capitulo 8 Los Latidos del Futuro

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Los meses pasaron, y la vida humana de Douma y Angel se llenó de rutina y amor. Se despertaban juntos, compartían desayunos y paseaban por el bosque. Pero Angel llevaba un secreto en su vientre, uno que la llenaba de alegría y miedo a partes iguales.


Una tarde, mientras el sol se ponía detrás de los árboles, Angel preparó una sorpresa para Douma. Lo llevó a un claro en el bosque, donde las flores silvestres crecían en profusión. Douma la miró con curiosidad.


"¿Qué estás tramando?" preguntó.


Angel sonrió, nerviosa. "Cierra los ojos", dijo. "Es una sorpresa".


Douma obedeció, sintiendo el corazón latir con anticipación. Escuchó los pasos de Angel, y luego, sintió algo en sus manos. Cuando abrió los ojos, vio un pequeño par de botitas tejidas a mano.


"¿Qué es esto?" preguntó, confundido.


Angel lo miró, sus ojos brillando. "Es para nuestro bebé", dijo. "Estoy embarazada, Douma".El mundo pareció detenerse. Douma miró las botitas, luego a Angel. "¿Un bebé?" susurró.Ella asintió. "Sí. Nuestro bebé".


Pero la reacción de Douma no fue la que ella esperaba. No hubo risas ni abrazos. En cambio, Douma se alejó, su rostro inexpresivo.


"¿Por qué no me lo dijiste antes?" preguntó. "¿Por qué ocultaste esto?"


Angel se sintió herida. "No quería presionarte", dijo. "Pensé que estarías feliz".


Douma la miró con dureza. "No puedo ser feliz", dijo. "No después de todo lo que hemos pasado. No después de lo que soy".


Angel intentó acercarse, pero él la detuvo. "No quiero ser un padre", dijo. "No puedo. No merezco esta felicidad".


Las lágrimas llenaron los ojos de Angel. "Pero Douma", suplicó. "Nuestro bebé merece una oportunidad. Merezco una oportunidad".


Douma la miró, su corazón en conflicto. "Una semana", dijo. "Tienes una semana para decidir. ¿Quieres seguir adelante con esto o no?"


Y así, los hilos del destino se tensaron una vez más. Angel llevó las botitas en su vientre, sintiendo los latidos del futuro. Pero Douma seguía atrapado en su pasado, incapaz de ver más allá de las sombras.


El abismo entre ellos se ensanchó, y Angel se preguntó si su amor sería suficiente para salvarlos a ambos. Porque a veces, incluso el amor más profundo puede romperse en pedazos.

Amor y demonios una combinación raraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora