Si le gusto, me llevará a casa. [Miguel O'Hara x Miles Morales]

Capitulo 14

Ella corrió, corrió hasta que sus pulmones estallan por culpa de la falta de aire. Debe darse prisa y llevarlo.

Los autos y las personas se arremolinan a su alrededor, como si lo hicieran a propósito. Como si ellos supieran.

No sabían nada.

Su corazón late tan fuerte que podría salir en cualquier momento, es tan difícil volver una vez más. 

Tenía que llegar, tenía que poder llegar a él, solo una vez más.

Gwen cierra los ojos mientras las lágrimas traicioneras se escapan y se siente patética por eso. 

Al principio no estaba lista para enamorarse, no podía después de Peter, èl había sido todo para ella y simplemente se fue, sin más. Todos la culparon, nadie podía creerlo.

¿Cómo la mujer alfa que tanto prometía protegerlos había matado a un Omega de secundaria? Su padre entonces quiso asesinarla.

No había lluvia entonces en esta Nueva York pero se sentía que el frío de algo mojado inundaba su ser, tal como una cubeta de agua fría.

Después de ese evento prometió que sus sentimientos no se desbordarían, jamás. Luego llegó Miles y todo se perdió. No pudo predecir que èl terminaría en el enredo del que ahora permanece. 

Miguel debió dejarlo ir, no debió de aprisionarlo, no debió de estar ahí.  Y èl tenía razón, ellos entregaron a Miles en bandeja de plata y lo dejaron ahí. No pensaron que terminaría de ese modo, todos fueron tan ciegos. E idiotas.

No podía abrir el portal cerca del edificio de Miles, una vez que su presencia fuera detectada la llevarían a la cárcel o peor la madre de Miles la mataría. 

Entonces corre del pequeño callejón rumbo al edificio, es gracioso que lo sepa de memoria, el último recuerdo no era lindo para recordar y la única vez en donde pudo disfrutar su presencia ella se alejó. 

“También eres un alfa, querías joderlo” 

La bilis sube como una maldita araña y puede sentir ese sabor por su boca. La irá se supone sobre el miedo debajo de las uñas, por supuesto que ella tiene miedo. Lo que tanto evitaba, lo que Miguel se suponía que debía proteger, ahora estaba aquí y no podían hacer mucho. 

—Necesito…

—Necesito… 

¿Qué necesitas exactamente? 

Se detiene frente al edificio de Miles, las ventanas están cerradas, la luz en el cielo apenas llega a hacer un atardecer, èl debe de estar dormido o haciendo alguno de sus trabajos de la escuela. Es sábado en la tarde, no es como si pudiera alejarse demasiado.

Si se metiera por la ventana sorprendería a Miles y se asustaría terriblemente, pero, si se para enfrente de la puerta sus padres la matarían a ella. Aún tiene ese ardor en la mejilla y simplemente pensar en algo como eso le hace tener un escalofrío. 

Pero ella se llevará de nuevo a su hijo. 

—Solo tengo una semana.

Podría convencer a Jess de que le diera otras pulseras para llevarse también a sus padres y así mantenerlos todos juntos en el cuartel pero, si ella hacía eso ¿El canon se rompería? 

La Mancha de todas formas destruiría este universo si no lo detienen, pero si lo hacen ¿Tendrían  que hacer que el padre de Miles muriera de otra forma? Miguel sin duda se daría cuenta eventualmente de las nuevas formas de vida en su dimensión, estaría Miles en la boca del lobo nuevamente. Y èl la odiaría para siempre.