🍃Capítulo 7🍃

468 69 162
                                    

Hasta el fin del mundo.

Los primeros en recibir la noticia del compromiso fueron Jeon Yugyeom y Jiwoo, ambos padres con asombro reflejado en sus miradas.

Yugyeom escuchaba atentamente a su emocionado hijo, quien narraba cómo se había dado la propuesta hace un par de horas atrás, siéndole imposible borrar la sonrisa de su rostro.

Se levantó de su sitio y se acercó a Jungkook para abrazarlo fuertemente. Él siempre lo apoyó en todas sus decisiones, lo alentó a seguir sus sueños y cumplir sus propósitos. Esta vez no sería la excepción, pues al verlo tan eufórico ante la idea de contraer matrimonio con el hombre que adora, no puede hacer más que situarse junto a él y acompañarlo en esa nueva etapa.

Por otra parte, era de esperarse que la expresión de felicidad por parte de Jiwoo no fue real. Tratando de mostrar su mejor sonrisa se aproximó a su futuro yerno para abrazarlo, con la incomodidad reflejada en sus ojos. Taehyung lo sintió, lo vio, pero de cualquier manera se colocó de pie y aceptó el abrazo más hipócrita que cree jamás le han dado.

Y pregúntenle a él sobre lidiar con gente así en el pasado.

Durante esos años había aprendido a leerla, comprendió mejor la manipulación que ejercía con Jungkook. Darle espacio, independencia y dejarlo ser libre... Pero no lo suficiente como para que él quisiera dejarla.

Para la triste desgracia de Jiwoo sus artimañas no siempre se concretaban porque cada que Taehyung tenía la oportunidad, protegía a Jungkook de las inseguridades o comentarios mal intencionados que ella soltaba en tonos de madre preocupada.

Por supuesto que en ese tiempo ella intentó incordiar contra ellos. Diciéndole a su hijo que Taehyung estaba unos peldaños más arriba de su posición social y eventualmente no le sería suficiente, buscaría a quien pudiera corresponderle al menos económicamente y -aunque la familia Jeon posee cierto status social elevado- él no estaba al nivel de los Kim y debía aterrizar.

Y vaya que había logrado sembrarle dudas a Jungkook en su cabeza. A los días de esa charla, entre lágrimas del dolor que la sola idea de ser abandonado por Taehyung le provocaban, trató de ponerle fin él mismo a la relación. ¿Sus argumentos? los mismos que dio su madre.

Taehyung no daba crédito a las excusas absurdas de su novio en ese momento y es que no sonaban a él, pero por supuesto que sabía quién era la responsable de esa obra.

"No soy el ideal para ti."

"Encontrarás a alguien que si vale la pena."

"Yo no puedo corresponder todo lo que me das a como es merecido."

Una estupidez tras otra simplemente, desde su perspectiva.

Contraatacó esas palabras sin sentido, recalcando lo mucho que lo amaba y lo adoraba pero más importante aún, haciéndole ver todos y cada uno de los momentos donde los hechos y acciones tomaron mayor validez.

Logró tranquilizar a Jungkook y hacerle desistir de la idea para finalizar su relación, pero le tomó mucho tiempo erradicarle los constantes temores de su mente y eso es algo que Taehyung jamás le iba a perdonar a Jiwoo.

— Mis más grandes felicitaciones. —pronuncia Jiwoo mientras aún abraza a Taehyung. —Tienes contigo a la joya más preciada del mundo.

Taehyung elevó brevemente la comisura de sus labios con un gesto de incomodidad hacia ella. Se apartó del abrazo para luego recibir uno de Yugyeom, acompañado de un par de palmadas en su espalda, lo cual si fue sincero. —Agradezco su aprobación. Pedir la mano de Jungkook en matrimonio era una idea que hace tiempo ya me hacía ilusión.

Pensando en Ti || TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora