La risa del líder Wen se escuchó en la sala del trono, Nie MingJue protegía a su viejo amigo, Nie HuaiSang observaba, sabía las respuestas, pero no diría nada, Jin ZiXuan estaba a un lado del líder Wen, estaba dispuesto a todo con tal de proteger al menor de los Jiang. Los dos Jade estaban uno al lado del otro.
—¿su hijo?— Preguntó con burla. —¿no fue usted quien llevó una insignificante mujer a la secta para que le diera un hijo?—
—Usted tiene un harem, eso lo hace incluso peor que yo.— Refutó Lan WangJi, quien notó como el mayor se enojaba.
Se rió sutilmente. —No, en realidad, ayer el harem fue disuelto y hoy mi único compañero es mi esposo. Cuando se hace el juramento a la Luna, nadie más puede llevar el mando, incluso la madre de mis hijos mayores lo acepto y ellos están de lado de mi esposo.— Afirmó sabiendo que sus hijos habían encontrado el consuelo y la sabiduría en el joven Loto, por ello habían insistido mucho en ese plan.
—Usted se llevó a mi esposo e hijos.— declaró nuevamente el Lan.
Se enojó mucho y decidió sacar su espada. —Tú me lastimaste, me encerraste por tres meses porque según tú no valía la pena pelear por mi ante tu estúpida secta, dejaste que me golpearan porque comenté sobre las habilidades políticas, ¿no te acuerdas que por tu maldita culpa perdí a mi primer hijo cuando el élder me atravesó con su espada?— Al recordar eso, se rompió en llanto. Lan XiChen no sabía nada de eso.
Wen RouHan se quedó en shock, no sabía esos detalles y tampoco sus hijos.
—Sabías que podía concebir, te lo dije cuando te comprometiste conmigo, ese bebé ya iba a nacer. Dejaste que lo matarán y yo por idiota te disculpé.— El llanto, la voz entre cortada llenaba la sala del trono, su espada estaba firme, pero su corazón tambaleaba. —Ahora finges ignorancia.—
Lan WangJi se quedó mudo, había decidió olvidar todo eso, había decidido irse a misiones una tras otra con tal de no ver el dolor y el enojo de su esposo. Lo había decidido. Después no pudo más y fingió que no recordaba, el élder bloqueó la mente de su esposo para que volvieran a ser felices, ¿cómo había recordado?
Su risa cruel golpeó los oídos de los presentes. —¿creíste que había olvidado? Realmente eres inocente.— Aunque puedo decir que el maestro Lan y Zewu-Jun intentaron frenar al consejo.
Wen RouHan sintió la furia subir, su ahora esposo había sufrido mucho, y lo peor, lo había hecho sólo, así que decidió frenar a los Lan de golpe.
—Incluso si fuera verdad lo que dices, Lan WangJi, tú lo perdiste, reclamaste a la hija de mi primo como tuya y decidiste ser infiel. Un hijo no merece ese tipo de ejemplos, incluso mis hijos mayores crecieron rodeados de amor, así que deja a mi esposo, a menos que desees que tu secta sufra las consecuencias.— Sostuvo a su esposo de la cintura, tan firme y elegante, sus hijos mayores se acercaron a él y protegieron a su esposo.
Por otro lado, la familia Jiang estaba en la habitación qué se les había asignado, no habían dormido y prefirieron esperar, tenían que hablar con A-Ying, quizá llegar a un acuerdo con el líder Wen.
El banquete dio comienzo y las sectas estaban reunidas, ninguna se había ido, la Dama Wen estaba a lado de su esposo.
Después de la boda y el banquete, las sectas fueron despedidas por los herederos, ya que el Emperador y su Emperatriz habían salido, los jóvenes se hicieron cargo de la secta hasta que cayó la noche.
