07▪︎

25 3 1
                                    

CENA FAMILIAR(?

Madelaine Johnson

—Así que Will, ¿qué signo sos?— le pregunto Mon mirándolo fijamente.

—No empieces con tus preguntas de mamá estricta.— le dije.

Habíamos pedido hamburguesas, sumado a algunas cervezas que habían en casa. Todos estábamos sentados en la mesa, Will a mi lado claro, porque esta en peligro con las otras tres.

—Solo es mera curiosidad.— Will se rio.

—Soy de cáncer, con luna en leo y ascendente en tauro. ¿Es suficiente información?— yo lo miré con una sonrisa, las chicas asintieron satisfechas.

—Buen punto saberte tu carta astral.— dijo la rubia.

—Por ahora vas bien Willie.— agregó Su.

—Me alegra saber eso.— dijo riendo. Nos la pasamos comiendo, charlando y tomando un poco (Bridget terminó algo borracha y Mon tuvo que llevarla a dormir).

Después de eso le mostré un poco más la casa a Will, hasta que llego el momento de mostrarle mi habitación.

—Se nota que es tu habitación.— dijo mirando a su alrededor, aproveche que cuando fue al baño ordene rápido todo.— Hasta huele a tu perfume.

—¿Mi perfume?

—Si, ese dulce que usas.— dijo acercándose a mi y poniendo su cabeza en mi cuello.

—Me haces cosquillas.— él saco su cabeza para mirarme y me beso.

Sonriendo en medio del beso, pase mis manos por alrededor de su cuello. Él poso las suyas en mi cadera. Estuvimos un rato así, hasta que nos recostamos en mi cama. Habia sido un día muy largo y estaba agotada. Will dejaba leves caricias en mi rostro, y con su otra mano me abrazaba.

—Mhm, ¿qué hora es?— pregunté adormilada.

—Shh, eso no importa. Vos dormí yo voy a estar acá.

—¿Te vas a quedar?

—Hasta que me pidas que me vaya.— lo siguiente que hice fue abrazarlo más fuerte, no quería dejarlo irse aún.
Estoy muy cómoda y me siento bien. Estar con él es reconfortante. Después de unos minutos me dormí en sus brazos.

[07:12 am]

—Maddie...— abrí los ojos lentamente para encontrarme con él castaño. Me sobresalte y salí de la cama de un salto.

—¿Qué haces acá?

—Iba a irme pero me quedé dormido también.— cierto, nos dormimos, solo eso.

—Oh, bueno. ¿Qué hora es?

—Siete y cuarto creo.— casi se me salen los ojos de lo mucho que los abrí.

—¡¿Qué?! ¡Puta madre!— agarre rápido cualquier prenda que vi y me dirigí al baño.

Estaba bastante decente para ni ver lo que había agarrado. Tenía un jean ajustado, una remera negra con tirantes y un sueter grande de color verde.

—Voy a llegar tarde.— chille cuando entre a la habitación.

—Yo te llevo, tranquila.— dude un poco.— Maddie, el metro te va a dejar en media hora, con mi auto llegamos en diez minutos.

Pretty When I cryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora