Spoiler✨📍
Valentín, un joven huérfano, se encuentra con Dante, un misterioso hombre que resulta ser un asesino.
A pesar de sus diferencias, surge un vínculo entre ellos que se convierte en un apasionado romance.
Sin embargo, la relación se ve des...
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Tan solo de pensar que llego el momento de partir, hace que me cuestione algunas cosas. Esta decisión no viene de mí parte, sino del lugar donde estoy viviendo. Las reglas existen y hay que cumplirlas.
Actualmente, vivo en un orfanato donde mis ausentes padres me dejaron abandonado, esta casa, en especial está hecha de una madera de roble extraída de los bosques de Brasil. Posteriormente, fue pintada de negro por los antiguos dueños del lugar por allá en 1450. Las maderas ya rechinaban cuando uno caminaba por los pasillos. Además, sus grandes habitaciones han dado pie a que halla bastantes niños y niñas viviendo aquí.
Las camas siempre estaban divididas en varios sectores, a lo cual los niños tenían la libertad de poder elegir donde querían dormir. La mujer que cuida el lugar, de nombre "Maribella". Una señora de tan solo 40 años de edad, Su piel es negra y tiene una gran melena color negro. Su actitud y amor hacia los chicos hicieron que tome la decisión de cuidar de estos. Siempre está al tanto de poder brindarles lo mejor en cada uno de sus aspectos.
La duda siempre invadió mí mente, nunca supe que había pasado y ni el porque me habían abandonado, hasta que pregunte por ello. Desde los 14 años estuve dando vueltas alrededor de Mari ("Apodo que le pusimos por amor hacia ella"), para que me contara mí historia y como había llegado aquí. No fue hasta los 18 que se dispuso a contarme cómo fue todo. Tomo una gran taza para servirnos el té a todos y nos sentó en la gran mesa que adornaba el living principal de la casa
Según lo que recuerdo, fue una noche de invierno, más específico, un 15 de abril. Ella se encontraba armando unos papeles en su oficina, sus ansias por poder dormir invadieron su mente. Cuando se estaba dirigiendo hacia su habitación, un timbre se oyó en todo el lugar. Extrañada por el horario, tomo valor y fue a abrir la puerta para descubrir que había detrás de la misma. Al mirar hacia abajo, había una canasta pequeña que, en su interior, tenía envuelto un pequeño bulto. Mari ya estaba acostumbrada a que millones de chicos pequeños sean abandonados en estás situaciones. Lo tomo y entro al lugar, al destapar un poco, descubrió un pequeño niño, su piel de blanca y su pelo de un color casi negro. Lo miro y sonrió, "Es muy lindo" había dicho ella. Miro un poco más a su costado y en un movimiento, tomo al bebé en sus brazos. Al momento de levantarlo, un pequeño papel blanco cayó sobre sus pies. Está se agachó a tomarlo.