—¿Cómo te sientes?— preguntó Wen RouHan a su esposo, ahora mismo estaban tranquilos, el menor había llorado mucho, recordando cosas y preguntándose cosas, por eso se lo había lavado del banquete en el momento en que lo creyó adecuado. —A-Xian.—
Sonrío en los brazos de su esposo, quizá no habían tenido el mejor comienzo, pero haciendo memoria, él y los Wen habían estado ahí para él. —Mejor.—
—¿Mejoraron las náuseas?— Preguntó nuevamente el líder Wen a su esposo.
Asintió. —Mucho mejor.—
—Cuando todo quede arreglado, quiero que seas feliz.— Pensó mientras abrazaba al menor. —Debes cuidarte, les hará daño que continúen gritando a su alrededor.—
Sonrió. —Me cuido, pero no voy a permitir que me menosprecien.—
—Por eso mismo nuestros hijos serán respetados y temidos.— Wen RouHan abrazo con más fuerza a su esposo, feliz de poder estar con él menor.
Ambos se perdieron hasta el día siguiente, decidieron dormir y disfrutar de su tiempo como esposos.
Mientras tanto la secta GusuLan estaba llena de conflicto, pues el consejo estaba preocupado por la posibilidad de que el hijo que espera La dama Lan sea un doncel.
—¿Cómo es que nadie se dio cuenta?— preguntó el nuevo líder del consejo, ya que el anterior había fallecido semanas atrás.
—Jiang Ying era el tercer mejor cultivador, no podrías siquiera pensar en esa posibilidad. Además, su semilla podría ser débil.— Afirmó uno de los ancianos. —WangJi ha encontrado una mujer digna de ser Madame Lan, quizá le falte poder, pero tiene la experiencia necesaria para poder poner orden en la secta.
Lan QiRen dio un paso al frente, quizá el mocoso no era de su agrado, pero un hijo con la sangre de su sobrino, era digno de portar el lugar correspondiente. —WangJi es el padre, mi única oposición a ese matrimonio era el hecho de que el menor no podía dar herederos, al saber que hay un bebé o dos en espera, podemos llegar a un acuerdo con la secta Wen, después de todo, hay que evitar el revés político.— Explicó a modo de cierre de tema. —En cuanto a Wen Qing, es mejor tener a alguien con poder político, el joven Jiang Ying tenía esa cualidad y podía tomar su lugar en batalla de ser necesario, además de una inteligencia prodigiosa y un claro respeto entre los discípulos. Tenía todo, sólo hacía falta un heredero de sangre, con todo eso cubierto, podemos hacer algo para regresar al menor a lado de su esposo.—
Los ancianos asintieron, todos de acuerdo con la idea que Lan QiRen tenía, siendo tan hábil como siempre. No había ninguna objeción y era claro que un joven capaz de dar una batalla, poder político y aparte hijos, era mucho más valioso que una mujer sin cualidades ni conocimiento político.
Se levantó el líder actual del consejo. —Entonces prepararemos un dote adecuado para la secta Qishan-Wen y para la secta YunmengJiang.— Todos asintieron, pero antes de irse dio la vuelta, él había sido cercano a quien era antes la Dama Lan y le había tomado un profundo respeto. —Convencer al amo Jiang Ying será dificil, asi que piensen un castigo adecuado, es deshonroso jactarse de ser una secta recta si nuestro líder engañó a quien era su esposo, independientemente de los herederos, se habían hincado ante los Dioses, sus antepasados y entre ellos.—
Todos observaron al líder del consejo, ahora entendían algunos el porqué había solicitado con tanta vehemencia el puesto como líder del consejo, pero ya no podían intentar quitar al líder.
Wen RouHan y sus hijos mayores estaban reunidos con el consejo de ancianos.
Wen Führen, está en un excelente estado de salud. —Comentó el élder del consejo.-
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Heridas de Silencio.
Fiksi PenggemarTe lastimé, pero intentaré remediarlo. -Dijo Lan WangJi.- Lograste lo que querías, yo. -Sonrió amargamente.- No quiero verte otra vez, porque lo que sentía por ti, tu sólo lo rompiste y lo convertiste en Odio. Ambos se vieron, pero nada será igual. ...