୨i am you୧

629 45 39
                                    

DICIEMBRE 2022.

—El contrato estará vigente hasta un poco más de dos mil veinticuatro. Serán revelados el primero de enero por dispatch. Para que pueda ser así tendrán una cita mañana. No van a ser cuidadosos, necesitamos que tomen las fotos rápido y que al contactarnos les demos luz verde para que sean publicadas— Explicó.

Wonyoung quiso llorar cuando escuchó las palabras del hombre frente a ellos. ¿Un contrato de relación falsa con el visual de ENHYPEN? Estaban locos.

Las palabras y el plan de su ceo eran como mandarla directamente a la muerte; una donde los insultos y amenazas, no iban a faltar. Wonyoung no quería hacer eso.

Pero no tenía de otra.

—No quiero hacer esto— Dijo el chico a su lado, siendo demasiado valiente— No me puede hacer esto— Exclamó esta vez, mirando a su jefe.

—Lo siento, Sunghoon. Pero esto será algo importante para los chicos y también para IVE— Se disculpó mientras los miraba a ambos— Cuando menos lo piensen, se acabará— Aseguró.

—Son casi dos años fingiendo ser una pareja, ¿Creen que es justo para ambos?— Cuestionó enojado— Además, le mentiremos a nuestros fans. Nosotros también podemos decidir si queremos o no, a fin de cuentas, somos los que van a soportar los insultos.

—Sunghoon... —Intervino esta vez el ceo de starship entertainment— Ustedes no tienen opción en esta decisión. Sí, son los idols y ustedes recibirán la exposición ante el público. Pero, nosotros los manejamos. Están bajo nuestro control, quieran o no. Tienen un contrato que cumplir.

Y cada palabra era cruda para los menores. Tienen razón, ellos les habían vendido su imagen pública para que hicieran lo que les venga en gana, no tenían posibilidad de escapar aunque lo intentaran.

Sunghoon lo detestaba, odiaba sentirse controlado y odiaba tener que seguir sus órdenes.

En cambio, su próxima a ser novia falsa, tenía más miedo que rabia. Era una rookie, hacía pocos meses que había logrado su sueño de debutar. No podía darse el lujo de revelarse ante su empresa, porque parecía no tener derecho.

Además, estar en una relación con el visual del grupo cuya fama estaba empezando a crecer como espuma, podía ser un riesgo gigante para su reputación.

No quería tener a todo un grupo de fans odiándola.

—Esto hará que odien a IVE —Dijo la coreana en tono bajo, pero el silencio de la oficina hizo que sonara perfectamente claro.

—Pero tendremos a la pareja más importante e icónica de Corea. Al principio serán criticados, pero después todos los amarán. Serán portada en revistas famosas, desde ELLE hasta VOGUE, ¿No les parece fascinante?— Cuestionó con una gran sonrisa y la ceja alzada.

Sunghoon no encontraba nada de fascinante en su situación.

—¿Qué pasa si no acepto?

—No tienes opciones— Respondió su ceo— Tendrás que aceptar sí o sí. Lo mismo con Wonyoung— Dijo esta vez mirando a la menor, que jugaba con sus dedos.

El visual de ENHYPEN soltó un bufido resignado y se levantó de su silla. Poco le importó ser descortés y maleducado, porque lo menos que quería en ese momento, era seguir viendo la cara de aquellos hombres.

Terminaría demostrándoles lo bueno que era en boxeo, utilizando sus arrugadas caras como sacos para practicar.

Y no sentiría remordimiento.

—Wonyoung, acompañalo.

—¿Y-Yo? ¿Por qué?— Cuestionó, mientras señalaba con el dedo su pecho. Miró de vuelta la puerta por donde había salido el chico anteriormente y soltó un suspiro.

—Ustedes van a pasar mucho tiempo juntos. Lo mínimo que pueden hacer, es conocerse y hacerse amigos.

¿Amigos? Sunghoon ni siquiera le había saludado cuando llegó a esa oficina. Ella dudaba mucho que quisiera tener una amistad en medio de toda esa farsa.

—Está bien— Accedió.

Antes de irse, hizo una profunda reverencia ante los mayores y salió de la oficina.

Con lo primero que se encontró, fue con Sunghoon sentado en uno de los sillones; tenía la cabeza entre las manos, mientras apoyaba los codos en las rodillas y, por supuesto, no se veía para nada bien.

Wonyoung se acercó temerosa, como si de una pequeña conejita asustada se tratara. Mordió su labio inferior levemente y tuvo una batalla interna entre hablarle o ignorar su presencia.

—Si quieres hablar, hazlo. No te quedes como una rara mirándome.

Pegó un pequeño salto al escucharlo hablar de repente.

—Sunbaenim... —Dijo y se maldijo cuando su voz se escuchó un poco débil y tal vez, entre cortada— Lo siento por lo que pasó allá adentro.

Sunghoon alzó la cabeza, su mirada cayendo en el rostro pequeño y redondo de Wonyoung.

Él no podía negar que la chica era muy hermosa, parecía una pequeña muñeca humana. Pero, no era su tipo.

—¿Por qué me hablas?— Inquirió.

Y se desconocía, porque él no solía ser tan rudo con otras personas. Sus hyungs estarían muy decepcionados si lo vieran, pero en verdad ahora lo menos que quería hacer, era hablar con Wonyoung.

—Y-Yo sólo quería conversar con usted. Estaremos en esto juntos y-

—¿Juntos?— Interrumpió el chico y dejó salir una risa seca después— Tú y yo no estamos juntos en nada. Créeme que no necesito tu cordialidad en estos momentos— Agregó.

Wonyoung sintió sus ojos húmedos al escuchar las palabras del chico. Era más rabia e impotencia, que dolor.

—Eres molesto— Soltó.

Ella no sabía mucho sobre insultar o herir los sentimientos de otras personas, era mejor con las acciones e indiferencia.

Así que cuando Sunghoon escuchó su pequeño comentario, rió con ganas. Pero, no pudo replicar o decirle algo, porque la castaña ya se estaba marchando del lugar, con la cabeza en alto y sus largas piernas sacándola de ahí.

—Tendrás que soportar esto por mucho tiempo— Murmuró el chico para si mismo.

Y será mucho más de lo que él esperaba.

I AM YOU  ─── jangkku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora