Iván y ___ caminaban de la mano por la orilla del río, disfrutando del suave murmullo del agua y el cálido sol de febrero. Habían decidido pasar el día juntos, lejos del bullicio de la ciudad, y el ambiente tranquilo y sereno del río era el escenario perfecto para su amor.
Después de unas horas de risas y conversaciones, Iván tomó la mano de ___ con ternura y la miró a los ojos con un brillo especial.
-quiero llevarte a un lugar muy especial esta noche.- dijo Iván con voz sueve
___ asintió con curiosidad, emocionada por lo que Iván estaba planeando. Más tarde, al caer la tarde, se encontraron en la entrada de un impresionante rascacielos. Subieron en el ascensor hasta llegar al restaurante en la cima, donde una vista panorámica de la ciudad se extendía ante ellos, iluminada por las luces del atardecer.
El ambiente en el restaurante era íntimo y acogedor, con música suave de fondo y el suave murmullo de las conversaciones de otras parejas. Se sentaron en una mesa junto a la ventana, con vistas a la ciudad que se extendía hasta donde alcanzaba la vista.
Durante la cena, Iván y ___ compartieron platos exquisitos y conversaciones profundas. Recordaron momentos especiales de su relación, se rieron de anécdotas pasadas y soñaron juntos sobre el futuro que les esperaba.
A medida que avanzaba la noche, el nerviosismo de Iván crecía. Sabía que este era el momento que había estado esperando, el momento en que le pediría a ___ que fuera su esposa. Se sentía emocionado pero también ansioso; quería que todo fuera perfecto.
Finalmente, cuando llegó el momento del postre, Iván supo que era el momento adecuado. Tomó la mano de ___ con ternura y la miró a los ojos con amor y determinación.
-___- comenzó, su voz llena de emoción.
-hay algo que he querido decirte desde hace mucho tiempo-
___ lo miró con curiosidad, sintiendo el latido acelerado de su corazón. Sabía que algo importante estaba a punto de suceder.
-Desde el momento en que te conocí supe que eras especial. Tu amor ha iluminado mi vida de una manera que nunca antes había experimentado. No puedo imaginar un futuro sin ti a mi lado.-
Las lágrimas de felicidad llenaron los ojos de ___, conmovida por las palabras sinceras de Iván. Sabía lo mucho que la amaba, pero escucharlo expresar sus sentimientos de esa manera la llenaba de una felicidad indescriptible.
Iván se arrodilló ante ___ y sacó un pequeño estuche de terciopelo de su bolsillo. Con manos temblorosas, abrió la caja para revelar un hermoso anillo de compromiso. -__, ¿te casarías conmigo? ¿Aceptarías ser mi compañera de por vida, mi amor eterno?-
___ apenas podía contener la emoción mientras asentía con vehemencia.
-Sí, Ivi, sí mil veces- dijo con voz entrecortada por la emoción. Iván deslizó el anillo en el dedo de ___ y se levantó para abrazarla con fuerza, sintiendo la dicha y la certeza de que estaban destinados a estar juntos para siempre.
El resto de la noche lo pasaron celebrando su amor, con la ciudad brillando a sus pies y el futuro extendiéndose ante ellos lleno de promesas y sueños compartidos.
