I Need You|| KOOKJIN

Entre Sombras y Ausencias

El regreso a la escuela para Jungkook marcó un nuevo capítulo en su vida, pero no de la manera que todos esperaban. La sombra de la tragedia que había dejado la pérdida de sus padres se cernía sobre él, y el apodo de "chico malo" parecía envolverlo como un manto oscuro.

Con la partida de Jin para cumplir su servicio en una universidad en Suiza, Jungkook quedó sumido en una soledad abrumadora. La única conexión significativa que tenía en su vida se había alejado, y la ausencia de Jin dejó un vacío profundo en su corazón. El dolor y la rabia se convirtieron en sus compañeros más cercanos, y la máscara de indiferencia que adoptó le ganó la reputación de ser un psicópata sin emociones.

Su apariencia, antes llena de vitalidad, ahora reflejaba un aura sombría. El cabello caía desordenado sobre su rostro, las ojeras subrayaban unos ojos que parecían haber perdido su brillo, y sus expresiones se habían vuelto inexpresivas. Se ganó la fama de alguien con quien no debías meterse, y su actitud desafiante alejó a la mayoría de sus compañeros.

La escuela se convirtió en un campo de batalla para Jungkook, quien parecía desafiar constantemente las normas y desinteresarse por las consecuencias. Las miradas preocupadas de los profesores y el murmullo de los estudiantes seguían sus pasos como sombras inquietantes.

En el fondo, Jungkook no era un psicópata sin sentimientos; su corazón estaba envuelto en una coraza construida a partir de pérdidas y ausencias. La partida de Jin había dejado cicatrices en su alma, y la única forma que encontró para lidiar con el dolor fue adoptar una actitud indiferente y desafiante. La tristeza se había convertido en rabia, y la rabia, en una armadura protectora.

Mientras tanto, en Suiza, Jin se esforzaba por adaptarse a su nueva vida universitaria. La distancia física entre él y Jungkook no hacía más que resaltar la brecha emocional que se había formado entre ambos. Jin llevaba consigo la preocupación y el pesar por el cambio en la personalidad de Jungkook, pero la distancia dificultaba cualquier intento de ayudarlo.

Jin no dejaba de recordar los momentos compartidos, la risa y la complicidad que solían caracterizar su relación. Sentía la ausencia de Jungkook como un agujero en su pecho, pero su compromiso con sus estudios y la nueva vida en Suiza lo mantenían ocupado. A pesar de la distancia, intentaba mantener el contacto a través de mensajes y videollamadas, pero la brecha emocional entre ellos parecía insuperable.

De vuelta en Corea, la fama de Jungkook como el "chico malo" crecía día a día. Los rumores sobre su actitud indiferente y sus acciones desafiantes corrían como un reguero de pólvora. La directora de la escuela, preocupada por el bienestar del joven, decidió abordar la situación.

—Jungkook, sé que has pasado por momentos difíciles, pero no puedes seguir así. Tu comportamiento afecta a toda la comunidad escolar.

Jungkook, con la mirada fija en el suelo, apenas reaccionó. La directora, conocedora de la tragedia que marcó su vida, intentó comprenderlo.

—Entiendo que has perdido mucho, pero es importante que encuentres una forma de lidiar con tu dolor sin afectar a los demás.

El joven asintió, pero sus ojos seguían mostrando un vacío que nadie lograba llenar. La directora, decidida a ayudarlo, sugirió la posibilidad de hablar con un consejero escolar.

Mientras tanto, en Suiza, Jin sentía la desconexión con Jungkook cada vez más profunda. Intentó transmitirle su apoyo y comprensión a través de mensajes, pero las respuestas eran escuetas y distantes. La diferencia de husos horarios y las obligaciones académicas complicaban aún más su intento de mantener una conexión significativa.

Con el tiempo, Jungkook se vio envuelto en una espiral descendente. La armadura que lo protegía de las emociones comenzó a oxidarse, revelando la vulnerabilidad que se ocultaba debajo. Aunque su actitud seguía siendo desafiante en la superficie, la soledad y el dolor que cargaba en su interior comenzaron a hacer mella en su espíritu.