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Pablo
Que bien le sienta el sol a mi rubia. Ahora mismo estaba tumbada en la hamaca con un bikini azul eléctrico, que con el moreno de su piel quedaba espectacular.
Estábamos en Ibiza, mis amigos de Sevilla me dijeron que si este verano nos íbamos de viaje ya que yo cogía vacaciones. Les dije que sí, que nos fuéramos a Ibiza a disfrutar del verano.
Pero no iba a dejar en Barcelona a Leila, y menos ahora que estábamos siendo algo. Digo algo porque ninguno hemos dado el paso, yo lo quiero hacer, pero quiero que sea especial y bonito y además quiero que sea en Sevilla. Nuestra ciudad.
-Gavira, límpiate la baba que se te cae chiquillo- me dijo Mario, un amigo mío desde pequeño.
-Que te calle' "willy"- le dije. Willy era un apodo que le teníamos desde pequeño, ya que de pequeño tenía el pelo largo y su madre se lo corto por encima de los hombros y parecía Willy Wonka, desde ahí dejó de ser Mario para nosotros y ahora era Willy.
Llevo con las mismas amistades desde pequeño. Todos éramos vecinos y después en el colegio siempre estuvimos en la misma clase, hasta que yo me fui a Barcelona. Pero siempre que bajaba a Sevilla salíamos a la calle y nos íbamos a jugar al fútbol en el parque.
Somos cinco y siempre lo hemos sido. Mario (Willy), Alejandro (Ale), Ana (Anita), Daniela (Dani) y yo, Pablo (Gavira).
-Illa, ¿y tú de donde eres?- le pregunta Ana a Leila.
-De Los Palacios- le responde.
-Anda, que casualidad, nunca te había visto por allí- le dice Ana.
-Ya, es normal. No salía mucho por el pueblo, siempre me iba a Triana para salir.
-Ahh- finalizó Ana.
Me acerqué a la tumbona de Leila ya que la veía rara.
-Rubia, ¿qué te pasa?- le dije.
-¿A mi?, nada, ¿por qué?- me dijo ella.
-Te veo poco sociable hoy- le dije mientras me sentaba al lado de ella.
-Pues no me pasa nada, no sé- me dijo y yo no me la creí pero la dejé pasar.
Me fui a la piscina con mis amigos, y salté al agua en bomba.
-AHHH!! PABLITOO!! me has empapado- dijo Ana chillando.
