𝐆𝐨𝐫𝐠𝐞𝐨𝐮𝐬; Isaac Arellanes

08. 𝐂hristmas ¿𝒂nd 𝒌isses?

La navidad era uno de los días más esperados del año por parte de Audrey, después de su cumpleaños.
Intentaba llenar de espíritu navideño toda la casa con varios intentos fallidos.

Por algún motivo que desconocía Marlene estaba algo decaída, demasiado decaída. No había bajado a desayunar y podía jurar que había pasado casi toda la noche sin dormir.

Todo había comenzado cuando la chica recibió una llamada, ni siquiera le dijo a Myles con quien estaba hablando, y ella siempre le contaba hasta el más mínimo detalle de su vida.

—¿Ya vas a decirme qué pasa?

La castaña sonrió y negó, —No me pasa nada.—

Mentía, odiaba mentir pero sentía la necesidad de hacerlo. La razón de su mal humor era estupida y ella lo sabía. No debía ponerse así por un idiota que decidió buscarla luego de tanto tiempo. ¿Lo peor? Si no fuera porque sabía que su amiga la iba a matar si aceptaba, ella lo haría.

¿Como era posible que a pesar de todo el daño que le había hecho ella considerara la opción de perdonarlo y regresar con él?

Sabía que estaba mal, no debía hacerlo.

Además, no podía hacerle eso a Isaac, se notaba a kilómetros que estaba realmente interesado en ella. Sin importar que le hubiera rechazado por casi un año entero, él seguía insistiendo.

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Esa navidad era diferente, sus padres habían decidido invitar a la familia Arellanes a una cena navideña con un intercambio de regalos.

Habían organizado todo previamente y se dividieron las comidas que cada uno llevaría. Mar había querido hacer galletas de copos de nieve. No pudo contenerse a hacer algunos muñecos de nieve decorados como Olaf de la película Frozen.

Una vez estaba todo listo y los invitados no tardaban en llegar, Mar fue a prepararse. Había comprado un hermoso vestido para la ocasión, gracias a las insistencias de Audrey.

Tras casi media hora de maquillarse, donde la mayoría de las veces tenía que desmaquillarse ya que no le agradaba el resultado, estaba lista. Había optado por un brillo de labios, un delineado y un poco de rímel en las pestañas, no quería arriesgarse a arruinar su delineado por lo cual decidió no agregarse mucha máscara de pestañas.

Mientras bajaba las escaleras para ir al comedor debió frenar sus pasos, porque unas manos en su cintura la detuvieron. Volteo algo confundido y se encontró con Isaac. Nunca lo había visto de traje antes, y se veía demasiado bien.

—Hola, feliz navidad— exclamó el pelinegro depositando un pequeño beso en la mejilla de la contraria.

—¡Feliz navidad!— dijo con un tono demasiado alegre como para ser Mar. Sus intentos por no pensar en ese mensaje se basaban en actuar extremadamente alegre.

—Me parece un poco feo que hayas copiado mi color— dijo el chico dándole una rápida mirada al vestido de la chica. Un vestido blanco largo hasta un poco más arriba de las rodillas, con unos pequeños detalles en azul claro.

Todos se habían vestido de blanco con algún color. Y por casualidad Isaac había utilizado una corbata del mismo color que la chica. Aunque no había sido casualidad en realidad, más bien una pelirroja con ganas de ver a ambos combinados. haciéndolo parecer una coincidencia.