2 ; felipe otaño

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inspirado en: lover, taylor swift

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inspirado en: lover, taylor swift.

—¡Gordita, ¿ya estás?!

—¡Ya voy! 

Me terminé de atar las zapatillas: era un desastre para hacer las cosas rápido, pero todavía más para atar cordones sin trabarme en el medio. Finalizando con cierta torpeza, salí corriendo para la cocina, saltando en la espalda de Felipe con una sonrisa.

Él me atrapó de inmediato. Había escuchado mis pasos y probablemente se había preparado para el ataque "sorpresa". 

—No podes ser tan hiperactiva.

—Pero lo soy —besé su cachete. 

Felipe me dejo sobre la mesada, girando para poder darme un beso en los labios. Sus manos se posicionaron sobre mi cintura, acercándome a él mientras que yo ponía brazos alrededor de su cuello, dejando caer mis muñecas sobre su nuca. 

—Que linda que estás —murmuró después de darme un par de besos más, dejando que sus manos pasearan de mi cintura a mi cadera y viceversa. 

—Gracias —sonreí con los cachetes rojos—. Vos también estás muy lindo.

A pesar de nuestros veintitrés, casi veinticuatro, años, con Pipe todavía nos sentíamos un par de adolescentes que recién empezaban a salir. Estábamos desde los 19 juntos: nos habíamos conocido en una fiesta de una de mis primas, él me había vomitado los borcegos y le había pedido mi Instagram a mi prima para poder disculparse. 

No me pregunten cómo fue que terminamos saliendo porque no sabría explicarme. 

—El otro día la vecina de enfrente se vino a quejar —le comenté.

—¿Cuál? ¿La vieja o la mina de los conejos raros esos?

—Cobayos —corregí—. Pero no, fue la señora. Dice que las luces de navidad la molestan a la noche porque van por abajo de la puerta y le llegan a ella. 

—Re mentirosa —se quejó él—. Si ni le llegan a la puerta.

Me encogí de hombros, jugando con el rulito que se le hacía en la nuca. 

—Yo no voy a sacar las luces —dijo—. Es nuestra casa, ¿qué se viene a meter ella? 

Solté una risita contenta: cada vez que mencionaba el apartamento como nuestro, algo en mí se removía con fuerza y me atraía a llenarle la cara de besos, mancharlo con mi labial por todas partes. Él no se quejaba: le encantaba presumir que tenía novia.

Teníamos de esas relaciones privadas pero no secretas. Pipe estaba en un punto muy alto en su trabajo como actor, y ahora tenía chicas cayéndole por doquier. Sus redes eran todas públicas, pero eso no evitaba tener destacadas y publicaciones conmigo. 

ONE SHOTS, lsdln castDonde viven las historias. Descúbrelo ahora