your eyes tell - 국민 KOOKMIN

capítulo 17

Había oscurecido un poco más en la ciudad de Columbus, Jimin estaba mirándose en el espejo del baño, modelando el conjunto que traía puesto, sonrió saliendo del baño y cerró la puerta viendo como Jungkook permanecía sentado en el sillón de la habitación con el torso desnudo, esperándolo.

Se acercó a él tocando su hombro para hacerle saber que estaba ahí y Jeon reaccionó buscando su mano para tomarla, cuando logró ubicar su cadera se acercó más al vientre de Jimin enfocando con su débil vista el conjunto de encaje forrado en el cuerpo del rubio de pies a cabeza.

Lo hizo sentarse en su regazo delineando con sus dedos cada detalle del encaje, tocándole los hombros y los muslos, se acercó a su cuello para besar sus clavículas y apretó su pomposo trasero por encima del encaje haciendo que Jimin suelte un jadeo aferrándose a sus hombros.

—Como era de esperarse, es mejor verlo en vivo— susurró Jeon sonriente y besó su mejilla—. Eres tan bonito Jiminie.

El mencionado sonrió y atrapó sus mejillas para comenzar a besarlo, el beso al inicio fue lento pero poco después comenzó a ser más rudo y sus respiraciones estaban agitándose, Jimin se separó para ahora besar los pectorales del profesor, lamiendo sus pezones haciendo remolinos con su lengua que hacían a Jeon suspirar hacia el techo.

Comenzó un camino de saliva desde su pecho hasta su mandíbula y mordió esta para besar sus labios de nuevo. Gracias a que Jimin había comenzado un vaivén en el regazo del contrario, ambos miembros comenzaron a hacer fricción, poniéndose duros en cuestión de segundos.

Jimin llevó sus manos desesperadamente a la bragueta del profesor para bajar el cierre y comenzar a acariciar su erección por encima de la ropa interior.

Jungkook mordió su labio para después atacar su cuello y Jimin metió su mano por debajo de la ropa interior para ahora comenzar a masturbarlo, el pelinegro gimió sobre la piel de Jimin al mismo tiempo que recorría su espalda con sus grandes manos apretando la zona de sus omóplatos.

Jeon llevó sus manos al trasero de Jimin para tomar la tela del encaje y romperla con sus dedos haciendo que el rubio suelte un gritito de asombro al oír la tela rasgarse.

—Esto era nuevo.— reclamó entre risas mirando los ojos perdidos de Jungkook, estos brillaban intensamente

—Te dije que no te lo quitaría y esto me estorba— contestó el profesor con voz grave dándole una nalgada—. Déjame prepararte.

Jungkook alzó su mano sacando dos dedos y Jimin los tomó embadurnándolos de su saliva, a los pocos segundos esos mismos dedos comenzaron a tantear su entrada para enterrar uno primero, Jimin se escondió en el cuello de su novio mientras gemía y apretó el cabello pelinegro cuando enterró el segundo.

Los dedos de Jeon eran largos así que era muy fácil tocar zonas sensibles como su prostata enseguida. Comenzó a penetrarlo mientras Jungkook lo distraía besándolo comiéndose todos los gemidos de Jimin.

—Ah, Jungkook, es suficiente.— lo detuvo Jimin tomando su mano y bajó las prendas inferiores del pelinegro para alzar las caderas

Ubicó el miembro en su entrada y se sentó de golpe penetrándose, ambos gimieron ante el acto y Jimin se apoyó del torso de Jungkook para comenzar a moverse encima de él, pegando saltitos.

Jungkook tomó sus caderas ayudándolo a moverse más rápido y cuando sus ojos lo enfocaron sonrió ligeramente viendo el rostro de Jimin empapado en sudor con el placer mismo escrito en cada una de sus expresiones.

—Te extrañé, te extrañé tanto Jungkookie— jadeó Jimin uniendo sus frentes—. Me hacías tanta falta.

—Tu a mi— susurró Jungkook sobre sus labios besándolos—. Pero ya estoy aquí.