Mes Feligami

Defensa

Félix y Kagami practican esgrima en el Jardín de las Tullerías.

Kagami: (Bloquea sus ataques) -Vas mejorando, Félix. Te defiendes bien-

Félix: (Le coquetea) -No solo tengo a la mejor novia del mundo, sino que también tengo a la mejor maestra-

Kagami: -Buen Intento, Félix. Pero tus coqueteos no harán que baje la guardia-

Félix: (Ríe, reconociendo la respuesta de su novia) -Lo tendré en cuenta, mi Reina. Aunque siempre es divertido intentarlo mientras practicamos-

Félix y Kagami continuaron su práctica de esgrima en el Jardín de las Tullerías, intercambiando golpes y movimientos con gracia y precisión. El sol de la tarde bañaba el lugar, creando una atmósfera tranquila pero llena de energía. Entre risas y bromas, seguían perfeccionando sus técnicas, disfrutando cada momento juntos.

Kagami con un golpe rápido logró derribar a Félix, quien quedó momentáneamente sorprendido por la habilidad de su novia y compañera.

Kagami: (Pone su espada en el pecho de su novio) -¡Tuche!- (Se ríe) -Sabes que me encanta ganar- (Félix se quita su careta y sacude su cabello y lo mismo hace Kagami)

Félix: -Lo sé-

Kagami le da la mano y Félix la toma y se levanta.

Duusu: -El esgrima les ayuda a enfrentar a cualquier villano que amenace a París-

Félix asiente con determinación, mientras Kagami sonríe y aprieta su mano con afecto.

Félix: -Tienes razón, Duusu. Estamos comprometidos a proteger a nuestra ciudad, ya sea en la esgrima o en cualquier otra situación que se presente-

Kagami: -Y estaremos listos cuando Ladybug y Chat Noir nos necesiten-

Long: -Sin duda, ustedes dos son un gran equipo y Paris está en buenas manos con su dedicación y valentía-

Félix: -Nuestra defensa debe ser impenetrable-

Long: -La impenetrabilidad viene no solo de la habilidad con la espada, sino también de la confianza mutua y la coordinación. Recuerden, defender a París es un trabajo en equipo-

Kagami: -Félix y yo hacemos un gran equipo-

Félix: -Es cierto. Aunque no me guste trabajar con el resto del equipo, al menos aporto algo- (Kagami rueda los ojos)

Kagami: -Nunca vas a cambiar ¿o si?-

Félix: -Solo el tiempo lo dirá- (Kagami lo mira fijamente alzando una de sus cejas) -Está bien. Lo intentaré por el bien del equipo y por supuesto, por ti, mi Reina-

Kagami sonríe ligeramente, sintiéndose alentada por la respuesta de Félix. Ambos guardan sus espadas.

Kagami: -Eso es lo que quiero escuchar. Ahora, vamos a descansar, creo que nos vendría bien un jugo-

Félix: -Un jugo suena refrescante. Vamos, yo invito-

Kagami: -Félix-

Félix: -Sabes que no voy a aceptar un no como respuesta-

Kagami: -Está bien, pero la próxima vez, el jugo será por mi cuenta. ¿Hecho?-

Félix: -¡Hecho! Será un trato justo. Y prometo no intentar coquetear para conseguirlo la próxima vez- (le guiña el ojo de nuevo)

Kagami ríe suavemente, sintiéndose feliz por la complicidad entre ellos.

Kagami: -Estoy segura de que encontrarás otra forma de sorprenderme, Félix. Eso es parte de lo que me gusta de ti- (Le devuelve el guiño con una sonrisa traviesa)

Ambos ríen, disfrutando de la conexión especial que comparten. Ambos toman sus pertenencias y sus kwamis regresan a sus escondites. Félix toma suavemente la mano de Kagami, sintiendo el calor reconfortante de su tacto. Kagami corresponde al apretar suavemente los dedos en respuesta, transmitiendo un sentido de unión y complicidad.

Félix: -Espero que este momento juntos haya sido tan especial para ti como lo fue para mí, Kagami- (Dice con sinceridad, mirándola con ternura)

Kagami asiente, su mirada reflejando el amor y la gratitud que siente por Félix.

Kagami: -Cada momento contigo es valioso para mí, Félix. Tu presencia ilumina mi día- (Expresa con suavidad, apretando un poco más la mano de él y después le da un beso en la mejilla)

El beso en la mejilla de Kagami es como un dulce bálsamo para Félix, reafirmando la conexión especial que comparten. Se siente agradecido por tener a Kagami a su lado y promete valorar cada instante que pasan juntos.

Con una mirada llena de determinación y amor, Félix y Kagami se dirigen hacia el quiosco de jugos cercano, listos para disfrutar de un merecido descanso y planificar su próxima aventura juntos. Con cada paso, su vínculo se fortalece, listos para enfrentar cualquier desafío que el destino les depare, sabiendo que siempre tendrán el apoyo y el amor del otro.