━ 13. ERROR TRAS ERROR

208 33 0
                                    

❝ Siempre pensé que tocar el cielo sería imposible, hasta que te conocí

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

❝ Siempre pensé que tocar el cielo sería imposible, hasta que te conocí. ❞

EL DOLOR DE CABEZA atormentaba mi brillante y gloriosa mañana. Despertar de malas se había convertido en un hábito luego de ingerir alcohol una noche previa.
Pero lo que más me sorprendía era que todo aquel dolor parecía pasar a segundo plano ante la presencia de la rubia, Sofi. Esta había despertado ya, y parecía no tener la mejor de las expresiones. Ambos simplemente nos miramos el uno al otro antes de extender una taza de café. Sin duda, nos esperaba una larga mañana.

Cargar el auto resultaba más complicado de lo que parecía, intentar que las cajas se acomodaran, sin duda eran todo un reto, por lo que cambiar de lugar cada una de ellas tomaba diez minutos para que todo encajara en el auto.

— ¿Estás lista? — pregunté con entusiasmo. Sofia asintió con una sonrisa, por lo que no pude evitar envolver mis brazos en su cuerpo.

Tal acto producía un sin fin de emociones, pero no podía negar que me generaba tanta paz.

— Supongo que no hay que perder el tiempo — mencionó con melancolía al mirar por última vez la que alguna vez fue su hogar.

Ambos nos dispusimos a emprender nuestro camino, por lo que platicar de cosas triviales resultaba sencillo, solo si lo hacía con ella.

— Supongo que tendré que invitarte a desayunar — bromeó mientras colocaba la siguiente canción.

— Y claramente no lo negaré, es lo mínimo que pagarías por mis servicios.

Sofia rió, provocando que también lo hiciera.

— ¿Así que eres algo así como mi esclavo? — simplemente detuvo el auto para mirarla con las cejas levantadas.

— Solo por un corto tiempo — por inercia acerqué mi cuerpo hacia ella mientras aquella sonrisa se mantenía en su rostro.

— Tendré que aprovecharlo al máximo
— podía sentir su aliento chocar contra mi rostro, riendo ante tal comentario, sin embargo, ambos pegamos un grito al escuchar el claxon del auto detrás.

Luego de comprar el desayuno y llegar a casa, ambos bajamos del auto, rumbo hacia su nuevo departamento.
Fruncí el ceño al notar a Sarah en el lobby con expresión molesta.

— Hola, amor — mencioné antes de plantar un beso en sus labios, acto que esta a fuerzas acepto.

— Te he llamado desde hace media hora, teníamos un compromiso, ¿dónde has estado? — preguntó, mientras analizaba mi vestimenta.

𝑪𝑹𝑼𝑬𝑳 𝑺𝑼𝑴𝑴𝑬𝑹    ━━     𝘱𝘦𝘥𝘳𝘰 𝘱𝘢𝘴𝘤𝘢𝘭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora