010. Venganza

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Ya era de día y Malena comenzó a removerse en su cama despertándose, fue a darse vuelta pero un brazo agarrándola con fuerza por la cintura se lo impidió

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Ya era de día y Malena comenzó a removerse en su cama despertándose, fue a darse vuelta pero un brazo agarrándola con fuerza por la cintura se lo impidió. En ese momento abrió los ojos de golpe y se encontró con Matías a su lado. El chico se encontraba con los ojos cerrados y un expresión de calma en el rostro.

Malena quedó mirándolo fijamente, mientras pensaba en cómo habían llegado hasta su habitación y todas las cosas que vivieron el día anterior, desde el beso hasta la historia que la chica compartió con él. Y se quedó allí, recordando ese increíble beso, que para aumentar la emoción de su niña interior, fue en el mismo lugar que sus padres tuvieron el suyo, que coincidencia, ¿no?

Al estar tan inmersa en sus pensamientos, como muy común en ella, no se dio cuenta en el momento que Matías despertó y la estaba mirando fijamente.

— Mar, reacciona — Matías habló con suavidad y acarició su mejilla, logrando captar la atención de la chica, que le sonrió ampliamente. — Buenos días, Mar

— Buen día, Matu — Hicieron contacto visual y Malena recordó aquel pensamiento que tuvo sentada en las escaleras de su cabaña, sobre cómo se sentiría despertar a su lado, y se respondió a si misma "paz" — ¿Vos me trajiste hasta acá?

— Si, cuando tus padres llegaron estábamos dormidos en el sillón, tu mamá me guió hasta acá — Malena frunció el ceño — Subiendo las escaleras casi me caigo y vos ni cuenta te diste

— Tengo el sueño pesado — Matías le dio una mirada de obviedad y ella rio — Bueno, ya te diste cuenta

Matías sin pensarlo dos veces pasó sus brazos por la cintura de la chica y la jaló hacia él, haciendo que quedara sobre él. Malena, que no esperaba ese movimiento, soltó un pequeño grito y seguido soltó una carcajada.

— Sos hermosa — Le dijo Matías luego de unos segundos de silencio, haciendo que Malena se pusiese roja, lo que le sacó una sonrisa.

— Vos también sos hermoso — Los roles cambiaron, ahora Malena era quien sonreía y Matías el que estaba rojo — ¿Que vamos a hacer hoy?

— Yo podría pasar todo el día así con vos

— Matu — Malena sonrió — Yo igual lo haría, pero tenemos que disfrutar el tiempo acá. Podríamos salir con mis padres a la playa, o decirle a los chicos para salir

— Me gusta esa idea, ayer estaban hablando en el grupo para salir — Antes de que Malena hablara, escucharon unos toques en la puerta, lo que los hizo separarse rápidamente.

— Mimi, ¿puedo pasar? — Escucharon la voz de Marlene al otro lado de la puerta

— Si, ma, pasa — Ambos chicos vieron a la mujer abrir la puerta lentamente, estaba vestida como si fuese a salir, e incluso llevaba un bolso en la mano

— El desayuno está en la mesa, tu padre se fue al hospital y yo voy a ir a el restaurante, nos vemos más tarde — Habló la mujer rápidamente y les lanzó besos a ambos antes de desaparecer detrás de la puerta.

Destiny | Matias RecaltDonde viven las historias. Descúbrelo ahora