|| Ultraviolence T.1 ▪︎ Leon S. Kennedy x Lectora || By: isstkiu .°•★!

《 Capítulo 25 》

Leon, quien ahora te abrazaba con fuerza mientras dejaba su cabeza en tu pecho, lloraba en silencio, mientras lo acompañabas con dulces caricias y varios besos en la nuca.

-¿De verdad no tienes hambre?- Preguntaste sin poder ver su rostro, ya que estaba sumido en sus pensamientos y tus pechos.

Negó con la cabeza, así que usaste la vieja confiable para que comiera.

-¿Vas a rechazar la comida que con tanto esfuerzo y amor te cocine hoy?- Leon, se quedó inmóvil un momento y luego se separó ligeramente de ti.

Asintió. -Tienes razón, lo siento...- Admitió sentándose mejor en la cama.

Tomaste la bandeja y te acomodaste más cerca de él, lo ayudaste a comer porque sabias lo que se sentía perder a alguien tan repentinamente, como también recordaste como pasaste esos momentos casi sola y sin ayuda de nadie, excepto por Ethan, a quien preferías olvidar. Por eso ahora, cambiarías el destino de Leon, estando ahí para el cuando el nunca llegó para ti. Y aún que te dolía admitir, era la cruel verdad.

Lo ayudaste a comer el sándwich y a beber del jugo, era como cuando cuidabas a tu pequeña hermana cuando enfermaba. Tan débil y frágil.

-Descansa por hoy, yo me encargaré de todo, así que no te preocupes y duerme un poco, ¿Bien?- Dejaste la bandeja a un lado y volviste a mirar a tu amado.

Asintió sin poder mirarte a los ojos.

Abriste tus brazos para que este nuevamente, te abrazara y sintiera tu protección y amor. Besaste sus mejillas y hombros y le susurraste algunas palabras.

-Sé lo que es perder a alguien tan especial, no estás solo en esto. No puedo saber exactamente lo que sientes porque todos reaccionamos diferente, aun así, quiero que sepas que estoy aquí para ti, que a pesar de todo, el fue un gran hombre y está orgulloso de ti y lo que has logrado. Al menos, tuvo una gran vida, y al igual que un inicio hay un fin, ahora el descansa sin sentir dolor, disfrutando la vista desde allá arriba. Desahógate aquí en mis brazos, permítete sentir dolor y déjame poder sanar tus heridas, permiteme ahora yo poder cuidarte.- Palabras que alguna vez escuchaste de alguien, recitabas como poema, abriendo incluso una herida que pensabas haber sido sanada.

Leon, quien no supo como expresar su agradecimiento, se permitió abrir más a su esposa, dejando salir las lágrimas sin control alguno.

Nunca supiste bien como era la relación de Leon, con su padre o su madre, pero no era algo que te importara realmente, habías estado más atenta a tus propias relaciones y cada paso que dabas, tenias mucho cuidado con lo que hacías, más ahora que no querías seguir pasando tragedia tras tragedia. Pero los destinos existen, y tal vez tu vida ya estaba escrita de ante mano, así que lo que hacías no iba a impedir lo que fuera a pasar en el futuro, o al menos impedía ciertas cosas, eso querías creer.

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Miraste como dormía Leon, se veía tan agotado pero mucho más tranquilo que antes. Te separarte un momento de él cuando escuchaste tu teléfono vibrar por un buen rato en la mesa de noche, alguien te estaba llamando.

Tomaste tu teléfono y viste que era la madre de Leon, cosa que ya no te sorprendía. Te levantaste de la cama y saliste de la habitación para atender la llamada.

-Deme un momento...- Dijiste al contestar, por lo que la otra línea se quedó en silencio y fuiste al jardín.

-Lamento la demora, ahora si. Buenas tardes, lamento lo de su esposo... Se que debe estar pasando un mal momento.- Comentaste con un suspiro apenada.

-¿Qué te dijo antes de morir? Sé que lo fuiste a ver.-  Aquellas palabras te recorrieron con un escalofrío por todo el cuerpo.

Silencio absoluto de tu parte, estabas en blanco y no supiste qué responder.

-¿No me vas a decir? Sabes que esto se puede mal interpretar mucho, ¿Lo sabes?- Hiciste una mueca de preocupación y te giraste para ver si Leon, no te estaba viendo o escuchando.

-Usted está confundiendo todo, yo no haría cosas como esas.- Respondiste bajando la mirada.

-La verdad es que no me sorprendería de una drogadicta.- Rió molesta.

-¿Disculpe? Si me iba a llamar para faltarme al respeto, entonces colgaré.- Antes de que colgaras, la mujer habló.

-Lo fuiste a ver en la noche, muy tarde, innecesario, están los registros. Llamaste a las enfermeras y cuando llegaron ya estaba muerto, pudo haber sido un ataque al corazón, pero. ¿Por qué les dijiste que no dijeran nada sobre tu visita? ¿Ocultas algo?- Apretaste tu puño con gran enfado.

-Yo no escondo nada, más bien es su esposo el que le estuvo ocultando las cosas, el personalmente me llamó en la madrugada y me pidió que fuera en secreto.-  Explicaste ansiosa.

-¿De qué hablaron?- Interrogó la señora.

-Me pidió que me divorciara de Leon.- Confesaste.

-Deberías hacerlo. No reportaré nada a la policía si te divorcias de mi hijo. No quiero a una mujer tan peligrosa a su lado.- Respondió con lamento y enojo.

-Por segunda vez... Yo no maté a su esposo.- Masajeaste tu frente con molestia.

Leon, quien estaba apoyado en la pared, con el ventanal semi abierto, escuchando cada palabra que compartían las mujeres por llamada. Tenía un muy buen oído.

Después de unos minutos, colgaste y entraste a la casa.

-¿Con quien hablabas, Cariño?- Preguntó Leon, quien estaba de brazos cruzados y la mirada seria.

Diste un salto ante el susto y pasaste una mano en tu pecho.

-Me asustaste...- Bajaste la cabeza con los ojos cerrados tratando de calmarte, y a la vez rezando porque no haya escuchado la llamada.

-¿Por qué te asustas? ¿Acaso ocultas algo?- Cuestionó poniéndote nerviosa. -Es broma, linda. Ven, me gustaría que cocinaramos los dos el almuerzo.- Fingió una sonrisa.

-Ahh... Si. Leon, mejor descansa, ¿Si? Voy a darte algo para la hinchazón de los ojos...- Suspiraste con el corazón a mil.

Leon, se acercó a ti y beso tu frente apretando sus manos en tu cintura. Te sentías algo incomoda, como si algo no cuadrara.

-Entonces te espero.- Dijo alejándose mientras caminaba por el pasillo y desaparecía de tu campo de visión en la entrada del salón.

Miraste por el ventanal el jardín, apretando tu mano contra tu pecho con gran susto.

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Cual es la teoría que planteo vuestra cabeza fetichista y creativa? 🥰

Por cierto, cual idea de especial se les venga en la cabeza, es bienvenida y así lo vuelvo un 50/50 por todo lo que se viene. 😀