•†• Sally Face 18 •†•

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El sonido del ascensor resonaba en los oídos de Sally mientras descendía hacia el sótano del edificio. Cada piso que pasaba parecía sumergirla más en sus pensamientos, recordándole la conversación que acababa de tener con Todd por teléfono. Las palabras de su amigo resonaban en su mente, cada una cargada de significado y urgencia.

***

―Tienes que encontrar una forma de convencerlo. Ésta puede que sea la única oportunidad de hacer que Larry vuelva a la escuela. Si no conseguimos algún lienzo dibujado por Larry, perderemos la única oportunidad de que Larry vuelva a la escuela. Confío en ti, Sally Face. El futuro de Larry está en tus manos.

***

El ascensor se detuvo con un suave traqueteo, y Sally salió con determinación, enfocado en su misión. Mientras se acercaba a la puerta del departamento de Larry, su mirada se desvió hacia un reloj antiguo que colgaba de una de las paredes del pasillo. Larry aún no había regresado de la escuela. Consultó mentalmente el horario y calculó que tardaría al menos una hora más en llegar. Eso era perfecto. Tenía tiempo suficiente para llevar a cabo su plan sin ser interrumpido.

La idea de lo que estaba a punto de hacer lo llenaba de conflicto. Sabía que lo que planeaba no era del todo correcto y que Larry probablemente se enojaría cuando enterara. Sin embargo, también era consciente de la obstinación de Larry y de lo difícil que sería persuadirlo para que participara en el concurso de arte. No podía arriesgarse a una negativa, no después de todo lo que habían hecho para intentar que regresara a la escuela.

Si no es por las buenas, será por las malas, pensó Sally, decidido a seguir adelante.

Afortunadamente, Sally guardaba una copia de la llave del departamento de Larry. Este se la había dado en caso de emergencia, y siempre la llevaba consigo en su llavero. Con un gesto rápido, utilizó la llave para abrir la puerta.

Al entrar, notó que el apartamento estaba tranquilo y vacío. Recordó que Lisa estaba ayudando a la señora Gibson en su departamento, debido a que esta había tenido problemas después de recibir aquel golpe en la cabeza que Larry y él le habían dado hace unos días. La tarea de limpiar y cuidar del lugar había recaído en Lisa, quien, preocupada de no acumular más reclamos con el señor Addison, había acudido a ayudarla.

Con paso firme, Sally avanzó hacia el cuarto de Larry, donde aguardaban todas sus obras de arte. Examinó meticulosamente cada uno de los lienzos que adornaban las paredes de la habitación. Los colores vibrantes y las formas intrincadas saltaban a la vista, revelando el talento innegable del artista. Cada pincelada parecía llevar consigo una historia, una emoción capturada en lienzo. Admiraba en silencio la destreza con la que Larry manejaba el óleo, preguntándose por qué no compartía su talento con un público más amplio. Quizás esa noche, con el concurso de arte como plataforma, finalmente lograría convencerlo de ello.

A pesar de su aprecio por el arte, Sally nunca había sido experto en la materia. Larry y Ash, en cambio, tenían criterios más definidos y complejos que escapaban a su comprensión. Sus discusiones sobre técnicas, estilos y significados a menudo lo dejaban confundido, incapaz de discernir qué hacía que una obra fuera considerada "buena" o "mala".

Con las palabras de Ash resonando en su mente, Sally luchó por elegir el lienzo adecuado. Debía ser algo más que hermoso; debía ser impactante, algo que capturara la atención de todos y los dejara sin aliento. Sin embargo, cada obra de Larry parecía poseer su propia magia, su propio encanto único que dificultaba la elección.

Todo lo que hace Larry es perfecto, pensó Sally con una mezcla de admiración y frustración. Se sintió momentáneamente avergonzado por el pensamiento cursi, imaginando la reacción burlona de Larry si alguna vez lo expresara en voz alta. Sin embargo, esa era la verdad: para Sal, la obra de Larry siempre sería perfecta, lo que complicaba aún más la decisión.

•†• Memories & Dreams •†• || Sally Face Fanfic  #SallyFaceAwards2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora