Una llegada inesperada ❁ HyunIn

♡ : CAPÍTULO XVII

Cuando escuchó esas simples palabras salir de los labios carnosos del azabache sintió una presión en su pecho y un cosquilleo en el estómago. No sabía que decirle y es que aún no asimilaba que Hyunjin se sintiera atraído por él, porque antes de todo lo que pasó, Hyunjin era la persona quien lo molestaba, era la persona con la que a veces se agarraba a golpes y ahora simplemente él suelta que se había sentido atraído por él.

No pudo responderle algo, porqué el sonido de su teléfono con una llamada entrante de Seungmin no lo dejó. Sintió alivio porque no sabría que responderle en ese instante.

Se encontraba en la cama con el control remoto en su mano izquierda cambiando de canales sin intención de mirar algo. Quería preguntarle a Hyunjin si todavía se sentía atraído por él o sólo fue en esos meses.

Su teléfono vibró en la cama. Lo tomó encontrándose con un mensaje de Hyunjin.

Hyunjinnie: Voy a pasar por ti en unos minutos para ir con los chicos a una cafetería para despedirnos de Chan cómo se debe.

════ ∘◦❁◦∘ ════

—Pensé que no vendrías—dijo Seungmin acercándose a Jeongin—, ya sabes, pensé que te encontrabas cansado.

—No lo estaba—habló mirando por todo el local encontrándose a Félix y Chan—. Quería despedirme de Chan.

Miró a los dos chicos, quienes se encontraban abrazados. Chan lo abrazaba tan fuerte como si no quisiera soltarlo nunca.

—Están tristes—comentó Hyunjin cuando estuvo a un lado del castaño. No sabía si él azabache se encontraba triste, ya que Chan y Hyunjin han sido mejores amigos, desde que él sabe, desde la secundaria.

—Se nota—dijo el castaño con un puchero.

—No vayas a llorar—exigió Hyunjin. No soportaba ver a Jeongin llorar.

—¡Pero quiero!—dijo con la voz rota mirando a Hyunjin. Este rodó los ojos abriendo sus brazos para que Jeongin lo abrazara.

—Esto es raro—dijo Seungmin mirando como se abrazaban. El castaño estaba de puntitas con sus brazos envueltos en el cuello de Hyunjin.

—¿Estas mejor?—preguntó luego de unos minutos, alejándose un poco para poder mirar a Jeongin. Pasó su mano por las mejillas del castaño ocasionando que adquirieron color a los pocos segundos.

—Sí. —Asintió alejándose del azabache, luego miró a Seungmin quien movía sus cejas. Bajo la mirada sonrojado—. Creo que hay que ir con los chicos.

Se acercaron a la pareja quienes seguian abrazados, Jeongin hizo un gran esfuerzo para no ir y unirse al momento íntimo de ambos chicos. No tuvo que hacerlo, porque luego de segundos se alejaron.

Hyunjin hizo que Jeongin tomara asiento, para luego sentarse a lado de él. Seungmin se sento enfrente de ellos apoyando sus codos en la mesa recorriendo la mirada por todo el menú.

—Vamos a ordenar—comentó Chan tomando su cartera de la mesa—. ¿Qué van a ordenar ustedes?

—Yo quiero una hamburguesa y una soda—respondió Seungmin dejando el menú en el mismo lugar donde lo encontró.

—Jeongin y yo queremos la ensalada con jugo de naranja natural—se limitó a decir Hyunjin. El castaño abrió la boca ofendido.

—¡Pero yo quería una rebanada de pizza!—dijo molestó Jeongin—. No puedes decidir por mí.

Chan y Félix se dieron una mirada para luego caminar para ir a ordenar. Seungmin miró de reojo a Jeongin y siguió mirando su teléfono.

—Claro que puedo—habló Hyunjin—. Jeongin, estamos esperando un bebé tienes que cuidarte.

—Bien—aceptó cruzándose de brazos. Es que no podía dejar de comer cosas con grasa de un día para otro.

—Jeongin no te molestes—tomó la mano del castaño. Jeongin miró sus manos que estaban entrelazadas.

—Tienes razón.

—¿Jeongin?—El castaño alzó la vista encontrándose con una vieja amiga. Era su mejor amiga de la secundaria.

—¿Miranda? ¡Miranda!—Se levantó acercándose para poder abrazarla—. ¿Cómo has estado?

—Demasiado bien. —Lo abrazó de vuelta por unos minutos y luego se alejó.

—Pero mírate estas hermosa. —La tomó de la mano e hizo que diera una vuelta.

—Mírate tú—Bajó su mirada encontrándose con el vientre abultado del castaño—, pero estas embarazado.

—¡Lo estoy! —dijo orgulloso. Hyunjin sonrió enternecido.

—Ven quiero presentarte a mis amigos. —Hizo que la castaña se acercará. Miró a Hyunjin—. Miranda te presento a Hyunjin, Hyunjin te presento a Miranda.

—Mucho gusto—habló amablemente.

—Y este de aquí—Apuntó a Seungmin, este sólo rodó los ojos—, es mi mejor amigo Seungmin.

El rubio solo alzó su cabeza en señal de saludo para volver su vista a su teléfono. Miranda apoyó la palma de su mano en el vientre del castaño mirándolo con cariño.

—¿Quién fue el hijo de puta qué te embarazo?—preguntó ella. Jeongin aguantó una carcajada, pero no pudo aguantarlo y se echó a reír.

—Este chico de aquí. —Apoyó su mano en el hombro de Hyunjin. Jeongin se sonrojo sintiendo la mano del azabache deslizarse por su cintura y encontrar su lugar ahí.