...
-¿Dónde está...?-
Gregory retrocedió sobre sus pasos y excepcionaba el suelo, en busca de las llaves. No encontró nada y debería darse prisa. Pensó en volver al sótano pero no pensaba que estuviese allí, tampoco quería quedarse encerrado, tal vez no llegaría al hueco para volver.
De repente pensó y dio con la respuesta:
Al entrar allí, te quitan tus pertenencias y te las devuelven cuando tus padres lleguen por ti. Debería descubrir dónde las guardaban.
"En el sótano" pensó "¿Por qué no me habrá dicho ese niño rata que se las habían quitado?"
Volvió a la puerta de emergencia, donde siguió un pasillo que daban a unas escaleras hacia abajo. Al llegar al sótano, había una habitación que necesitaba llave, pero para su suerte la puerta estaba flechada y entró.
Al entrar, en la mesilla estaban los cigarros y el mechero de el chico, además de las llaves.
Dudó por un momento y agarró todo.
Gregory cerró la puerta despacio y subió las escaleras que daban devuelta a los pasillos. Miró al reloj de pared desesperado y vio que solamente faltaba un minuto.
Fue hacia el pasillo que conducía hacía donde había estado con el chico hace un momento y dudó:
El chico no estaba.
No tuvo tiempo de preguntarse dónde podría haber ido, el timbre sonó y se pegó a la pared. Su respiración se aceleró y reprimió un "mierda". Si lo descubrían, el Doctor PC tendría posibilidad de saber que no había ido a clase, además de haber estado ayudando a aquel chico.
Pensó rápido y asomó la cabeza, cuando distinguió a aquel chico también pegado a la pared. Cuando sus miradas se cruzaron, Gregory le hizo una seña al chico para que viniese.
Cojeando rápido y intentando no soltar ningún sonido de dolor fue con Gregory, quién abrió una puerta de detrás suya y empujó rápidamente al chico, cerrando la puerta.
-¿Era necesario empujar?- Se quejó el chico.
-¿Dónde mierda estabas?- Respondió con otra pregunta literalmente distinta.
-Casi nos descubren por tu culpa.- Añadió
-Pero no lo han hecho.- Dijo fácilmente
Miró al chico con una mueca desagradable, pero quería seguir argumentando. Sabía que él tenía la razón.
-Por poco.-
El chico solo le ignoró, no había tiempo para discutir. Se giró y dedujo que se encontraban en una aula de música. Miró hacia el reloj de la pared y notó que faltaban tres minutos para que todos vayan a su próxima clase. Le echó una mirada a Gregory y se sentó en una silla, apoyando el pie en una mesa.
-¿Fue culpa mía eso?-
El chico tardó unos segundos en responder, no sabía a qué se refería, pero lo supuso.
-Me lo hice cuando salté por la ventana.-
-Déjame ver.-
El chico intentó ignorarlo. Le dedicó una mirada extrañada y no sabía que responder, pero no dejaría descubierto una debilidad.
-Estoy bien.- Su fuerte acento hizo notar que estaba molesto.
A Gregory le daba igual la respuesta del chico, pensó que solo era un mal agradecido. Miró el reloj de la pared y luego abrió un poco la puerta, asomándose para ver si había alguien.
Le hizo una seña al chico, que dejó la silla para incorporarse con Gregory. Ambos salieron y se dirigieron a la puerta de registros, donde Gregory sacó las llaves.
Abrió la puerta con cuidado para no hacer ruido y ambos entraron. Cerró la puerta detrás de él y encendió la luz.
Era una oficina algo pequeña pero en uno de los archivadores ponían los registros de alumnos por alfabeto.
El chico se arrodilló y empezó a buscar entre archivos por la letra en la que empezaba su nombre.
Solo tardó unos minutos en encontrar su registro. Gregory que estaba en la puerta vigilando se acercó al chico, intentando ver el papel.
-¿Ya lo has encontrado?-
Gregory le arrebató el papel y empezó a ojear rápidamente hasta que el chico se lo quitara bruscamente para luego dirigirse al chico sonriendo.
-¿Así que te llamas Christophe?- Dijo con una cara de triunfo, sabía que quería enfadar al chico.
El chico puso el papel detrás de él, como defendiéndolo.
-Ze mole para ti, niño rubio.- Dijo para luego mirarlo desafiante y quitarle la mirada.
El chico se levantó y leyó su registro para luego meterse la mano al bolsillo y no sacar nada.
-¿Buscas esto?-
Gregory sacó de su bolsillo el mechero de el chico quién lo miró por unos segundos hasta que Gregory le extendió el mechero. Cuando el chico fue hacia él para agarrar el mechero apartó el mechero.
-Las palabras mágicas- Dijo sonriendo
-Vete a la mierda.-
El chico se alejó de él demasiado molesto para después agarrar los papeles y reordenarlos.
-¿Enserio te enfadaste?-
-Qué gruñón.- Rodó los ojos.
Se acercó al chico para entregarle el mechero. Aún algo molesto lo agarró, dispuesto a quemar los archivos, cuando un chirrido de la puerta hizo que los dos se alerten y se diesen la vuelta.
-¿Gregory?-
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Este recordatorio es para los lectores fantasmas que probablemente le guste la historia. Me ayudarían con una estrellita o una interacción como comentario :p
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Vous sentez-vous aimé ? - Gregstophe
FanfictionGregory, el intelectual y eficiente niño después de ser rechazado por Wendy Testaburguer se queda en la escuela de South Park Colorado, por petición misma.