Ella subió directo a su habitación dejando atrás a James y la fiesta.
Se sentía mareada y tenia que procesar todo lo que casi pasaba allí abajo. ¡Y en plenos jardines! ¡madre mía! "bien dice la gente que lo importante no es el lugar sino la persona" pero ¡por favor! Ella no era una exhibicionista. Cualquier podría haberlos encontrado.
Estaba roja de la vergüenza y su cuerpo aún se sentía extraño. Como manos invencibles que aún permanecían a pesar de las horas que habían pasado.
Se metió en la ducha y se bañó. Salió de la habitación y busco un interior. El de ella se habia perdido en el trascurso de la noche olvidado en algun lugar del laberinto. Se puso esta vez un vestido sencillo y se peino ella misma. No pensaba volver a bajar. Pero tampoco pensaba esperar a James como una chica obediente. Su chica obediente de toda la vida.
Su celular sonó salvándola de sus propios pensamientos
"Dime" solo una persona la llamaba a esta hora, o a cualquier otra
"¿Porque no me dijiste que había una fiesta? No me has invitado, y no es un reproche"
"Andrea..." sonó aliviada "sabes que la fiesta no es mía"
"¿Crees que James se enfade mucho si entro ahora mismo?"
Esa oración la desconcertó "¿a qué te refieres?" pregunto al mismo tiempo que se levantaba de la cama e iba hacia la ventana tratando de localizar la entrada "¿estas afuera?"
"Si." Contesto "¿qué te parece si entro? Y ya después tu lidias con James como siempre"
"Yo..." en parte seria bueno poder contarle todo lo que le estaba pasando, aunque se le caía la cara de vergüenza.
"Voy para allá" entonces su amiga le colgó sin darle tiempo a añadir algo mas
Minutos mas tarde la cara familiar de su amiga apareció por su habitación
-¡Andrea!- sonrió hacia ella y camino para saludarla
-Debiste ver la cara de James. Como siempre malhumorado. Ni bien me miro su cara expresion seria pareció molesta. Supongo que sabe que me quedare. Siempre pone esa cara cuando sabe que me quedo, pero al final no dice nada.
Lyra supo que con esa visita la promesa de James de aparecer a medianoche en su habitación ya no se haría realidad.
-¿Te quedaras?- aun asi tuvo que preguntarlo
-Si- suspiro -no te he contado, pero... creo que ya estoy saliendo con alguien
-¿Ah si? -Lyra lo pensó -¿El productor?
Negó -el fotógrafo. Yo le llamo el chico de la cámara. El es... diferente.
-En un buen sentido- lanzo la indirecta
-En el mejor de los sentidos -concordó.
Entonces Lyra se cambió. Se puso una pijama, y luego estuvieron cotorreando con Andrea toda la noche. Este tipo de reuniones parecidas a las pijamadas la llevaban al pasado. Uno donde ella siempre estuvo ahí. En las noches donde James estaba lejos de viaje y ella se encerraba a llorar sola en su dolor por la muerte de su padre, y alli estaba ella, mágicamente Andrea aparecía. La abrazaba y se quedaba con ella en la cama toda la noche sin decir una palabra. Andrea no tenia palabras sabias o amables para curar la pérdida de un corazón, así que no hablaba, pero ahi estaba. Para demostrar que estas ahí, a veces lo único que necesitar hacer es permanecer en un abrazo.
Andrea no era su amiga. No. Ella era su hermana.
-La fiesta ya ha de haber acabado. Cuando llegue estaban ofreciendo los premios. -comento mientras apoyaba su menton en la mano -ahora ya han de estar limpiando y recogiendo todo...
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La intrusa en la casa del millonario
RomanceLyra sabía que tenía un apellido, siempre anhelo eso, saber quién era. Tener una identidad, pero no le dijeron que eso era algo que solo ella podía darse. Sus padres la dieron en adopción cuando era muy pequeña, ofrecida en bandeja de plata al mill...