Conviviendo con una atractiva CEO después del divorcio

Capítulo 68

Los colegas de Sofía estaban realmente asombrados. ¿ Cómo podía hablar de esta manera el compañero de Sofía? ¿Acaso este tipo de asuntos se podían decir tan casualmente? Incluso si quería cortejar a Sofía, ¿no debería usar métodos más sofisticados?

Por otro lado, Alex se rió a grandes carcajadas, incluso lágrimas de risa brotaron de sus ojos. Mientras se reía, señaló a Simón y dijo: —¡Madre mía, eres todo un fanfarrón! No tengo ni idea de dónde sacaste el coraje para decir esto.

Frente al menosprecio y burla de Alex, Simón solo sonrió ligeramente y dijo: —¿Y si realmente lo logro?

—Si puedes hacerlo, me arrodillaré y lameré tus pies —Alex dijo con despreció.

Simón rió entre dientes y miró a Sofía y a sus colegas, diciendo: —Todos ustedes en realidad lo oyeron, él lo dijo.

Los colegas se miraron entre sí, sin entender qué locura estaba diciendo Simón.

Sofía rápidamente tiró de Simón y dijo: —Basta, por favor no le hables más. Voy a empacar mis cosas, y nos vamos ahora mismo.

Pero Simón respondió: —No te preocupes, voy a hacer una llamada para que Ángela venga a resolver esto de inmediato.

—¿Eh? —Sofía se sorprendió. Aún no sabía que Ángela había asumido el control de InnovaTech Solutions. Sin embargo, sabía que Ángela era la hermana de Valeria, y también la vicepresidenta de InnovaTech Solutions.

Al escuchar el nombre de Ángela, Alex no se inmutó en absoluto. Se burló cínicamente y dijo: —¿Conoces el nombre del gerente general? ¿Crees que me asustarás? Mucha gente conoce el nombre de Ángela. ¿Crees que le tendré miedo?

En la opinión de Alex, Simón estaba simplemente presumiendo. Era joven, vestía ropa de aspecto bastante común, ¿cómo podría relacionarse con personas tan adineradas como la familia Quiroz? En el mejor de los casos, solo sabía el nombre de Ángela, ¿cómo esto podría asustarlo?

En ese momento, Simón ya se encontraba marcando el teléfono directamente para llamar a Ángela.

Después de que ella contestara, Ángela dijo: —¿Llegaste, cuñado? Bajaré a recibirte. O

—No me llames cuñado. Ya no lo soy —Simón suspiró. Desde el otro lado, se escuchó un suspiro muy ligero de Ángela, y preguntó—. ¿Dónde estás?

—Estoy en la Tienda de Mónica en el segundo piso de su centro comercial.

—¿Qué estás haciendo allí?

—Ha ocurrido algo inusual y necesito que vengas a resolverlo.

—¿Qué sucedió?

—Será mejor que lo veas por ti misma. Ven pronto, te espero.

—Está bien, espera por mí.

Después de colgar, Simón miró a Alex.

Alex, sin embargo, no le prestó mucha atención. Se burló y dijo: —Eres un buen actor.

Simón sonrió y dijo: —Si estoy fingiendo o no, lo sabrás muy pronto.

Sofía, al lado, miró a Simón con una expresión llena de interrogantes. ¿Realmente conocía a la gerente general? Simón le respondió con gran calma—. Te lo dije, solo espera y mira el espectáculo.

Alex, sentado de manera bastante relajada, lanzó una amenaza—. Chiquito, si la gerente general no viene, no me culpes si me vuelvo desagradable contigo.

—Oh, ¿cómo planeas volverte desagradable? —preguntó Simón.

Alex respiró con total desprecio—. ¿Crees en serio que te puedo hacer algo? Haré que te saquen de aquí.

—Lo creo, pero no tendrás esa oportunidad de que suceda —respondió Simón fríamente.

La atmósfera se volvió tensa de repente, con los empleados escondiéndose en un rincón, sin atreverse a hablar nada.