Extra: Graduación.

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Extra: "Graduación"

Adrien Richards

Jalo a Amelie, conmigo ella me sigue me siento un poco mareado a la hora de caminar por el alcohol en mi sistema. No se cuánto tome, los chicos llegaron a la mesa ofreciéndome todo tipo de trago y no rechacé ninguno.

Amelie camina al frente de mi tambaleándose también la escucho reír, me preocupo cuando noto que su pie se dobla por sus altos tacones la sostengo por la cintura antes que se caiga.

—Mi héroe—se gira hacia mi—¿Cómo podre agradecerte?

Me pregunta, sosteniendo mi cuello mientras desliza su pequeña y delicada mano, desde mi cuello hacia abajo lentamente. Empezando a desabotonar mi camisa.

Abro la puerta del primer salón que encuentro pongo una silla como puedo para evitar que nadie habrá la puerta. Amelie me quita el saco como puede beso sus labios con ferocidad logrando que gima en mi boca. Giro poniéndola de espaldas, mientras beso su cuello mis manos se dirigen a su corset. Como puedo lo suelto y el vestido cae a sus pies.

Ella se gira a mirarme solo lleva unas bragas negras de encaje, saca los pies del vestido y lo pisa.

La imagen que tengo delante mío hace que mi miembro empiece doler demasiado, contemplo la vista Amelie con sus pechos al aire. Esos pechos que encajan perfecto en mis manos, su pezón rosado y sus pechos firmes me hacen tragar saliva viéndola, su cabello un poco despeinado, pero no tanto, sus curvas se ven de infarto en la oscuridad, luce como una diosa teniendo únicamente sus tacones y unas bragas. Sus labios completamente hinchados por el beso y sus ojos azules brillando en la oscuridad el aula. Es una imagen que nunca olvidará ni él día de mi muerte.

Lo hermosa y diosa que se ve, mi chica.

Me lanzó a comerle la boca, el beso es apasionado lleno de desespero, de sus labios salen sonidos obscenos. Mi mano viaja a su trasero, lo azotó con ferocidad, Amelie gime con fuerza.

Como me encanta.    

La sostengo de los glúteos y la siento en el pupitre del maestro, dejo de comerle la boca para ir a besarle el cuello, me saco la camisa lanzándola aún lado del salón. Ella me abre un hueco en sus piernas, me mantengo allí atrapado en sus labios, en un beso lleno de deseo, mi mano la sostiene de la cintura. Sus piernas abrazan mi torso.

Dejo de besarla, para llevar mis manos a una de sus piernas, la recuesto suavemente en el pupitre, ella me mira y yo miro directo a esos ojos azules brillantes que tanto me fascinan, mi mano viaja a su pierna derecha la sostengo con fuerza y subo su pierna a la altura de mi boca y empiezo a besar su pierna hasta llegar a sus muslos acercándome cada vez más. Amelie se mueve un poco, soltando leves jadeos, voy subiendo poco hasta llegar a su vagina.

Mi aliento golpea a su clítoris sobre la ropa interior, paso mi lengua sobre la tela del interior ella gime, mis besos suben poco a su boca y mis labios llegan a sus pechos atrapando con mis dientes uno de sus pezones, con su otra mano la pasa suavemente por su areola un jadeo sueltan sus labios se estremece cuando siendo que pellico con fuerza su pequeño pezón ella gime fascinada, me encanta ver la de esta manera.

Tan desesperada y necesitada de mi...

—Esa es de mis imágenes favoritas de ti, verte ansiosa por mi—confesé—Mojada y esperando por mi pene.

Mis labios fríos van a su cálida piel, la veo desfrutar la caricia de mi lengua por toda su areola para llegar a su pezón y mover mi lengua por todo este. La veo levantar sus caderas buscando un toque desesperada, muevo mi pierna un poco hacia adelante y levantándola un poco está haciendo que Amelie choque con mi rodilla, muevo un poco la rodilla ella se restriega a está buscando una fricción.

Finales Escritos©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora