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Estaba sentada sobre la cama de Stan mirando a esa bebe quien estaba recostado de espaldas. Ella estaba despierta, pero no hacía mas que mirar a Kenny. Su casa era pequeña, sucia y fría, por lo tanto trajeron a la niña a casa de los Marsh. Ellos dos parecían estar haciendo un concurso de miradas pues no hacían mas que mirarse.

Stan entro a la habitación, con el pelo mojado y una toalla al rededor del cuello, acababa de salir de la ducha. — Que haces? — dijo mientras se acercaba a ellos.

— Esta niña tiene algo raro, no deja de mirarme. — Dijo sin quitarle la vista de encima. Ella ahora no solo miraba a Kenny, miraba a Stan también.

— Es una huérfana, seguramente tiene traumas de abandono o algo así. — Stan se sentó al lado de la niña, dejándola así entre medio de ambos. Acarició suavemente su mejilla. — Pobrecita —

— ¿Es posible? Quiero decir... es un bebé, como puede tener conciencia de eso? —

— Justamente porque es un bebé. — No se resistió a esa carita, terminó por tomarla en brazos abrazándola contra su pecho. — Son vulnerables, necesitan a mamá y papá para sentirse seguro y protegido —

— Entonces, tu te quedaras con la niña todas las noches? — Dijo por obvias razones y cambiando totalmente el tema.

— No me parece muy justo... Tu te quedaras con ellas todos los días? — preguntó para hacerle ver lo tonto de su pregunta.

— ¿eh? No es justo durante la noche dormiría tendrías lo fácil! —

— Los bebés no duermen toda la noche, no me dejaría dormir! —

Hubo un momento de silencio entre ambos tratando de buscar soluciones. Como le hacían los padres divorciados para compartirse la custodia? Aunque no podía dejar que se fuera a casa de Kenny. Marsh suspiró. La solución era evidente pero no se le hacía fácil de aceptar. — Múdate conmigo — dijo.

— ¿Como? — Aun eran estudiantes y cada uno vivía en casa de sus padres, eso era tonto.

— Solo por un tiempo, mientras pasamos esta prueba. Mi cuarto es grande estaremos bien los tres aquí. —

— ¿Y tus padres? —

— Yo hablare con ellos. —

Los padres de Kenny eran unos drogadictos alcohólicos, seguramente se alegrarían de tener una boca menos qué alimentar. Acepto la propuesta de Stan, empezarían a vivir juntos para cuidar del microbio. El chico tampoco se molestó de ir a avísale a sus padres que no iría esa noche a casa, no tenían teléfono y era tarde. Sin contar que seguramente sus padres no se darían cuanta que no esta, no es la primera vez que pasa la noche fuera sin avisar.

Los padres de Stan tampoco fueron difíciles de convencer. Claramente la madre de esté prefería que su niño y su "hija" se quedaran en su casa que en a casa de los Mccormick. Por parte del padre de Stan, este con tal de fingir ser el padre cool, le aceptaba cualquier caprichos a sus hijos.

~~

La cama de Stan era muy cómoda y calentita. Stan estaba acostado al borde de la cama, de costado. La niña estaba al medio, dormida de espaldas. Kenny estaba acostado contra el muro, de costado igualmente. Kenny le daba suaves palmaditas al estómago de la niña. Ambos chicos estaban despiertos, aunque cansados. Miraban a la niña con los ojos entrecerrados, apunto de dormirse.

—Sabes— Hablo Kenny de un tono bajo y cansado. —Estoy cansado de llamarla "niña" o "bebé"—

—Quieres ponerle un nombre?— preguntó Stan con el mismo tono.

—Ponerle un nombre....— Detuvo sus palmadas pues ya estaba dormida, pero dejando su mano sobre ella. Eso era algo increíble, ahora mismo tenía el poder de elegir como alguien se llamaría el resto de su vida.

—Que nombre sería bonito?—

Luego de unos momentos de reflexión, Kenny propuso —Stella?—

Stan río. —Quieres ponerle un nombre parecido al mio?—

—¿Porque no?— Sonrió mientras levantaba la vista al chico del frente. —Es tuya después de todo.—

–En ese caso...— Stan colocó su mano sobre la de Kenny para poder sentir la respiración de la pequeña también. —Yo propongo Kelly— Sugirió siguiéndole el juego a Kenny.

—Stelly!— hablo un poquito más fuerte por la emoción.

—Que nombre mas feo— Stan no pedia quitarse esa sonrisa del rostro. Bien que Kenny era su amigo de años, era la primera vez que tenían un momento como este. Se sentía cálido, tranquilo y pacifico.

—Tu si que tienes un nombre feo— Bromeo Kenny. Bostezo. Sus ojos se fueron cerrando mientras Kenny era consumido por el sueño.

—Mañana pensaremos en algo...— Dijo Stan antes de empezar a cerrar los ojos también. Se sentía bien dormir con alguien más. No se sentía solo.

Papás ♡ (Stenny)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora