❥︎Parte 10

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Sexo.

El era para Yoongi la mejor manera de escapar de todo y enserarrse en la pequeña burbuja de amor y pasión que había inflado junto a su omega. Automáticamente sus labios se tocaban de esa manera en la que ambos sabían que aquello llegaría hasta la cama, Yoongi desconectaba y se iba por la rama.

Además, aquella era la única manera en la que su lobo se contentaba y se lucía como alfa; Jimin durante el sexo era dócil, obediente y se expresaba de una manera que llenaba de orgullo y poder a su alfa.

No estaba contento con ello, pero era la única forma en la que se sentía el alfa de Jimin: somentienfolo contra la cama, dejándolo sin movimiento y obligándolo a rogar por más.

—Joder, joder.—Soltó en un hilo de voz mientras su cuerpo era profanado con violencia contra la mesada de la cocina.

Su cara era presionada por la mano de Yoongi contra la seramica fría y sus caderas sostenidas sin piedad; eran movimientos erráticos, desesperados por la búsqueda de la cúspide del placer, eran gritos y lloriqueos de completa satisfacción de tenerse el uno al otro de esa manera.

Eran los labios de Jimin gritando su nombre y sus manos apretando con fuerza el borde de la meseta lo que llevaba a Yoongi a otro nivel de placer y no estaba dispuesto a abandonar eso.

—Bebé.—Yoongi estaba a punto de llegar, a punto de tocar el cielo que se ceñía entre la tierra y los gemidos de Jimin.—Mierda, Jimin.

El mayor tenía intensiones de decirle que no maldijera, pero entonces el nudo comenzó a crecer y se quedó con pizca de respiración al notar de Yoongi no paraba de moverse.

Era grande, duro y doloroso, pero lo tenía rodando los ojos hasta que llegó al final y la frente del alfa chocó con su espalda.

—¿Estás bien?—Entonces escuchó el omega y la voz no le salía.

—S-sí.—Dijo con dificultad.

Le dolía todo: las piernas del tiempo que llevaban allí parados, el estómago que se presionaba contra el borde de la meseta, su cabeza y ahora, con los dos nudos seguidos que había recibido, su entrada ardía un poco.

—Te tiemblan las piernas.—Sonrió y besó la nuca del mayor, escuchándolo respirar aún con algo dificultad.

—Es que, qué posición más mala para tener un nudo, joder.—Se quejó, pero los toques de su alfa en sus piernas lograban tranquilizarlo un poco.

—Ya, tranquilo, este va a durar menos.—Siguió besando su cuello y lamiendo como si se tratara de un dulce la marca que había reabierto un par de horas antes.—Quería preguntarte algo ahora que estamos tranquilos.

Bueno, tranquilos, si se podría decir así.

—Dime, mi amor.—Echó para atrás una mano y comenzó a acariciar el pelo del alfa; automáticamente este cerró los ojos y recostó su cabeza de la espada del omega, disfrutando de las caricias y sintiéndose en aquel momento como si estuviese flotando en el aire.

—Ayer en el trabajo me crucé con Moonbyul en el pasillo y... me salió natural coger e ignorarla.—Jimin reprimió una sonrisa de pensarlo.

Jimin - 1363875 / Moonbyul-shi - 0. Como siempre.

—Y... ¿Cómo reaccionó?—Dijo, como si no tuviera un remolino en el pecho que amenazaba con salir en una risa malvada.

—Mal, creo, me llamó pero seguí caminando.—Explicó y levantó la vista para el rostro del menor.—Fue por... por lo que me dijiste en el celo, ¿recuerdas?

—Ahm... Vagamente.—Lo que quiere decir que: recuerda cada maldita palabra, pero en realidad no quiere decirlo ya que dijo en un momento de desacato algo que no había admitido.

Be My Alfa| ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ| OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora