluches de animales, había un cocodrilo junto a un conejo en la parte inferior izquierda, volteo a la esquina inferior derecha y estaba una mariposa de ojos grandes y brillante junto a ella estaba una oveja, y en el centro levantados por un pedestal y ligeramente más iluminados estaba un lobo y a su lado un gatito asustado con sombrero gris, Once-ler los miro a ambos un poco confundido y sorprendido pero antes de poder decir algo su compañía habló.

-Lo siento-. Greed no apartaba la vista del escaparate, era de noche y empezó a nevar mas ligeramente.-No fue efecto del alcohol... Fue mi culpa, mi error.

Los ojos de Greed-ler se cristalizaron, eran lágrimas congeladas en sus ojos las cuales luchaban en contra de la voluntad de su portador para poder salir.

-Estas... Llorando?-. Greed apartó la mirada rápidamente para darle la espalda y una lagrima consiguió salir recorriendo la mejilla de Greed-ler.

Greed-ler no respondió y pensó muy bien en sus próximas palabras, una palabra en falso y se acabaría.

-Lo siento...-. Greed-ler rompió en llanto para después abrazar a su compañía y hundir su cabeza en el pecho de Once-ler tomado fuertemente la chaqueta de este mientras lloraba.- Lo... lo siento, no te alejes de mi, por favor.

-Te sientes bien?-. Once-ler estaba abrumado por la situación, jamás pensó en ver a el hombre más frío del mundo llorando en su pecho suplicando para que no se vaya.

Después de un par de minutos llorando, se retiró del pecho de Once con un sonrojo de vergüenza limpiándose las lágrimas, después miró a Once-ler a los ojos, puso amabas manos en sus mejillas frías y lo beso.

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Esperen otro medio año a que actualice.

Soy fan de los juegos de mazmorras con cartas y por turnos, tal vez por eso Dicey Dungeons es mi juego perfecto, queria hacer homenaje a este estilo de juegos en la historia por que se me hacia lindo, siempre hago homenaje a cosas que me gustan en las historias... como los peluches, la nieve, los escaparates y los besos fríos.

Eso es todo, me ayudarias muchisimo dejando una hermosa estrellita, eso me anima muchísimo.

Os amo.

chaoo

Espera... Alguna vez has soñado? no te has preguntado... de dónde vienen los sueños? (esperen nuevo comic de mis sueños (aparece Once-ler como 20,000 veces))